Capitulo 10: Irresistible

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-Mantén los ojos cerrados, respira, relájate.- Si algo caracterizaba a Cybil es que daba buenos consejos y es una gran oyente, era la maestra de Arroyin, ambos eran la parte que mantenía alejados los pensamientos negativos de la villa para lograr una completa armonía, pero desde lo que hizo el troll purpura Cybil decidió brindarle su ayuda para volver a restaurar su aura, esperaba que el fuera con ella por elección propia, al no ser así tuvo que intervenir, razón por la cual ahora se encontraban en una cascada meditando, sentados en unas rocas, mientras el agua caía en sus cabelleras mojando sus cuerpos.

-Me relajara si el agua no estuviera tan fría.- El troll purpura se abrazaba a sí mismo, tratando de aguantar el frio.

-Vamos antes solíamos hacer esto.

-Creo que estoy algo fuera de práctica y la última vez que estuve en contacto con un lago gane un resfriado.- Cybil solo sonrió.

-Está bien creo que será suficiente por hoy.- La troll de piel verde se puso de pie y camino hacia la orilla y se sentó en el césped, al instante Arroyin se le unió. –Recuerdo que durabas más al hacer esto.

-Sí, pero como dije estoy algo fuera de práctica, le pido disculpas si no actué de la forma en la que esperaba.- Arroyin hizo una reverencia ante su maestra.

-¿De qué hablas querido? Es normal que no resistieras tanto, aunque no lograste relajarte y meditar resististe más tiempo en el agua del que imagine.- El troll zen se levanto y miro a su compañera.

-¿De verdad? Bueno si lo dice para hacerme sentir mejor se lo agradezco.

-Aun tienes conflictos contigo mismo ¿no es así?- Arroyin miro perplejo a Cybil y se encogió de hombros, puede que lo oculte muy bien del resto de trolls, pero solo ella podía ver atreves de él.

-Hice algo horrible, algo que no tenia perdón, pero aun así me perdonaron, me recibieron de nuevo con los brazos abiertos y aunque trato de que las cosas sean como antes, simplemente ya no se siente igual, y no me refiero al resto de trolls, ellos se han comportado de lo mejor conmigo, bueno la mayoría de ellos.- Arroyin frunció el ceño al recordar las tareas que Ramón lo hacía realizar.

-La envida puede llegar a ser mala.

-Yo no le tengo envidia.- Cybil levanto una ceja. –Está bien si le tengo envidia, envidia de cómo es capaz de superar sus miedos, que aunque el peligro este presente y se siente acorralado siempre sabe qué hacer, que decir, envidio el valor que tiene, hace unas semanas salvo a Poppy de los ojo espías, me puse a pensar que si yo hubiera estado en su lugar me hubiera congelado y no habría hecho nada y eso es lo que más me enoja, no puedo dejar de ser un cobarde.- Arroyin cayó de rodillas al suelo con la mirada perdida.

-Se ha dicho que "Para que se quiere una manzana podrida, ¿para qué pudra a las demás? Es mejor deshacerse de ella".- El troll purpura cerró los ojos, sabía que él era esa manzana podrida, tal vez todos estarían mejor si él se fuera, pero si era sincero consigo mismo no quería irse, la voz de su maestra lo trajo a la realidad. –Aunque no es de mis dichos preferidos, porque por mas podrida que este esa manzana no quiere decir que sea del todo mala, al descomponerse se convierte en abono y este ayuda a las demás plantas a crecer, si, puede que nunca vuelva a ser la misma manzana de siempre, pero se puede convertir en algo mas, en algo que ayude a las pequeñas plantas a crecer.- Una lagrima solitaria se escapo de los ojos de Arroyin, quien inmediatamente la seco y se puso de pie, Cybil tenía razón, puede que lo que hizo ya no tenía remedio pero eso no significaba que no podía hacer cosas buenas desde ahora y para poder avanzar debía de perdonarse el mismo.

-Gracias.- Una vez más hizo una reverencia a la troll de piel verde quien imito su acción y se fue flotando en armonía, literalmente. Respiro profundamente para relajarse, pero eso duro poco ya que recordó que hoy sus amigas gemelas inaugurarían su boutique y prometió estar presente, sin perder el tiempo se apresuro para ir a su capullo y secarse, no quería llegar tarde y lo más importante no quería volver a estar enfermo.

UNA OBRA AL ESTILO TROLLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora