No te vayas

Robando a la novia

Los ojos de Rarity se agrandaron y se giró hasta poder ver a quién se dirigía con pasos firmes al altar; ese cabello rubio resplandeciente, esos ojos esmeraldas y las adorables pecas que resaltaban en su piel morena, ahí estaba su caballero que tanto amaba, Applejack.

Applejack: la única persona que es digna de casarse con Rarity soy yo y no permitiré que un niño mimado que no la cuidará como se debe, se casé con ella

Las mejillas de la chica de tez blanca se colorearon de rojo carmesí hasta que estuvieron frente a frente, podía percibir ese aroma a manzanas que tanto le gustaba.

Applejack: no pienso dejarte ir aunque lo hayas decidido por protegerme, no te vayas de mi lado Rares

Rarity: Ja..Jackie yo...

El padre de Rarity se levantó, se abrió paso hasta el corredor principal y de un momento a otro la vaquera cargó a la novia como si fuera una princesa.

Magnus: jovencita, estás muy equivocada si crees que dejaré que te lleves a mi hija

Applejack: con todo respeto señor...

Se aproximó con paso lento cargando a su amada y le plantó cara.

Applejack: sé perfectamente quién es usted sin embargo...no voy a renunciar a mi futura esposa, aún tenga que enfrentarme al mundo entero...no existe nadie que la amará y cuidará mejor que yo, se lo puedo asegurar

El hombre de cabello café oscuro se quedó petrificado, ese discurso le había recordado a si mismo, cuando robo a su esposa actual y había dicho algo parecido a esa chica de acento campirano; por su parte Blueblood se sintió intimidado por la chica rubia que perdió el habla por un momento.

Cuando al fin pudieron reaccionar y enviaron a sus guardias, la chica de tez bronceada corrió hasta salir de la iglesia mientras las puertas se cerraron por un extraño mecanismo.

Blueblood: ¡pero que demonios!

Magnus: no debería haber algo así...¿cómo es posible?

Tanto Fluttershy como Twilight se escabulleron en el alboroto hacía otra de las salidas mientras fuera de la iglesia Rainbow Dash y Pinkie Pie ayudaron a subir a la pareja a la camioneta roja de la familia Apple.

Rainbow: listo, ahora...

Sonaron varios disparos y se comenzó a abrir la puerta de la iglesia.

Rainbow: ¡vayanse!

Pinkie: les ganaremos tiempo

Activaron un dispositivo que frenó el funcionamiento de los motores eléctricos de todos los coches, le dieron un golpe a la camioneta de gasolina y Bic Macintosh arrancó a toda velocidad para alejarse lo más pronto posible. La mente de la chica de tez blanca era un enredo no sabía que decir hasta que sintió que le acariciaban el rostro.

Applejack: menos mal que llegamos a tiempo...estás hermosa Rares...

Su corazón latió acelerado al oír esas palabras y su cara estalló en rojo.

Rarity: Ja..Jackie yo...yo...

Pudo sentir el tacto de un dedo contra sus labios y la vio sonreírle.

Applejack: no es necesario que hables princesa...lo sé...

Rarity: pe...pero ¿có...cómo...

No pudo decir más, fue callada por un beso, un suave beso que dejó su mente en blanco y ella dejó que su cuerpo se dejará llevar colocando sus manos tras su cuello e intensificandolo.