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Bambam se encontraba matando con su mirada a la chica que estaba al frente de su mejor amigo, hablando con su voz chillona y molestando a Yugyeom siempre que puede, jura que ya no tiene paciencia para aquella niña. Siempre era lo mismo, todos los años, este es el ante último año para que ellos terminen el instituto una vez por todas y para Bambam alejarse de esa chica es lo mejor que le puede pasar en toda su vida.

Yugyeom se encontraba con su vista en su teléfono, no le estaba prestando atención a la rubia que estaba frente suyo, quien se encontraba de brazos cruzados y con un puchero en labios, al ver que Yugyeom no le hacía caso.
Yugyeom solamente pensaba en que quería comer y también ver a su novio, no se había dado cuenta de la chica frente él, estaba metido en sus pensamientos profundamente.
Hasta que escuchó un grito que lo hizo saltar en su propio asiento, Bambam sonrió con burla al ver como reaccionó su mejor amigo, si no estuviera aquella niña ahora mismo se encontraría riendo del pelo negro.

—¡Oppa!—gritó la rubia, con voz chillona.

Yugyeom posó su mano en su pecho, justo en la parte donde su corazón se encuentra. Podía verse como un exagerado, pero en verdad estaba tan distraído que no noto la presencia de la chica y que esta haya gritado de tal manera iba a causar un paro cardiaco en él.

—¿Que pasa, sana?— habló una vez que se calmó de tal susto.

Sana sonrió orgullosa por haber logrado que aquel hermoso chico ahora le este prestando atención.
Al recordar a lo que iba sus mejilla se volvieron de color carmesí, avergonzada.

—Mh...—no sabia como comenzar.—So...sólo quería saber, pues...—se trababa cada vez que quería decirlo.

Yugyeom sonrió tiernamente, no sabia que trataba de decir la chica que está frente a él, pero le daba ternura al verla tan avergonzada y tímida.
Bambam que se encontraba viendo la escena quería morirse, si eso sentía, quería morir, aquella chica no hacía nada más que arruinar el día de los dos mejores amigos, siempre pegada a Yugyeom. Y ahora mismo agradece que la pareja de su grandote amigo sea Jungkook y no aquella niña chillona.

Sana respiró profundo antes de hablar rápidamente. Soltó un suspiro y cerró los ojos con fuerza.

—Quería saber si quieres salir conmigo.—dijo rápidamente sin darse tiempo de respirar.

Bambam soltó una estruendosa carcajada, haciendo que sus demás compañero miren a su dirección.

—¡¿Que miran?!—Gritó molesto el tailandés.

Los alumnos de aquel aula volvieron a lo suyo al escuchar molesto a uno de los chicos populares del instituto.
Yugyeom aún se encontraba con los ojos entre cerrado viendo a la rubia, quien se encontraba mirando a Bambam con molestia. Trataba de descifrar que es lo que realmente quiere aquella chica de él, sí, estuvo bastante tiempo atrás de él, una vez ya la rechazó pero ella aún sigue sin importar qué, y en verdad ya se estaba cansando, por más linda y tierna le pareciera la chica, era agotador estar en el mismo lugar que esta.
Antes de que el pelinegro hablé, su mejor amigo lo hizo por él.

—Lo siento, niña...—tocó su cabello. En verdad que Sana y Bambam no se llevaban para nada bien, era odio mutuo. Bambam no la quería por la razón de que esta "tierna" chica quiso algo con su novio, Jackson, haciéndolo molestar aún más cuando se dio cuenta de que era ella y no él quien se le insinuaba al otro. Sana lo odiaba, ¿por qué? Por qué es novio del chico que alguna vez le gustó, es mejor amigo del chico que le gusta actualmente y en verdad no deja que se acerqué a Yugyeom. Bambam siguió con lo suyo.—La verdad es...— miró a sana, los dos conectaron miradas cargadas de odio.—Yugyeom tiene novio. Y en verdad, en verdad, si llegas a molestar o meterte en la vida de él, no solo yo seré quien te deje pelada sino que otros del otro grupo, ¡oh si! Ya sabes quienes son "el otro grupo" así que no vengas a molestar, rubia barata.—se cruzó de brazos.

Chico Cool ••YugkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora