CAPITULO III - Los órganos externos

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 Este capítulo y los dos siguientes relacionan cada órgano del cuerpo y cada enfermedad, con un área muy concreta de la vida. Nuestras creencias interiores se manifiestan físicamente en distintas partes del cuerpo. La parte afectada te da la pista para encontrar la creencia.

Cuando uno empieza a poner atención a una parte de su vida, a aceptar, participar, emprender o integrar los cambios indicados, entonces el cuerpo cambia, y lo puede hacer de una manera brusca, de un instante a otro. Uno tiene la creencia de que la vida es continua por este motivo parece sorprendente que algunos cambios ocurran de una forma tan rápida, también en el cine la película parece continua pero sabemos que está formada por una sucesión de fotogramas. Una de las características del Universo es que se expande y se contrae, que se enciende y se apaga alternativamente, y éste es el momento del cambio que puede ocurrir en cualquier instante. Es posible que tengas creencias acerca de lo que se puede y no se puede curar, esas creencias no hacen más que limitar tu potencial de curación y pueden impedir, en ocasiones, que el cambio se produzca.

La estricta relación de cada órgano con la parte de la vida afectada, se limita a dos o tres conceptos básicos. Soy consciente de que para la persona enferma dichos conceptos parecerán demasiado breves y en la mayoría de los casos después de leerlos no sabrá por donde empezar. Con la intención de facilitar al usuario el paso de la teoría a la práctica, he ampliado las explicaciones de algunos órganos más allá de lo estrictamente relacionado con ellos. A medida que me he extendido en dichos órganos, se ha hecho inevitable que las explicaciones coincidieran en algunos de ellos, y cuanto más he profundizado, más común ha sido la base de los principios a los que hago referencia, hasta que por fin se unifican en un todo. Imaginemos el planeta Tierra y supongamos que los órganos del cuerpo están en el exterior, es decir, en la superficie del planeta, que es la parte que se ve. Estos órganos actúan de metáfora de nuestros principios interiores y a medida que profundizamos y nos acercamos al centro de la Tierra, esas explicaciones -del por qué ocurre lo que ocurre en la superficie-, se van haciendo más comunes y se concretan en las enfermedades originales. Adentrándonos, por fin llegamos al centro de la Tierra, que es nuestra alma, el ser interior que lo abarca todo. Si buscamos una causa para explicar porqué suceden las cosas, ese todo es la causa de todo.

Sabemos que muchos de los problemas que afectan a nuestros cuerpos tienen su origen en una equivocada concepción de nuestra vida, de forma que una creencia limitada se puede manifestar en muchas partes del cuerpo. No se trata tanto de aliviar las manifestaciones sino de llegar hasta el fondo, para encontrar la creencia y cambiarla. A esta creencia se podrá llegar de muchas maneras, profundizando desde cada una de las manifestaciones en el cuerpo. Por ejemplo, si una persona está muy enfocada al pasado y se siente víctima de las circunstancias, esta creencia se podrá manifestar físicamente en problemas en el pecho, espalda, nalgas y varios órganos y enfermedades más; profundizando en cualquiera de los problemas físicos mencionados, probablemente llegaremos a la conclusión de que la persona enferma vive en el pasado y se siente víctima.

El siguiente paso será conseguir cambiar esta forma de ver la vida porque si no se cambia, la creencia se seguirá manifestando en problema físico, de una forma o de otra.

Un problema de riñones no debiera abarcar mucho más que los conceptos de relaciones cercanas con hermanos y similares. Lo que parece que se necesita para profundizar en este órgano es una especie de minicursillo en ese tipo de relaciones. De esta forma, al ampliar también otros órganos, el libro se convierte en una tesis sobre el arte de saber vivir, la salud y el bienestar.

Se aconseja al usuario ya sea sanador, paciente o simple interesado seguir los siguientes pasos:

- El punto de partida deben ser las relaciones contenidas en el recuadro que corresponde al órgano o la parte del cuerpo afectada.

La Medicina del Alma - Eric RolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora