Genial, me había quedado sin trabajo. Rustid se había acabo hartando de mi, pero bueno ¿quién necesitaba un trabajo donde me explotaban y me pagaban una miseria?
Lo único malo es que estábamos a final de mes y eso significaba adiós a posibles caprichos como por ejemplo salir a cenar con Wesley como había acordado.
-¿Si?- todas las veces que he hablado con él parece la persona más feliz del mundo, hasta por teléfono.
-Wes, no puedo ir a cenar esta noche, acabo de quedarme sin trabajo, por lo que también me he quedado sin dinero.-dije un poco disgustada pensando en tener que ponerme a buscar trabajo de nuevo.
Comencé a pensar donde podría trabajar y realmente el problema era que ninguna de las posibilidades me gustaba, iba mirando de un lado a otro mientras le contaba a Wesley lo que había pasado y como por arte de magia vi un anuncio, era una especie de ludoteca, buscaban alguien para la parte artística, que enseñara a los niños bailes, preparar pequeñas representaciones, era simplemente perfecto.
-No valen excusas, dije que yo invitaba y así va a ser, nos vemos a las 8 en la pista de skate.- ni siquiera me dejo responder.
Igual que hacia un rato me había quedado sin trabajo ahora volvía a tener otro y mucho más mejorado, estaba tan contenta que fui saltando y cantando por todo el paseo, la gente me miraba un poco raro pero les hacía gracia.
Lo que empezó siendo un viernes terrible acabó siendo uno de los mejores de mi vida, con Wesley lo pasé genial, no podía parar de reír en toda la noche, pero si creía que eso era una noche buena solo tenía que esperar a la noche del sábado.
Tanto Mandy como yo habíamos bebido mucho de más, estábamos en el punto exacto de no vas mal como para morir, pero si para volverte loca, tanto que nos perdimos la una a la otra en mitad de la multitud.
Continuaba bebiendo y bailando con desconocidos que pagaban mis copas.
-¡Pídete otra que yo te invito!-dijo un nuevo candidato.
Sin pensarlo dos veces fui hacia la barra, que estaba a rebosar. Tuve que apoyarme porque mis pies ya empezaban a descoordinarse. Mi amigo el camarero que me había servido todas las copas, que creo que era un poco gay, pero genial, ya no estaba por allí, en su lugar había una chica que ignoraba mis llamadas de atención. Solo servía a los chicos. Un chico se colocó junto a mí, deduje que era un chico por como olía, realmente bien.
Ese era mi momento para poder pedir algo.
-Dime cielo.- dijo muy cariosamente la camarera a el chico misterioso.
Dirigió su mirada a mí, pero estaba muy oscuro como para poder describir los rasgos de su cara, se que sonrió porque sus dientes brillaron por la luz que hacia brillar las cosas blancas.
-Te invitaría a una, pero creo que ya has bebido suficiente.- dijo en mi oído.
Automáticamente supe quien era, esa sonrisa, esa voz, ese pelo y ahora esos ojos que había conseguido definir sus ojos, era Harry Styles, de One Direction. El corazón me comenzó a latir más rápido y me di cuenta que no había contestado, simplemente le sonreí y el le dijo a la camarera que no queríamos nada.
-¿Cómo te llamas?-pregunto alzando la voz sobre la música para que le oyera.
Le sonreí e hice señas para que saliéramos a la calle a hablar tranquilamente, pareció entenderlo porque me siguió.
-Creo que aquí podremos hablar mejor.-dije sentándome en uno de los bancos del paseo.
-Estoy de acuerdo.-contesto sentándose muy cerca de mí.
ESTÁS LEYENDO
If I lose myself [One Direction fanfic]
Fiksi PenggemarDos amigas viviendo lo que llevaban esperando desde hace tiempo y cualquier adolescente de su edad querría. Amor, amistad, dolor, desengaño, libertad... es de lo que sus vidas están repletas pero, ¿qué pasa cuando el destino entra en juego? Alice y...