|19. ¿Te asusté?|

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A la mañana siguiente, Adara se encontraba desayunando en una terraza, solo en compañía de un libro que Milo le había dado, "El control de tu mente", no lo había soltado en toda la noche. Sentada en aquella sillita blanca de madera, con el libro en la mano frente a su rostro, pasaba completamente desapercibida por una princesa. Claro, también debido a su bonita vestimenta, un vestido rosa pastel, sandalias griegas doradas tres dedos bajo la rodilla y una bonita flor en el cabello sosteniendo un mechón del mismo.

El clima era exquisito, para ser las nueve de la mañana el ambiente estaba bastante cálido. Realmente agradable. Le dio un sorbo a su café frío, luego tomó su croissant y le dio un mordisco.

-Tu mente debe estar centrada... Enfocada y libre de distracciones... -dijo la chica para si misma.
-Lástima que estoy aquí.

Addy dio un brinco del susto, el croissant cayó al suelo y separó el libro de su vista.

-¿Quien eres?. -preguntó Adara.
-Soy quien puede ayudarte. -dijo sentándose sobre la silla frente a Addy.
-Eso no responde con certeza mi pregunta. -Adara cerró el libro, dirigiendo la vista a quien tenía al frente.
-Ah... Soy Angelique, Angelique de Arendelle.

La chica extendió su mano, era de piel blanca con ojos verdes, cabello largo y castaño y con un mechón blanco, usaba una blusa color menta con pequeños copos de nieve detallados, unos jeans blancos y zapatos azul marino.

-Aja... -dijo Addy desinteresada.
-Escucha, vamos en la misma clase. Y he notado lo mal que hablan de ti, me es completamente irrelevante el chismorreo de Auradon. Y en verdad tu reputación es lo de menos ahora. -tenía voz gruesa y hablaba con lentitud.
-Sigo sin entender que quieres y quien eres. -Addy cerró su libro y tomó su café-. Así que, si me permites. -se levantó.
-Alto...

Adara sintió frío en su mano, y este le comenzó a quemar.

-¡Ah!. -exclamó soltando su vaso de café.

Al caer, contempló que este estaba hecho hielo, Addy miró a la chica con confusión.

-Eres una bruja... -murmuró.
-No, en realidad no. Solo manejo hielo. -dijo indiferente.
-¿Que quieres de mi?. -dijo Addy confundida.
-Bueno cariño, para empezar, quiero ofrecerte una alianza. -dijo Angelique cruzándose de brazos, a lo cual Adara soltó una carcajada.
-No estamos en guerra para ofrecer alianzas.
-Escucha, antes de que tu llegaras, yo era a quien llamaban fenómeno, gracias al cielo llegaste tu y ahora te hacen la vida imposible a ti, sin ofender, claro. Bueno, vi el incidente que tuviste con el bombón de Harry, y créeme que desde entonces no dejan de decir que eres una bruja malvada. Te temen Adara.
-No tienen por que temerme...
-Sabemos que vienes de la isla, mas no sabemos tu pasado, ni tu apellido, y mucho menos la razón por la cual estabas allá, ¿no te parece eso lo suficientemente misterioso y tenebroso?, ademas, oí que le hiciste algo malo a Mal, y eso es genial.
-Por supuesto que no, te equivocas. -Adara empezaba a molestarse.
-No me importa en lo absoluto si es verdad o no, ahora te respetarán. Es decir, wow, te atreviste a enfrentarte a Harry Hook.
-No me enfrenté a el...
-¿Son rivales desde la isla?. -Angelique disfrutaba cada gota de información-. Aunque, en el baile estuvieron juntos, fue inevitable no verlos, por un momento creí que eran pareja.
-¿Podrías dejar de bombardearme con todo esto?. -Adara se hizo nudos con tanto palabrerío.
-Esta bien, lo siento. -reía-. Pero quiero saber si aceptas. No te estoy pidiendo una amistad, a menos de que quieras, pero de verdad me interesa esta alianza, cuidarnos la espalda. Ambas somos mujeres poderosas, no tenemos por que sufrir por princesas habladoras y niños mimados. ¿Que dices?.

Esto es muuuy extraño.

-De verdad me gustaría Angelique pero... No entiendo bien tu plan y, tengo otras cosas en la mente. -suspiró-. Debo irme. -se levantó y abrazó su libro contra su pecho.
-Claro, a ver al profesor Tatch.

Harry, y la pesadilla de Auradon《HarryHook》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora