Donde un desconocido le manda mensajes a Jungkook.
Yugyeom estaba enamorado de Jungkook desde que lo vio por primera vez. Después de un tiempo este obtiene su numero de teléfono y se anima a hablarle.
¿Que pasará en todos estos mensajes?.
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Yugyeom se terminó de duchar y vestirse, para salir rápidamente y prepararle el desayuno a su novio.
En cambio Jungkook se encontraba durmiendo en la cama, moviendo su cuerpo a cada rato, su cabeza de un lado a otro y su rostro brillando por el sudor. Entonces Yugyeom supo que su novio no se había curado del todo, tampoco sabía que era lo que tenia en realidad, no es simplemente un resfrío o gripe, o tal vez si era gripe pero una muy fuerte, muchas preguntas en su cabeza y ninguna respuesta.
Se acercó a jungkook y puso su mano en el rostro de este, su piel estaba hirviendo y su sudor era demasiado frío. Volvió rápidamente al baño buscando una pequeña toalla y poniendo agua fría en un bol, yendo rápidamente hacia Jungkook quien seguía en sus movimientos bruscos.
Mojó la toalla en el agua y la exprimió, no mucho, poniendola al fin en la pequeña frente de su novio, esperando que así se le baje la temperatura, el cuerpo de Jungkook dejó de moverse luego de sentir el frío en su frente, algo en él se calmaba pero no despertaba.
Yugyeom podía manejar la situación porque al vivir solo con su hermano varias veces cuidó de él, pero ver así a Jungkook le dolía un poco aunque fuera una simple gripe, no le gustaba que enferme y sufra de dolores.
Cambia otra vez el agua de la toalla y vuelve a colocarlo en la frente de Jungkook, estaban pasando los minutos y la fiebre tardaba en irse, se estaba yendo de a poco. Yugyeom acariciaba tiernamente la mejilla de su pequeño novio y sonreía a la par, Jungkook era la persona más bonita ante sus ojos y no iba a negarlo nunca.
El timbre del departamento suena haciendo que Yugyeom se sobre salte en su lugar, antes de ir a atender vuelve a remojar la toalla y colocarsela a Jungkook, así saliendo de la habitación para atender a quien sea que esté llamando.
Dejando la puerta de la habitación abierta por si la dudas, trota por la sala llegando rápidamente en la puerta de entrada, al abrirla no se sorprende al ver tres personas chismosas y con muchas bolsas en sus manos, por lo que pone los ojos en blanco y los deja pasar.
—Buenas tardes, Yugyeomie—dice el más bajo como saludo.—supongo que no haz comido nada y Jungkook tampoco por lo que les cocinaré algo, diferente claro—le sonríe.
Yugyeom le devuelve la sonrisa agradeciéndole con una pequeña reverencia.
—Gracias, hyung y gracias por venir—les dice a los tres.
El más alto de los tres se pone a un lado de Yugyeom y lo abraza por los hombros, chasqueando la lengua a la vez que le dice...
—No es nada, Gyeom, tenía que venir a cuidar a mi próximo novio—palmea su hombro.
Yugyeom ríe, no sarcástica ni forzosamente, ríe porque le dió risa como lo dijo y lo confiado que sonó, los otros dos chicos también ríen a la par de él.
