Capitulo 4: Dejándose consentir

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Ramón caminaba lentamente hacia su bunker, no quería admitirlo pero en verdad empezaba a sentirse mal, tenía mucho frio pero no podía abrazarse así mismo ya que cierta Troll rosa lo llevaba tomado de la mano y para ser sincero no quería deshacer ese agarre, se limito a que ella lo guiara, de un momento a otro ni él supo el cómo, pero apoyo su cabeza en el hombro de ella, fue entonces que se detuvieron y la reina regreso a ver a su compañero con ojos preocupados, poso una mano en la frente de este percatándose de que la fiebre se estaba haciendo presente, aun de pie Poppy acaricio la mejilla de Ramón mientras le susurraba.

-Ramón, ya casi llegamos, vamos.

Solo obtuvo un asentimiento de cabeza como respuesta, pasó uno de los brazos de Ramón por atrás de su cuello y con la otra mano lo tomo de la cintura para servirle de apoyo, curiosamente Ramón no puso resistencia, al pasar unos minutos por fin llegaron al bunker y descendían por el ascensor, al estar en la habitación de Ramón Poppy lo dejo en la cama, mientras este se acurrucaba pero antes de que él pudiera taparse con las sabanas ella lo detuvo.

-A no, primero tienes que cambiarte

-Tengo sueño

-Te pondrás aun peor sino lo haces.

Ramón solo dejo escapar un gruñido como respuesta, solo se sentó en la orilla de la cama.

-¿Qué esperas? Cámbiate

-¿QUE? ¿No esperas que lo haga enfrente de ti cierto?

Rápidamente las mejillas de Poppy se tornaron de un ligero carmín y mientras se daba la vuelta contesto.

-Lo siento estaré en la cocina.

Ramón simplemente negó con la cabeza, sin duda a veces Poppy era algo distraída, mientras el Troll se cambiaba la reina tenía una seria batalla en la cocina, aun con sus mejillas algo sonrojadas empezó a buscar ingredientes para poder prepararle algo a su amigo, pero la verdad era que no podía concentrarse y no sabía el por qué, bueno no sabía por qué se sonrojo, Ramón era su mejor amigo, pero volvió a recordar sus palabras "¿No esperas que lo haga enfrente de ti cierto?" y ahí estaba de nuevo ese sonrojo se cubrió las mejillas con ambas manos, ¿Qué era lo que estaba pensando? Bueno tampoco era como que hiciera mucha diferencia ya que Ramón solo usaba un chaleco, después de pensar eso su rostro completamente se puso rojo, sacudió la cabeza para alejar aquellos pensamientos Ramón era su mejor amigo solo eso, no quería hacer algo que dañara esa amistad que le tomo mucho tiempo conseguir, así que ahora se preocuparía solo por hacer algo comestible para él y que pudiera descansar.

Por su parte Ramón ya se había cambiado y decidió recostarse unos minutos, para cuando despertó se dio cuenta que había transcurrido una hora, repaso lo que había pasado, por culpa de Arroyin ahora estaba resfriado, Poppy le ayudo a llegar a su bunker, se cambio y se recoso, y alto, Poppy estaba en su bunker y había dicho que cocinaría, empalideció y no por su enfermedad, sino que debía de estar al pendiente de que ella no le hiciera nada a la cocina o peor a su preciado bunker, con paso presuroso se encamino en busca de la reina y la encontró sirviendo un plato, rápidamente inspecciono el lugar sin que ella se diera cuanta y soltó un suspiro de alivio, cosa que no paso desapercibida por ella y gracias a ello noto su presencia.

-Ramón ¿Qué haces aquí? Deberías estar descansando

-Si lo sé, pero quería asegurarme de que nada le pasara a mi cocina.

-Oye yo no le he hecho nada y no lo haría.

-Tú misma dijiste que no eras tan buena en la cocina así que es obvio que tenga mis dudas.

UNA OBRA AL ESTILO TROLLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora