The Last Wish II: Revenge [CDM Fanfic Yaoi Español] (Castiel x Nathaniel)

Capitulo 1: Buenos momentos

*Narra Nathaniel*

Me encontraba caminando por la calle acompañado de Castiel, el cual, venía cargando mi mochila, si, desde que comenzamos a vivir juntos... Bueno, más específicamente, desde que me rescató, se ha estado comportando de una manera muy diferente a la imagen que tenía de él, si, aún era un narcisista total, pero... Siempre de una u otra forma terminaba siendo lindo y tierno conmigo, y realmente no era que me molestaría, de hecho, me encantaba... Yo sabía que nadie, nunca lo había visto de comportarse de esa forma, lo sabía porque, aunque suene como un acosador, cuando él estaba con Debrah, y bueno... Tenían sus momentos de pareja en los descansos, nunca lo vi comportarse así... No sé, aún tengo la idea de que ... Tal vez se comporta de esa porque me vio al borde de la muerte... Tal vez tiene miedo de que si no se comporta lindo conmigo voy terminaría tomando una decisión tan drástica como esa, aunque realmente no importa, esa idea jamás volvió a pasar por mi mente desde que soy feliz con Castiel, y honestamente, antes de tomar otra decisión como esa y traumar a Castiel para toda su vida, prefiero luchar por su felicidad, aunque su felicidad no esté conmigo.

-Nath...-

-uh?-

-en que estas pensando, llevo como 10 minutos hablándote y no reaccionas-

-on... perdón, yo...estaba pensando en que... eres muy cariñoso conmigo...-

Sonreí con la mirada fija al frente.

-si hace tiempo me hubieran dicho que serias así conmigo y que terminaríamos siendo novios y viviendo juntos, entonces, probablemente hubiera muerto de risa...-

Le dije riendo divertido, de pronto sentí que tomo mi mano.

-Prometidos...-

Escucharlo decir eso, me hizo voltear a verlo un poco confundido.

-no somos novios, somos prometidos...-

Sonrió mirándome de reojo.

-no olvides que algún día serás mi esposa-

No pude evitar que mis mejillas se sonrojaran

-no necesitas decirlo... obviamente nos casaremos-

Entrelacé nuestros dedos y seguimos nuestro camino, unos minutos más tarde, nos encontrábamos en la entrada.

-vendré por ti, no te vayas a ir, ¿de acuerdo?-

-está bien, te esperare-

Me acerqué a su rostro y besé sus labios cariñosamente, pero como era propio de él, colocó si mano en mi mejilla y me devolvió el beso intensamente.

-hey, tortolos, van tarde~!-

Escuchamos una voz, ambos nos separamos y volteamos, solté un suspiro.

-es cierto, nos vemos más tarde, te amo-

-y yo a ti-

Le di un último y pequeño beso, él me dio mi mochila y seguidamente me alejé comenzando a caminar hacia Alexy, si, Alexy, no se como pasó, pero antes de darme cuenta, ya éramos mejores amigo, siendo sincero, nunca me había entendido también como lo hago con él, es agradable y alegre, además de que podemos hablar sin censura de nuestras parejas y es divertido.

-uf, amigo, agradéceme por salvar tu vida, parecía que quería devorarte-

-que pasa, estas celoso porque tengo de pareja a un sexy pelirrojo y tu no?-

-ja, celoso, yo? Ni lo sueñes Nath, a mi me espera un escultural castaño en casa, si lo vieras, cada está mas sexy, La academia militar le sienta muy bien-

Las mejillas de Alexy se sonrojaron y sus ojos brillaron.

-tiene unos brazos fuertes fuertes y un trasero redondito y firme-

Comencé a reír por la emoción con la que hablaba además de que abrió y cerró sus manos como ir estuviera tocando algo.

-tal vez, pero tu novio le sigue teniendo miedo a mi Castiel-

-ya lo sé... pero, aun así, es un amor-

Ambos reímos, de pronto un chico pasó a nuestro lado y empujó a Alex haciendo el par de libretas que llevaba en sus manos cayeran al suelo.

-oye... ten más cuidado-

Le dije mientras Alexy levantaba sus cosas, el chico se detuvo y me miro a los ojos, parecía molesto, sin embargo, le sostuve la mirada, al cabo de unos segundos volteo hacia otro lado y siguió su camino.

-estúpido, estos chicos de nuevo ingreso, llegan y se creen los dueños del lugar-

-tranquilo Nath, sé que me amas, pero no vale la pena pelear-

-en tus sueños pitufo-

-¡oye!-

Se quejó dándome un codazo, ambos reímos y entramos al edificio para ir a clases.

[Mas tarde]

Después de un largo día, por fin podíamos ir a casa, al salir, Castiel ya me esperaba fuera, me recibió con un beso, e igual que siempre, cargó mis cosas y tomo mi mano.

-nos vemos mañana pitufo...-

Le dije a Alexy con una sonrisa, este también sonrió.

-que descanses oxigenada-

Seguido de eso, me enseñó su lengua con burla y subió al auto que lo esperaba.

-tienen mucho tiempo de amistad ya, pero... sigo sin acostumbrarme-

Dijo Castiel con una pequeña sonrisa.

-lo sé, es extraño... sobre todo porque se la pasa contándome del trasero de Kentin-

-como?-

-jajaja... tranquilo tigre tal vez no tengas un trasero "redondito" como Kentin-

Hice comillas con mis dedos.

-pero lo que te fue quitara atrás te lo devolvieron adelante-

Le sonreí de manera picara antes de comenzar a caminar, lo vi negar con la cabeza y sonreír también.

Caminamos a casa y al llegar me fui a la habitación que Castiel había acondicionado como biblioteca pequeña para mi y comencé a sacar las cosas de mi mochila para estudiar un poco mientras Castiel hacia la cena, cuando saqué unos de mis libros, una hoja cayo al suelo.

-uh?...-

La levanté y comencé a leer.

"risas y arcoiris, un mundo color de rosa, ¿no? ... espero que lo estés disfrutando, porque pronto perderás todo lo que tienes, y estarás solo, justo como yo lo estoy"

-pero que de...-

Suspiré exasperado.

-estúpidos... ¿qué son? ¿Niños?... ya están grandes para estas mierdas-

Susurré molesto y arrugué la hoja lanzándola hacia al basurero, estaba molesto, pero una parte de mí, sentía cierta curiosidad por saber quién demonios había escrito esa nota.

De pronto se escuchó un ladrido, volteé y fui atacado por demonio, que se lanzó sobre mi y comenzó a lamer mi rostro después de que ambos terminamos en el suelo, comencé a reír.

-no, espera, espera... jajaja... detente...-

Comencé a decirle, lo abracé y comencé a acariciarlo, cuando levanté el rostro vi a Castiel, recargado en la puerta con una sonrisa en el rostro, yo también le sonreí.

-nuestro hijo quiere atenciones-

Le dije, el se acercó y se sentó a nuestro lado y ambos nos quedamos ahí, acariciando y jugando con demonio.