6. Madre

31 4 0
                                    

Querida madre...
Se que nunca lograré darte todo lo que me has dado...
Me amaste aún sin conocerme, desde el primer instante en que vine al mundo y abrí mis ojos. Tu presencia, fue el primer contacto humano, tan profundo como el mar.
Gracias por traerme, por desearme, por cobijarme, por aguantarme, por las noches tan largas de insomnio y desvelo que te provoque, por ser el hombro donde pude acurrucarme cuando mi mundo ha caído, por ser mi felicidad constante.
Gracias por dejarme ser quien quiero ser y por acompañarme en los caminos que quiero tomar.
Probablemente desde mucho antes de conocerme ya sabías que estabas preparada para darme todo. Darme tus pasiones, tus enojos, tu tiempo, tus sueños, tu cariño, tus caricias y aún más...
Contigo he aprendido a amar sin frenos y he sentido la calidez de un amor verdadero, tan incondicional, tal libre.
Me entregaste más de lo que yo podría pedirte y que jamás podría terminar de agradecerte.
Me diste los regalos más importantes, la educación, los valores, el respeto y mucho más.
Mamá, fuiste mi primer amor. En el sentido que fue el primer amor que recibí, el primero que sentí y el primero que valore.
Hoy, voy a admitir que muchas veces falle. Pero has entendido, has sido paciente y has perdonado mis defectos. Los has besado, los has curado y los supiste entender.
Mi madre... Tan fuerte, independiente, inteligente, responsable y dedicada.
Has sido muchas veces mi mejor amiga, mi alegría, mi apoyo, mi vida, mi todo.
Se que nadie es perfecto, pero para mi si hay alguien que superó la perfección... Mi madre.

Pensamientos de cristalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora