♣Capítulo 42♠

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Nagisa estaba sentado junto a Yuuka en él sofá de la casa observando los Backyordigans, al parecer esos "bichos coloridos" como les decia Karma, mantenían hipnotizado a su bebé.

-Mamá, más "abua"- él pequeño pelovioleta levantaba su biberón observando a su mamá.

-Claro mi cielo- Nagisa con algo de dificultad se dirigió a la cocina para volver a llenar él biberón para llevárselo al mini karma, —"Realmente saco todos sus genes" —

Yuuma y los chicos siempre le decian eso cuando observaban a ese pequeño revoltoso jugar.- Yuuka, ven por tu biberón, mamá esta cansada.- Él peliceleste se sentó en una de las sillas de la isla de la cocina, sus pies se estaban hinchando demasiado, su vientre estaba enorme y sus bebes estaban demasiado inquietos, realmente estar baradado de gemelos le complicaba demasiado; poco a poco sintió unos rápidos pasitos llegar a la cocina.- Toma corazón.

-Gashias, Mamá- Él pequeño tomo su biberón lentamente mientras miraba la pancita de su mamá- mamá... ¿puedo tocal?- con sus curiosos ojitos volvió a observar la panza de mamá; él peliceleste sonrió.

-Claro que puedes, aquí están tus hermanitos- él pequeño acaricio lentamente con su pequeña manita sintiendo unos golpecitos- ¿lo sentiste? Te están saludando, el pequeño pelivioleta sonrio con sus ojitos brillando de la curiosidad al sentir esos pequeños golpecitos dentro de la pancita de su mama.- Bebé, ve a la sala para ver televisión, ¿si? Mama tiene que preparar la cena.

El pequeño pelivioleta camino con pequeños y torpes pacitos de vuelta a la sala para ver televisión- Con cuidado Amor... Mmmm... Cocinare Katsudon...- Nagisa tomo una olla, agregó agua y las algas kombu, encendio la estufa y coloco la olla a hervir; mientras saco la carne del refrigerador junto con los huevos y los otros ingredientes, la harina, el cebollin, el arroz, la salsa de soya, el mirin, el sake y el panco.

Realmente el peliceleste no podía comer demasiadas calorías o carbohidratos, pero este era un pequeño antojo que habia aparecido hace algunos dias y ya no podia seguir ignorandolo, ya que, segun su mama el ignorar un antojo le podia hacer daño a los bebes. Encendio el reproductor de musica, tarareando comenzo a preparar el "katsudon", debia preparar varios tazones, ya que vendrian yuuma con hiroto, lo que le daba mala espina, cuando esos dos se juntaban con karma solo provocaban desorden. El menor estaba tan inmerso en lo que estaba haciendo que no se percato que su esposo estaba observandolo desde la puerta de la cocina, realmente a Karma le encantaba ver a Nagisa cocinar, se movia con gracia por el lugar, ademas que cocinaba muy rico, sin poder aguantar mas se acerco por la espalda y le beso la nuca haciendo que el pequeño se asustara y lanzara el cuchillo sobre la mesa, lo que provoco un estruendoso ruido.

-¡Karma! ¡Me asustaste!- El peliceleste se giro con el seño fruncido- ¡No lo vuelvas a hacer!- Karma asintio y beso en la frente a su marido, el cual asun sentia que el corazon se escaparia de su pecho en cualquier momento.- No senti cuando llegaste, ¿Fue hace mucho?

-Perdon por asustarte amor, no lo hice con mala intencion- El pelirrojo abrazo a Nagisa ientras fortaba su vientre- hola bebes, papa llego, y no llegue hace mucho fueron hace unos 5 minutos, pero me quede absorto observandote al cocinar, sabes lo que me encanta observar cuando lo haces.- Nagisa suspiro, relamente a veces no podia con su esposo- Por cierto, los chicos dijeron que vendrian mas tarde, ya que esperarian que sus padres estuvieran en la casa para dejar a los niños con ellos.

-Pense que los traerian, es dificil separar a Yuuma de ellos- El peliceleste se habia dado cuenta lo complicado que era separar a Yuuma de sus bebes, estaba todo el dia con ellos, y a veces dormia con ellos, Hiroto estaba un poco estresado a causa de eso, el queria tiempo de pareja, pero al parecer en la cabeza de su esposo no habia lugar para alguien mas que para sus bebes- Hiroto la debe estar pasando mal, ya que no pasa mucho tiempo a solas con Yuuma.

Ya Somos Adultos -KarmaGisa-Mpreg.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora