Capítulo Especial: "Zombie"

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Había visto el aviso pegado en el poste de luz de mi calle. Primero no, no es mi costumbre estar abrazado a los postes, tampoco suelo tener tiempo para ponerme a mirar todas las estupideces que la gente pega la gente como "Compro muebles antiguos" y mi favorito "¿Ha visto a Fluffy?" junto a una foto que no se puede apreciar si Fluffy es una gran mancha de tinta con patas que camina por la acera. Por suerte para esto está inventado Facebook, pero así y todo hay gente que vaya a saber porque razón elige seguir pegando fotocopias con engrudo en un poste. Este era de color rosa y tenía pequeños troqueles debajo con el teléfono y un nombre de contacto: Pigglet, con dos g en vez de una como el personaje de Winnie Poh, quizás era "extra cerdo" y por eso la necesidad de enfatizar con dos "G". Cogí uno mientras trataba de contener una poderosa arcada. Estaba mareado y no eran las 10 A M. Estaba con la resaca más padre de toda mi existencia. Las cosas que uno hace con resaca tienen esa cualidad de ser medias nebulosas. Puse el troquel en mi bolsillo. El cartel era gracioso: Se busca guitarrista y si crees que cualquiera puede tocar una guitarra entonces este es tu momento de brillar. Me había hecho gracia la referencia a "Anyone can Play guitar" de Radiohead porque mi Au Pair solía escucharlos en mi casa cuando mis padres no estaban y mi hermana estaba en equitación. Ahh... la gloriosa Au Pair Irlandesa de cabellos rojos parecida a Emma Stone que mis padres habían conseguido era la encarnación de la palabra Gloria.. Caitlyn Mac cléirich era irónica y sardónica como la peste, me pasaba cigarrilos y me dejaba dormirme hasta tarde mirando películas de calificación adulta. Se reía incluso que su apellido significaba hijo de secretaria. Solía decirme en Alemán, cuando practicábamos. "Practicamente tengo proletariado escrito en el nombre". Era muy inteligente con un título de Oxford. (Ma y Pa solo eligen lo mejor). Cat tenía métodos pedagógicos muy experimentales. Con mi hermana era una chica inglesa con la cual ir de compras y gastar. Conmigo era un poco mas irlandesa y ya sabía de mi inclinación por las maldades, después de todo me había cambiado hasta las cagadas de bebé. Debo admitir que yo estaba un poco enamorado de ella. Ah lástima que a los catorce ella con sus treinta me quedaba un poco lejos. Como sea a los catorce me admitieron en el internado de varones y toda la alegría se terminó para siempre. Igualmente aún mantengo correos con ella, aunque esté casada y con una niña de dos años. Siempre puedo aspirar a un divorcio o separación o que Cat quiera probar carne joven... como sea Cat va a estar en mi corazón para siempre porque uno no olvida a las personas que ayudan a educarlos en la vida.

Cat fue la responsable de que mis padres lograran admitir que no iba a ser ningún pianista y en cambio me regaló una guitarra acústica de orquesta "Para que no perdiera el oído musical" que era menos violento que regalarme la Stratocaster que finalmente compramos a escondidas. Mi Fender todavía me acompañaba. Ofelia. Recuerdo mi primer ruido con forma de acorde. Ensayaba con el amplificador portátil al menor sonido posible, incluso con auriculares y en él ático, porque no querían que me descubrieran.

Una mañana bajé a desayunar y en mi asiento había un CD compliado. "Canciones para noches de auriculares" decía la nota. ¿Entienden mi amor por esta mujer? tenía doce cuando descubrí a mi primer riff de "Ziggy plays guitar". Es cierto que mis padres le pagaban bien, pero ella bien podría haber sido una enorme malvada tirana y mis padres ni le dirían nada. Era mi versión Irlandesa de Julie Andrews en La novicia rebelde. Ella también venía con guitarra. Por eso cuando vi el afiche con dibujos de amplificadores y notas de música aludiendo a Radiohead, ya expulsado de mi internado y con resaca (por culpa de ese incidente) me dije: "Al diablo vamos a lucir como unos rockstars con resaca inclusive".

A finales de Enero me había mudado al barrio solo, porque vivir con Ma y Pa era simplemente demasiado. Como Vincent Murdoc me mantenía a raya los días de semana y preparando con tiempo "excelsior" de super héroe de Marvel las asignaturas; la confianza estaba en un estado "aceptable" como el peinado de la reina con sombrero de Ascot, con cierta propensión al ridículo.

Probablemente, mañana...  (Allan Woodhouse #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora