Capítulo 18

63 7 0
                                    

Unas pocas horas de sueño hicieron regresar mi nivel de emoción de angustia a la ira. Me levanté el viernes por la mañana lista para mandar a Natsu al infierno. Tuve que recordarme a mí misma mientras me preparaba para la escuela que lo odiaba, pero tenía la esperanza que después de muchos recordatorios, este sentimiento podría volverse algo natural. Me puse un lindo vestido de verano y me di cuenta de que se vería muy parecido a Yukino, así que cogí un Jersey de mi armario por si me arrepentía.

Mamá ya se había ido y papá estaría en treinta minutos en el restaurante así que eso me hizo salir rápido de casa sin chocar con él. Durante el recorrido hacia la escuela, ensayé lo que iba a decir. Qué palabras le harían daño, qué expresiones me harían lucir desesperadamente enojada.

Sabía lo que tenía que decirle, se hallaba todo en la palma de mi mano, hasta que entré al estacionamiento ingresando en mi lugar, sólo para encontrar a alguien de pie en la hierba delante de mí, esperándome.

Natsu saludó con la mano, sonriéndome. Un hombre no debería ser capaz de sonreír así, a una chica a la que engañaba.

Por un momento se me hizo un nudo en la garganta, mirando lo que iba a perder, pero rápidamente me recordé que no era mío como para perderlo en primer lugar.

Respiré profundo, y luego abrí la puerta.

—Te ves bien —saludó Natsu.

—No me mires de esa manera —le dije, dándole un portazo a la puerta—. Porque tú no me quitaste este vestido.

La sonrisa desapareció y su rostro se contrajo mostrando confusión.

—¿Alguien se despertó del lado equivocado de la cama?

—Por lo menos no me desperté en la cama equivocada. —Me puse delante del auto, cruzando los brazos.

—Luce —dijo, haciendo una pausa—. ¿De qué diablos hablas?

—No te hagas el tonto conmigo —le advertí—, y no trates de hacerme quedar como una idiota, me dejé engañar por ti un buen tiempo pero ya no puedo más.

—Oye —dijo, levantando las manos y caminando hacia mí—. ¿Qué te pasa? ¿Por qué estás tan enojada? —Trató de abrazarme, pero lo empuje.

—Puedo contestar ambas preguntas con una sola palabra —le dije, frunciéndole el ceño—. Yukino

Sus ojos se abrieron en un segundo.

—¿Qué pasa con Yukino?

Resoplé, tratando de no mirarlo para poder enojarme más.

—He llegado a mis propias conclusiones acerca de Yukino, pero ¿por qué no me cuentas tu historia? estoy segura de que es muy interesante.

Envolvió sus manos alrededor de su cuello, mirando el cielo.

—Yukino es mi amiga.

Me eché a reír.

—¿Una amiga que te invita a entrar en su remolque cargando a un bebe? ¿Una amiga que te saluda con un lindo pequeño vestido y se abre de piernas para ti? Después que el bebé se queda dormido, por supuesto.

—Fuiste allí anoche —dijo, para sí mismo—. Tuve esa sensación de que te encontrabas allí y resulta que tenía razón —dijo mirándome directamente.

—Sí, tienes toda la razón, estuve allí anoche —le dije—. Y lo vi todo.

—¿Y por qué fuiste ahí? —preguntó, manteniendo la calma—. ¿Por qué me sigues?

Nalu - CRASH (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora