If |h.s

14

En la vida, nunca sabes cuando llegara ese momento que te cambie ... para siempre. Nunca sabes la hora, el lugar y quien le va a dar ese giro de ciento ochenta grados a tus días y transforma todo a tu alrededor, a todos y todo, incluso a ti. Y sabes que por más que te esfuerces no volverás al pasado, no podrás retornar a lo que eras, a lo que estabas acostumbrado porque ya nada es lo mismo y entonces es en ese preciso momento cuando tu mente se llena de y sí  ... 

—Ben, Ben —su voz tiembla, siento como sujeta mi camisa con fuerza mientras permanece escondida —No lo hagas.

No se que era peor, si estar frente a un loco que quien sabe que nos hará o no poder hacer nada para que ella este a salvo.

—¡Eres una maldita perra, una zorra asquerosa! —Escupe lleno de ira, con la mirada fija en ambos con los puños apretados—Solo te gusta andar cogiendo con el primero que se te atraviese, pequeña puta.

—¡Cállate, cabrón! —digo sin contenerme, aunque perder el control es lo que menos me conviene en estos momentos, pero no me aguanto escuchar aquellos insultos, aquellas mentiras—Ni siquiera la conoces, nunca la hiciste ...

Ríe irónico y comienza a caminar de un lado a otro.

—Y tu ... tu como siempre en la mitad, molestando. —Dice y trago duro mientras lo escucho —tu siempre estuviste allí y lo arruinaste ... ¿no es cierto, Holly? ... Harry, tu amiguito, siempre estuvo haciendo mal tercio.

Ella no dice nada y solo solloza descontrolada.

¿Que mierda puedo hacer, qué?

—¿Que es lo que quieres, que es lo que deseas para dejarnos ir?

Vuelve a soltar una carcajada y cuando lo hace me inundo de una ira profunda, de rabia. Mi sangre hierve, todo mi cuerpo se tensa y todo se concentra en mis puños. Los aprieto, con mucha fuerza porque lo único que quiero hacer  es partirle la cara, molerlo a puños hasta que no sienta las manos, tengo una ganas de golpearlo hasta que le pida perdón, hasta que se trague cada una de las palabras con las que la ha insultado.

—No quiero nada ... o si, si quiero ... quiero que te mueras.

Y con eso, siento el corazón latir a millón.

La boca se me seca, mis ojos se abren como platos.

—¡No, Ben!

Y entonces Holly finalmente abandona mi espalda y se pone delante de mi, como protegiéndome.

—Él  no tiene la culpa de nada, déjalo en paz.   

—Ay, pero que valiente ... no sabia que lo eras.

—¿Sabes qué? ... me canse de tu mierda, de tu juego. ¡Esto se termino!

Y me encamino a él, sin importarme nada pero antes de que pueda llegar, un arma sale de sus pantalones y me apunta con la misma. Holly ahoga un grito, ante la escena. Me detengo en seco porque no dudo que este puto loco me puede descargar la pistola completa si me muevo.

—Ahora si vamos a entendernos ... ya sabemos quién manda aquí.  

—¿Me vas a matar, lo vas a hacer? ... si vas a hacerlo, hazlo de una jodida vez.

Lo reto, sintiendo que estoy pronunciado mis últimas palabras.

—Si te voy a matar ... si lo voy a hacer pero primero, te voy a dar el gusto de escuchar algo.

Sus palabras me confunden y solo puedo fruncir el ceño cuando dice aquello

—Holly ... acércate, amor.  

La chica que esta a unos metros de mi, comienza a caminar y mientras lo hace no se que pueda suceder, él es capaz de todo y no resistiría verla sufrir. El miedo se apodera de mi a medida que da cada paso y solo le ruego a Dios que él no le haga daño.

—Vamos ... vamos a contarle a este pedazo de mierda, la verdad. —Él acaricia su cabello y siento un nudo en la garganta, ella cierra los ojos ante el tacto. —Dile lo que sientes por él

¿Lo que siente por mi?

—¡Dile, joder!

Ella no puede mirarme, sus ojos están clavados en el suelo y el esta perdiendo la paciencia.  

La toma del pelo con fuerza, obligandola a hablar y con eso, por instinto me muevo y ahora le apunta a ella. Me paro en seco.

—¡No te equivoques, Styles!  

—Holly, habla. Por favor —le pido entonces, cuando el metal roza su cien.

—Dile, zorra.

—Yo-o, yo-o ... Haa-arry  —no logra decir nada más ...

¡Mierda, mierda!

—¡Habla, joder ... habla!

—Te amo, yo estoy enamorada de ti ... Harry.

Y entonces, mi mundo se paraliza ... todo parece detenerse. ¿Qué?

Su llanto vuelve a apoderarse de ella y la confusión de mi, no entiendo nada.

—Mi novia ... mi Holly enamorada de un perdedor. ¿Puedes creerlo?

—¡Ben, por favor!

—¿Por favor, que ... por favor que, zorra?  —brama envenenado—¡te enamoraste de otro cuando estabas conmigo!

—Dejala

Logro decir y cuando termino, hay silencio.

—¡Policía metropolitana de Londres, manos arriba!

Nos giramos y encontramos al grupo de hombres detrás de nosotros. En cuestión de segundos, parece que estamos a salvo, que todo ha terminado pero no es así, nada es lo que parece. 

De inmediato, corro ... corro hacia a ella pero él la tiene aferrada a su cuerpo, apuntándole con el arma y amenazando en volarle la cabeza.

—Muchacho, baja el arma, pon las manos contra el suelo y todo terminara. Nadie tiene que salir herido.  —Informa un hombre a unos metros de distancia.

Él no quiere negociar, no lo hará.

—Maldita sea, maldita Holly. ¡Me traicionaste, perra!

No, no ... Holly, no.

—Baja el arma, suelta a la chica ... vamos, colabora.

—Y, ¿pasar toda la vida en prisión? ... no lo creo.

—Podemos negociar, llegaremos a un acuerdo pero haz lo que te decimos, deja ir a Holly, suelta el arma y entrégate.

Ben me mira, los mira, la mira ... ¿que va a hacer?

Uno, dos, tres disparos ... silencio.

Sangre ... un grito ... oscuridad.

—¡No! —sale en un grito ensordecedor.—¡Holly!

Todo es oscuro.

No siento nada.

Tengo sueño.

No quiero dormir.

Holly, ¿donde estás?

Ella me ama, me amaba. 

Sí ella me amaba, yo era feliz. Sí ella me quería, yo estaría bien. 

N/A: ¡Capitulo final! —Mi corazón duele, duele mucho. ¿Que pasara con Harry y Holly? ¡Gracias por leer, y no se pierdan el epilogo!