Cada año, el señor Granier hacia un viaje de convivencia para mejorar las relaciones entre las personas que conformaban la revista. Aparentemente Tomás quiere seguir ese ejemplo y hacer un viaje de convivencia. Es algo costoso en cierto modo, pero Tomás lo cree necesario, pues aunque la mayoría nos conocemos, también se contrató a más personal, claro, ninguno de mi planta. El cree que conmigo y las cinco personitas a mi alrededor es más que suficiente. No puedo estar más de acuerdo.
Melisa es una chica de lentes hípster con sonrisa de metal, es bastante alocada e igual de responsables; Majo, una chica voluptuosa de cabellos largos marrones y en bucles, esa mujer se viste como una artista; Catherine, una chica menuda de sonrisa abismal, pestañas alargadas y cabellos azabaches, es de esas que se le prende el bombillo como a un foco en el momento justo; Daniela, de mirada pequeña, piel aceituna y personalidad explosiva, tenía la ventaja de estar metida en todo lo referente a moda, no sé cómo la llevaremos al cambiar el tema, pero no dudo de que se adapatará y por ultimo: Sofía, nuestro cerebro informático en esta ocasión —antes lo era Daniela—; no me puedo quejar de mi equipo, además, me alegro de que Cristina ya no pertenezca a él.
Y no, no me alegra que sea la secretaria de Tomás.
Revivo el Skype —de hecho lo reviví hace mucho, pero tiempo no me dio para verlo— y veo la cantidad de mensajes que había dejado de días pasados.
CaballeroNegro
—¿Samantha? No lo puedo creer...
Si, solo ese ¡No podía decir otra cosa! Un: "Hablemos de esto". ¡No! Era suficiente para él solo decir eso. Me molesto tanto que deseo estrellar el teléfono contra la pared y gritar lo poco idiota que era ¡Relaja Samy! Relaja.
Por suerte tendremos mucho tiempo para conversar en el viaje, dejo que la ira se drene con lo primero que vea. Así, muere cristianamente un oso de felpa del cual desconozco procedencia.
Vuelvo a revisar mi teléfono y noto un nuevo mensaje de él ¡Se dignó a hablarme!
CaballeroNegro
—Samantha, espero que esto no te incomode, pero ya que estaremos más cercanos durante el viaje, me gustaría que no se hiciera comentario alguno sobre esto. Espero me entiendas, no se vería bien que el vicepresidente de Maximo studios se fugara las noches a chatear con una ex desconocida, mucho menos si ahora estoy a cargo de un proyecto tan ambicioso como este. Realmente espero captar ese lado razonable que me encanta.
Quedo perpleja por lo que me pide, aunque no puedo negarlo, no estaría bien. Además de ello la cercanía entre nosotros no estaría bien vista cuando apenas "somos un par de desconocidos". No puedo hacer más que aplaudir a su lado razonable, y regresar a pensar que deberíamos usar ese tiempo para conversar ¡al carajo! Cómo puedo estar tan indecisa y lo peor es la imagen de la "cosa esa" que me asalta y no puedo evitar chillar. Sé que no debería pedírselo, debo ser consciente de los sentimientos que él pueda tener por mí. Sentimientos que por ahora solo parecen simple atracción ¿Será solo eso?
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El loco mundo de Samy A
Chick-LitSamantha Argento es divertida, extrovertida, amante de su trabajo y protectora de sus amigos. A sus próximos treinta años, Samy ha perdido una relación de años y ha conseguido una a través de la red, pero ¿Qué hace una mujer como ella buscando el am...