Llevo dos semanas acudiendo al gimnasio nuevo y me he topado con el galán musculoso todos los días, le sonrió levemente para no demostrar la misma debilidad que todas las chicas que como yo acuden acá, sin embargo, a él si que le encanta mostrarme su perfecta dentadura, no hay duda de que acude con frecuencia al odontologo.
Podría ofrecerle mis servicios... Quizás lo espere en un diminuto y sexy traje de enfermera bajo mi bata blanca y le regale una noche de sexo salvaje sobre el escritorio.
Espabiló un par de veces para salir de mi ocurrente imaginación y me dispongo a realizar mi rutina diaria. Para mucho de los presente tampoco paso desapercibida y es justo a causa de esas miradas provocadoras por parte del genero masculino que me enfatizo mas en hacerlo bien todo.
Me causa un poco de asco mirar a las chicas a mi alrededor, observan tan descaradamente a Sergio quien resalta fácilmente entre la multitud con ese cuerpo suyo tan enorme, que no puedo evitar mirarlas. Parece que en su vida jamas han visto un hombre tan fabuloso, yo tampoco la verdad, excepto aquellos tres que me secuestraron, pero para ese entonces yo estaba en plena etapa de desarrollo, todo a mi alrededor era mas grande que yo.
No puedo negar que también lo miro, aunque la palabra quede pequeña, realmente me lo como con la vista, mi idea de seguir acudiendo acá, es para seguir viéndolo, y por mis rutinas obviamente, aunque eso quede en un segundo plano, pero al menos, creo que logro disimular, en cambio las otras menean el trasero cada que pueden delante él, como un pavo real para destacar.
Él es hombre y claro, las mira, les sonríe y coquetea con ellas, es evidente que se divierte con la situación pero ¿y quien no? Yo también lo hago con el montón de babosos que me miran mientras hago mis ejercicios.
Aunque a veces suele ser un poco incomodo y me ponen nerviosa, de momento viajo en el tiempo y recuerdo aquellos terribles días en el instituto donde era víctima de esas miradas, claro que para ese entonces lo hacían las estiradas, las delgadas cuyos cuerpos eran envidiados por mujeres y deseado por hombres, para tener a quien destrozar durante el día.
Cada vez que recuerdo aquellos días, la inseguridad se apodera de cada parte de mi anatomía, dejando a un lado todo por lo que he trabajado en los últimos años. Ya no soy esa a la que criticaban, he cambiado, pero no lo he hecho por vanidad, ni por la misma razones que ellas, lo he hecho por mí, por mi salud, por mi bienestar y si, de algún modo por no ser víctima nuevamente de esas miradas.
No se deja de sentir bien el hecho de que me admiren, pero eso sigue siendo algo mas, no la razón por la que decidí cambiar.
Camino hacia los vestidores para dejar algunas cosas en mi casillero del gym y puedo escuchar a través de los angostos pasillos los cuchicheos de las otras chicas.
-esta buenisimo ¿no?
-¿me lo dices o me lo preguntas?
Ambas comienzan a reir no puedo evitar poner los ojos en blanco, termino de dejar mis cosas en el casillero y me dispongo a salir pero antes oigo lo ultimo que tienen que decir.
-a Sergio me lo como yo amiga... Así que apartate.
La otra chica se ríe, pero es una de esas risitas ironicas que yo muy bien conozco, no tiene pensado apartarse aunque tampoco se atreva a negarlo.
Sonrió irónicamente tambien, porque la verdad no me hace nada de gracia que quieran comerse lo que y. Pero prefiero ser yo la que se aparte. Me siento lo suficientemente mujer para estar con quien sea y no pretendo pelear por uno solo.
Como un plan malevolo del destino choco contra una gran pared de músculos al cruzar el pasillo que da hacia el gymnasio, una pared que tiene la mas hermosa sonrisa que jamas haya visto.
-lo siento Sergio vengo un poco distraida.
-ojala vengas todos los dias así...
Le guiño un ojo y sigo mi camino, intentando no darle importancia a sus astutas palabras. No voy a babear como las otras cada vez que me hable, todo lo contrario me voy a convertir en la chica mas astuta del lugar. La menos accesible para él, ni para ningún otro.
Chicas, lo prometido es deuda, en multimedia les dejo nuestro galán. Espero les guste tanto como a mi.
Además quiero pedir disculpa por el retraso, me mude de ciudad y cambien de teléfono por lo que me costo mucho poder adelantar algo mas, pero ya regrese prometo no demorar mucho...
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EreS DROGA (me elevas, pero me ahogas)
RomanceComo un veneno maldito, Más me dañas más te necesito Una DROGA Me elevas, pero me ahogas. Contenido adulto, para mayores de 18 años.