Mi novio es una Súper Estrella (Justin Bieber)

Capitulo 20: "Perdonado"

CAPITULO 20

-Juro que si me dejas mucho tiempo sola, me iré - Dije y Justin se rió 

-Te prometo que no te quedarás sola Annie - dijo y estacióno el auto - Es aquí 

Bajamos del auto y miles de Paparazzis estaban allí, no podía ver con las luces y Justin me tomó de la mano y tapo mis ojos para que no pudieran dañar mi ojos. Él tenía lentes y además estaba acostumbrado. Escuché preguntas de los Paparazzis como: "Ella es tu nueva novia?" "Que ha pasado con Selena?" "Te seguirás drogando?" Y preguntas que eran para mi "Qué se siente ser el reemplazo de Selena?". Quería pegarle a cada uno de los Paparazzis. Cuando entramos al hotel, Lil Za estaba esperando a Justin pero al parecer a mi no. Justin no le había avisado que yo iba. Él me saludó, pero no con muchas ganas. Tuvieron una conversación privada y parecían discutir. Cuando subimos a la fiesta me dí cuenta qué era lo que discutían. En esa fiesta estaba lleno de chicas semi desnudas, había mucho alcohol y supuse que también había droga. Cuando vi todo eso, me di una vuelta y estaba decidida a irme. Pero Justin tomó mi brazo.

-No te vayas y si no quieres quedarte, me iré contigo - Dijo mirando hacia abajo, como si estuviera avergonzado.

-Este tipo de fiestas no van conmigo, no es mi estilo, si tu quieres arruinar tu vida con drogas y alcohol, es tu desición, yo me largo 

-Annie, yo no sabía que tipo de fiesta era - dijo, pero no lograba convencerme, no creo que fuera la primera vez que Justin esté sometido a este tipo de fiestas, ignoré lo que dijo y seguí caminando hacia la puerta, y esta vez Justin no tomó mi brazo, solo me dejó ir.

¿Qué estaba pasando por mi cabeza?

Bajé por el ascensor, y le pedí por favor a los de recepción que llamen a un taxi. Cuando estaba esperando el taxi, se abre la puerta del ascensor y era Justin. Él venía hacia mí pero intenté ignorarlo. Cuando llegó a mi lado y no me dirigió la palabra, le dió al recepcionista plata, y me tomó la mano forzando a que camine tras de él.

-Súbete al auto - ordenó

-Qué? - Dije - ¿Me traes a una fiesta llena de drogas y chicas desnudas, y ahora me obligas a irme en tu auto, contigo?

-Si - dijo serio, entonces me subí al auto y no emití sonido alguno. Supuse que no tenía opción.

Justin comenzó a conducir, y como yo no conozco mucho las calles de Miami, confié en que me estaba llevando al hotel. Me sorprendí cuando paramos en un restaurante cerca de una playa. La vista era hermosa y él logró convencerme para entrar.

-Puedo recompenzarte con esto? - Dijo y enseguida el mozo sirvió dos platos de Spaghettis. Todo era perfecto. La vista al mar, pequeñas luces que alumbraban en el restaurante, mi comida preferida, no podía pedir nada más. Justin sabía que estaba feliz y disfrutaba que estaba olvidando lo que había pasado. 

-Sé que no fue tu culpa, pero tendrías que haber preguntado, supongo que sabes que Khalil hace este tipo de fiestas. 

-Perdón devuelta, fue un idiota, y también no tendría que haberte jugado la broma en el hotel, es que me gusta divertirme, no tengo límites hasta que los paso. 

-Lo sé Justin, sé que eres así, en estos pocos días me lo has mostrado claramente - dije riendo y logré sacarle una sonrisa

-Cuéntame de ti, Annie 

-Qué quieres que te cuente? - dije, comiendo mi Spaghetti que estaba excelentemente hecho.

-Todo, quiero saber todo de tí 

-Todo? Vas a necesitar más factores para generar confianza, mi querido - dije

-Me estas provocando a hacer cosas que te arrepentirás 

-Si? Cosas como qué? - dije y tomé un poco de Coca cola 

-Ya verás 

JUSTIN

Estaba totalmente lamentado por haber llevado a Annie a esa fiesta que no era de su agrado. Ella lucía demasiado hermosa con ese vestido azul que combinaba con sus ojos, y junto con la noche, era una vista perfecta. Quise llevarla a comer Spaghettis porque sé que es su comida preferida, y aparte para aprovechar a que ella se olvidé de lo imbécil que fui. No quiero que ella piense que soy un drogadicto que va de boliche en boliche o de fiesta en fiesta. Yo quiero que ella saque lo mejor de mí. A veces sentía que tenía que protegerla. 

Tomé su abrigo y se lo puse como todo un caballero, aunque ni yo mismo me la creía, ella reía de mi. La noche empezaba a refrescar pero la luna estaba hermosa y de la playa se podía ver las luces de todos los edificios. La invité a caminar por la playa, era una parte privada del restaurante, nadie ni nada nos molestaría. 

-Cuentame de tu vida complicada Señor Bieber - dijo, parando el camino y poniéndose enfrente de mi. Sentí que una punzada vino a mi panza, esa pregunta era imposible de responder.

-Yo siento que no puedo manejar mi vida.

-Por qué dices eso? Es tu vida en fin

-Es dificil de explicar - dije mirando para abajo

-Estas diciendo que no soy capaz de entenderte?

-No - Reí - Enrealidad, estoy diciendo que es complicaado de explicar

-Ah, entiendo - Dijo, poniéndose a mi lado y continuando el paso - Y por qué me has traído a este restaurante?

-Las primeras veces que vine a Miami, mi madre me trajo a este restaurante y aquí probé el Spaghetti. Por eso es mi comida preferida. - Dije y me puse a pensar que todo en mi vida tiene un por qué. 

-No has respondido mi pregunta 

-Te traje porque quería que me perdonaras, lo he logrado? Dí que sí o me iré y te dejaré sola aquí

-Sé que no lo harás

-No lo haré pero perdóname, te prometo que la próxima vez te llevaré a una fiesta de verdad - Sonrió y eso me hizo muy feliz, definitivamente estaba perdonado.