One shots || Percy Jackson.

III. Mi best friend.

Nota: AU (Universo alterno) Son mortales.
Advertencia: Contenido sexual explícito leer bajo su propia responsabilidad.

Jasón Grace había sido mi mejor amigo desde 4 grado de primaria. Lo había visto llorar cuando su pequeño perro murió, cuando se rompió el brazo al caer de su bicicleta, y cuando le sacaron los molares; pero nunca, nunca lo había visto llorar tanto como cuando, Piper Mcleen, su novia, lo abandonó.
Llevaba 3 días sin ir a estudiar y por lo que me informó Thalia, sin salir de su cama, amaba con locura a aquel chico y si no quería que el muy imbécil se atrasara de curso debía ir a apoyarlo.
Mi madre fue a buscarme luego de el colegio y me dejo frente a la casa de los Grace. Yo baje de el auto esperando lo peor, Jasón, tirado en la cama. Sin comer, probablemente sin ducharse y viendo una maratón de cualquier serie estúpida en el televisor; Pero no fue así.

Jasón me abrió la puerta e iba perfectamente aseado, con su despampanante sonrisa y su impecable ropa.

-¡Adiós señora Coleman! -Gritó agitando la mano sobre su cabeza. Aunque mi madre ya había arrancado la camioneta.

Me adentre en su casa mientras dejaba mis cosas sobre el descansabrazos de el sofá, no había nadie, con excepción de Jason, y su casa estaba extremadamente limpia, como siempre.

-Hola pequeña - Sonrió. -Hice jugo de naranja ¿Te sirvo un poco?

Fruncí el ceño. ¿Desde cuando era tan atento? En situaciones normales probablemente me habría tirado el jugo en la cara, o me habría dado un golpe en la cabeza, en el instante en que mi madre se marchara.

-¿Co-Como te sientes, Grace? -Elegí mis palabras con cuidado para no herirlo.

-Exelente. ¿Por que habría de estar mal?

-Por... nada. -Respondí muy confundida -Te traje los deberes de geometría.

Se recargó en el marmól de la cocina y me miro de pies a cabeza. Me sentí observada y de pronto deseé ir tan arreglada como el, llevaba unos simples jeans y una camiseta con el logo de mi banda preferida, un moño desareglado y los cuadernos en mi mano.
Bajó la mirada y su sonrisa desapareció, fue como ver a el niño odioso de 9 años llorando por su perro. No, fue peor.

Suspiró y comenzó a alejarse, pasó por mi lado tropezando su hombro con el mío y se dispuso a subir las escaleras.
No sabia si seguirlo o no.
¿Quedría estar solo?¿Quería compañia? No me quedaba de otra podía seguirlo, o podia marcharme.
Subí hasta su alcoba y llame a la puerta, Jasón no atendió y me vi obligada a darle una patada a su puerta, mi mejor amigo estaba ahí tirado en su cama, dandome la espalda, llevaba puestos los auriculares con la música tan alta que lograba escucharla hasta la puerta.

-Ay Jasón...

No me atreví a acercarme, me quede quieta en la puerta recargada en el umbral, pero el debió de percibir mi presencia por se dio la vuelta y palmeo a su lado para que me sentará junto a el.

-Gracias por estar aquí. -Dijo y me atrajo hacia si abrazandome por los hombros.

-Vamos Grace. No podía dejarte sólo.

-No, enserio. Gracias.

Sonreí de lado sin saber precisamente como responder a eso ya que un "Por nada" se quedaba corto a la carga emocional con la que mi mejor amigo hablaba. Recargue la cabeza en su hombro.
Me compartió un auricular y escuchamos melodías tristes por al menos 15 minutos, hasta que lo escuche suspirar probablemente reteniendo sus lágrimas. Alce la cabeza y él ya me estaba viendo a mi.

-¿Qué ocurre, Grace?

Me saque el auricular y el imitó mi acción sin dejar de abrazarme.
Me levantó la barbilla con el pulgar. Y me besó.