4. DADDY!

4. COMPROMISO NUPCIAL

El aeropuerto de Beijing dio la bienvenida a cinco de los rostros más bellos del mundo, que desfilaron presurosamente hacia el servicio de renta de autos. Necesitaban llevar a Luhan de regreso a casa.

El primer lugar que visitaron fue la casa del abuelo de Luhan. La abuela, una mujer de bastantes años cabello gris y ojos grandes brillantes y expresivos, estaba ahí pero no parecía muy preocupada, solo cuando vio a Sehun aparecerse entre el grupo de distinguidos hombres.

—Disculpe, señora —Junmyeon habló primero luego de que ella relatara su versión de la historia. —¿Cómo es posible que en estos tiempos tan modernos todavía exista gente que comprometa a sus hijos o nietos al nacer?

—Entiende, muchacho, que esta es una familia muy tradicionalista. Y la hija del señor Guan era el mejor prospecto en nuestra ciudad, tuvimos suerte de...

—¿Suerte? —Sehun vociferó poniéndose de pie —¡Cómo puede pensar que está bien elegir algo tan importante por alguien más! ¿Y si Luhan nunca llegaba a amarla? Jamás sería feliz... —Sehun estaba mucho más que molesto, no le importaba estarle gritando a una anciana. Su hermano y sus amigos nunca lo habían visto tan fuera de sí. —Esto es tan estúpido. ¡Fue por eso que la mamá de Luhan se fue de este país! Para no volver a verla, vieja loca —la señora se removió inquieta, a pesar de ser fría, parecía ser que había tocado un punto sensible para ella.

—Ella fue una tonta al casarse con ese insipido mecánico, no tenía ningún derecho, habíamos elegido a alguien de buena familia para ella. Fue una completa vergüenza para la familia. Al menos su hijo resultó tener mejores gustos, aunque sea un homosexual —dijo, dándole una mirada de desprecio a Sehun. —Pero no importa, XiaoTong podrá enderezarlo.

Todos guardaron silencio.Yixing fue el primero en salir de ahí antes de decir o hacer algo de lo que pudiera arrepentirse más tarde. Los demás le siguieron.

Baekhyun miró su reloj. El tiempo parecía avanzar más rápido de lo normal.

—Es algo muy común aquí —Yixing los miró a todos a través del espejo retrovisor del auto que habían rentado. —Todo se documenta con un notario... es como un contrato.

—¿Es legal? —Baekhyun preguntó frunciendo su ceño. Estaba sentado en la parte trasera del auto, entre Sehun y Minseok. El chino asintió con pesar.

—¿Eso quiere decir que el matrimonio con Sehun nunca fue válido? —Junmyeon preguntó asombrado.

—Es probable —Baekhyun suspiró pesadamente. —Busquemos al gobernador —dijo.

—¿Y tú crees que entraremos allá tan fácil como cuando nos metimos al departamento de Marc y Minseok? —Yixing rebatió.

Minseok sonrió. —¿Y como está él, Marc? —preguntó.

—Bien. Tiene una pareja estable, trabaja en el mismo lugar... No es que lo mantenga vigilado —Yixing respondió.

—Dudo mucho que a Jongdae le agrade saber que andas por ahí preguntando por tu ex —Baekhyun dijo en un tono demasiado afilado.

La sonrisa de Minseok desapareció instantáneamente, siendo reemplazada por un gesto de molestia.

—A Jongdae le molestaría incluso que mirara mi sombra por mucho tiempo, pero por suerte no está aquí —Minseok se defendió airadamente.

Todos guardaron silencio mientras observaban a Baekhyun y a Minseok. Parecía ser que Baekhyun quería agregar algo más en defensa de su mejor amigo, pero se mordió la lengua. —Busquemos al gobernador —dijo finalmente, sin mirar a Minseok.