Es la historia de ____ Almazán que está tratando de superar a toda costa, el gran amor que siente por Oscar su primo, en el camino tendrá que superar varios obstáculos pero no lo hará sola, tendrá la ayuda de su amigo Park JiMin, quien estará a su l...
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Capítulo 026
Llegue a la cafetería, mi padre ya estaba esperándome.
-Seré directo, deja a esa niña y regresemos a Corea, cumple con todos tus deberes y yo la dejo y me encargo de que ellos la acepten y todos felices.
Sonreí burlonamente - ¿Piensas que eso es lo mejor para todos? Pues te equivocas, ella es lo mejor para mi, la has separado de su familia, pero no lo harás de mi.
-Sabes JiMin, alardeaste de ella y su familia, pero ¿Te das cuenta de que ellos le han dado la espalda? Todo el mundo es así y si quieres que me detenga debes dejarla y debes de saber muy bien que decir, porque no la quiero ver yendo a buscarte, debes acabar de una vez por todas con esto ¿Oíste? Y como soy una buena persona te daré un mes - Se levanto.
-No te equivoques, no son como tú, algo mas debiste decirles, para que ellos reaccionaran de ese modo - Me levante y camine - No todo el mundo es como tu... padre y si insistes ella y yo nos iremos, no planeo dejarme chantajear - Me dirigí a la salida.
-Veremos cuanto aguantas, o mejor cuanto aguanta ella.
Era increíble oír eso, pero sé que podremos salir adelante, estoy dispuesto a todo por ella, la tía Sofí tenía razón, no hay nada más cierto que las historias de las novelas, debí haberle hecho caso y estudiarlas más.
Corrí hasta llegar a la escuela, mi hermosa novia estaba esperándome, parecía preocupada, tenía que decirle lo que había pasado.
-¿Dónde estabas? Me tenías preocupada - La abrace y bese.
-Te amo mi vida, lo sabes ¿Verdad?
-¿Qué pasa Park?
-Nada, solo... - Su mirada era penetrante - Hablemos de eso más tarde, cuando estemos en casi ¿Si? - Después de soltar un suspiro acepto.
Después de la escuela fuimos al trabajo y de ahí cada quien llego a la casa, estábamos agotados, pero no tanto como para olvidar la plática y nuestra deliciosa sesión de besos.
-____ tenemos que hablar - Su mirada estaba llena de preocupación.
-Claro ¿Qué pasa? ¿Por qué tan cerio?
-Hoy vi a mi padre, lo siento, pero es por el que tus padres reaccionaron así, el...
-El que reaccionaran así, es solo cosa de ellos, cuando confías y amas a alguien, por más que te digan cosas malas de él, estarás a su lado, lo que paso con ellos, es que no pude seguir uno de sus caprichos, eso es todo.
-Amor mi padre puede ser muy persuasivo, es por eso que no los culpo.
-Ok. Olvidemos eso y pasemos a algo más bonito, como por ejemplo nosotros - Solté una carcajada.
De la nada cambio todo, su tono de voz, su mirada, ahí estaba mi chica coqueta y hermosa, sin nada de cansancio, dirigiéndose a mí.
-Sabe... profesor - ¿Qué? - Hablando enserio... - Caminaba moviendo sus lindas caderas, viéndose realmente sexi, ya sabía para donde iba todo esto - ¿Por qué siempre traía una mirada lujuriosa a la clase? -Se paro frente a mí sonriendo muy coqueta.
-Porque ahí había una mirada que me ponía totalmente caliente - Los dos reímos bajito.
-¿Así? - Mordí su exquisito labio - ¿Quién era esa persona?
-Una de mis peores alumnas, debo decir - Se molesto ante mi comentario y dio la vuelta, pero no me podía quedar así ya estaba excitado, la seguí.
-Espere señorita Almazán, aun no hemos terminado - Sujete su cintura, pegándola más a mi torso - No se puede ir como si nada después de provocar esto - Me pegue lo mas que pude, haciendo que mi miembro se pegara a su lindo trasero.
-Profesor ¿Qué está haciendo? - Sonaba inocente, me recordó totalmente cuando éramos profesor-alumna, eso me éxito mas, siempre me atrajo esta bella y sensual mujer - Debo irme, mi novio me espera - ¡Mierda! Su tonito de voz, su juego, me estaba matando, quería hacerla mía, pero ya que quiso jugar, pues jugaremos.
Acariciaba suavemente su cintura y su vientre con mis manos - No señorita, usted no se va hasta que solucione esto - Le hable al oído, nuevamente presione mi bulto ya duro contra su trasero y ella soltó un gemido - ¿Lo ve? Usted también lo desea... además yo le hare sentir y disfrutar como nadie lo ha hecho... le aseguro que se olvidara de su noviecito.
-Le daré la última oportunidad, si me suelta en este momento le prometo que no le diré a nadie ¡Mmm!... -Un fuerte gemido salió de sus lindos labios, claro pues estaba mordiendo su hombro derecho - Deténgase... por... favor - Su cuerpo estaba cediendo a mis caricias, y su voz era apenas un hilo, pero sus gemidos eran música para mis oídos.
-¡Dios! -Baje mi mano izquierda hasta su entre pierna, se sentía un calor delicioso y ella soltó un gemido mas provocador - Se siente tan caliente... muero por estar dentro de usted - Estaba jadeando, mi respiración no era normal y menos la de ella - La hare gemir tan fuerte... - Me dejo sin palabras, tomo mi mano y la metió debajo de su pantalón, pero sobre su ropa interior.
-Espero que realmente valga la pena... Profesor - Su voz tan sensual, casi gimiendo cada palabra, no podía más.
-Téngalo por seguro señorita - Mordí nuevamente su hombro.