Ojos Ambar

Un cambio inesperado

Un grito desgarrador me despierta de mi sueño, trato de levantarme torpemente de la cama, y lograr definir ese ruido aterrador <<¿habrá sido parte de un sueño?>> no logro conectar lo real de lo que no lo es, aún estoy bastante adormilada, miro de reojo mi celular - ¡ las 2 de la mañana!- esto tiene que ser una broma de mal gusto a las 8 tengo el que podría ser el parcial más importante de mi semestre, -!Dioss!-los nervios y la ansiedad deben estarme jugando una mala pasada, o eso creía, pero ahí estaba de nuevo ese grito que logra calarse en mis huesos, al menos esta vez que lo escucho ya me encuentro más cociente, el terror se apodera de mí y como si no fuera suficiente un mal presentimiento atraviesa mi pecho; trato de conectar mis ideas y obligarme a salir de mi habitación, las manos me tiemblan a causa de los nervios que poco a poco se va apoderando de todo mi cuerpo, pero hago caso a mis instintos y a las recomendaciones que mi padre siempre me ha hecho cuando me enfrento a situaciones de este tipo, tomo una gran bocanada de aire con la firme intención de ir en busca de consuelo y tranquilidad con mis padres y como siempre, la curiosidad prima ante todo, quiero saber de dónde vinieron esos gritos, con un poco de dificultad logro abrir la puerta de mi habitación y dirigirme a la de mis padres, pero ahí estaba de nuevo ese desgarrado sonido..... Otro grito, pero en esta ocasión es más ahogado, este tenía menos fuerza como si estuviese perdiendo la fuerza vital con cada alarido, o lo que me quiero aferrar a creer, se está alejando; pero justo cuando quiero convencerme de la segunda opción, lo escucho de nuevo... aunque más débil; una fuerte opresión en mi pecho se hace presente, y con cada paso que doy por el corredor acercándome a la habitación de mis padres este dolor se hace más fuerte.

Cuando logro entrar en la habitación, un escena que jamás pensé podría presenciar se muestra ante mis ojos, me encuentro con mi mamá tirada en el suelo y un sollozo acompañado de un grito ahogado sale de mi pecho, me acerco a ella con gran rapidez y noto que está bien.... esta viva -¡gracias a cielo!- pero entonces logro distinguir ruidos en la parte trasera de la casa, y por inercia descubro que mi papá no está, el terror se vuelve más marcado al recordar los gritos que he escuchado en lo que podría ser bastante tiempo, aunque en realidad no han pasado más de 3 minutos desde que me despertó el primero, salgo desesperada en busca de mi padre, ahora el miedo no logra paralizarme todo lo contrario, hace que me mueva con bastante rapidez y convicción para hacer frente a lo que sea que este sucediendo, <<¿Quién puede estar interesado en nosotros?, somos una familia promedio en un barrio que puede considerarse de clase media-alta pero todo lo hemos conseguido con años de esfuerzo, no tenemos grandes bienes y mis padres no se meten con nadie, de hecho varios vecinos nos han considerado como una familia modelo, amorosa y unida>>.

Salgo precipitada a la zona trasera de mi casa donde se encuentra la piscina que construimos con mi papá cuando termine mi colegiatura, y no doy crédito a lo que mis ojos logran enfocar varios metros más al fondo, un cuerpo tirado en el césped, y ya no tengo esa convicción de hace unos segundos, toda esa fuerza y entereza que logre acumular se desvaneció al ver que aquel cuerpo es de un hombre y no solo eso, tiene puesta la pijama que suele usar mi papá, las lágrimas empiezan a salir junto con un sollozo, me dirijo torpemente hacia aquel cuerpo rogando.... implorando que no sea él que esto solo sea un mal sueño, pero no es así, es el...... me aferro a su cuerpo, tomo su cabeza y la coloco delicadamente en mi regazo, las lágrimas hacen que mi visión sea borrosa y mis sollozos hacen que mi pecho arda al no poder respirar de forma correcta

-¡PAPÁA!- grito mientras mis manos acarician de forma temblorosa su rostro manchado de sangre y con de múltiples colores, su rostro esta hinchado por la cantidad de golpes que recibió, pero eso no es lo más grave, si no la cantidad de sangre que emana su abdomen y su pecho, alcanzo a divisar grandes heridas a través de su rota pijama.

-p papá por favor ha háblame- logro articular entre sollozos

– papá por favor no me dejes, no nos dejes, mamá y yo te necesitamos- mi padre abre un poco sus ojos y me mira fijamente, con gran dificultad, una sonrisa trata de formarse en su lastimada boca.

– Mi niña, Mi p pequeña- a duras penas logra decir esas palabras su voz suena tan débil y no puedo hacer nada más que besar su frente y llorar más ante la impotencia que siento a tener su cuerpo entre mis brazos y lo débil y frágil que esta << siempre ha sido tan fuerte, tan protector, él es el pilar de esta familia, como me duele verlo de esta forma ¿Quién pudo hacerle esto?>>

- Esc cuch chame hija, ya no p puedes hacer nada p por mi- logra articular con gran dificultad y pausadamente.

– Eres la luz de mis o ojos l lo m mejor que me p paso, t tu y t tu madr dre- Esas palabras suenan a despedida, y no puedo aceptarlo, no puedo perder a mi papá, trata de tocar mi rostro con sus manos, ayudo a que acune con su mano mi mejilla, y veo como unas lágrimas salen enmarcando su rostro... me observa con los ojos más llenos de amor que jamás haya visto.

-¡No hables papá!.. Guarda energías vas a estar bien me escuchas- le digo entre sollozo acariciando su rostro, no puedo permitir que siga hablando como si fuera una despedida, como si jamás lo fuera a volver a ver, <<!Esto no puede estar pasando!>>

-P promete teme que s seguirás siendo l la m misma m mujer sonriente d de si siempre-hago más presión sobre la mano que tiene en mi rostro, mientras su imagen se torna borrosa a causa de las lágrimas que no me dan tregua.

-No papá, vamos a salir de esto no te despidas por favor-.

-Y ya es toy m muerto, s solo p prométemelo, q que s serás fe feliz, N no dejes q que el odio t te haga p perder t tu humanidad- no entiendo que quiere decir con esas palabras "perder mi humanidad" ¿acaso que se supone que significa eso?, aun así no ahondo en ese tema lo único que quiero es darle fuerza y hacerle ver que todo va a salir bien, que él va a esta bien.

-¡Nooo, no te despidas, no me pidas eso , no no no noo, no papa por favor no me dejes, ¿Quién te hizo esto?, no papa no por favor abre tu ojos!!!!- mi desesperación es cada vez mayor cuando su mano pierde toda la fuerza y cae irremediablemente de mi rostro, las frases salen de mi boca de manera apresurada.

-Júramelo, p para poder irme en p paz-. Esto no puede estar pasando realmente mi papá no puede estar muriendo en mis brazos.

–Te lo Prometo papá, Ho Dios!! Te amo tanto papá, te lo ruego no me dejes!-No tengo más opción que aceptar su última petición, ya no tengo fuerza, mi cerebro trata de convencerme que no hay nada que hacer y que lo mejor es que el escuche lo que quiere escuchar.

-Te amo mi pequeña- su voz se desvanece con esas últimas palabras... sus ojos se cierran definitivamente... su cuerpo queda completamente a merced de la gravedad...

Jamás volveré a ver sus hermosos ojos.

Nunca poder escucharlo de nuevo.

Me he quedado sin el hombre más importante de mi vida.

Me aferre no sé por cuanto tiempo al cuerpo de mi papá, mientras sentía poco a poco como se perdía el calor de su cuerpo, el pecho me ardía de una forma que rogaba morir y estar junto a él, es imposible describir el dolor, pánico , terror que se apoderaba de mí en ese momento.

No me había percatado que ya estaba empezando a colarse los primeros vestigios de luz, anunciando un nuevo amanecer, y fue ahí cuando me fije que no estaba sola, entre los arboles logre ver una silueta acurrucada con su cara fija en nuestra dirección, pero tan pronto como tarde en frotar mis ojos y quitarme algunas lágrimas desapareció, simplemente ya no estaba, solo fue un efecto de mi imaginación combinado con el dolor de la perdida.