10. daño

16 1 0
                                    

Ya no recuerdo cuando sucedió, porque he aprendido a dejarlo atrás, pero sé que a veces hay un dolor punzante en el pecho que me dice que las cosas en el pasado no se dieron bien.
Quizás no te dabas cuenta o quizás sí, pero decidías restarle importancia, aun así quiero contarte que las cosas que solías hacerme y decirme me deprimían.
Hay cosas que dolían tanto pero no sabía cómo reaccionaría alguien al decirle que me sentia dolida y vacía debido a todo lo que me sucedía y pasaba por mi mente en esos momentos.
Viví y cargué con ese gran dolor durante años, fue duro, pero no imposible.
No estoy enfadada ni mucho menos con deseo de devolverte el daño, tampoco estoy liberando el enojo que acumule por mucho dentro de mí.
Sonará raro, pero quiero agradecerte.
Porque sin aquel daño y dolor nunca me habría dado cuenta de lo fuerte que soy, tampoco me habría dado la oportunidad de sentir alivio al perdonarte y ver toda esa ira marchándose junto con el miedo.
Porque así soy yo, esta soy yo.
Muchas veces me sentí deprimida porque de alguna manera te creí, creí aquellas palabras hirientes que salieron de tu boca y que con el paso de los días se fueron convirtiendo en mi realidad.
Pero sabes, he aprendido a crear mi propia realidad, una realidad donde soy feliz y he borrado por completo la tristeza y el miedo dentro de mí.
Nunca me conociste y aun así reflejaste en mí, todos tus conflictos.
Nunca me conociste, y es por eso que logre perdonarte hace mucho tiempo.
Aunque me costó tanto perdonarme a mí por creer tus palabras, porque cada mañana solía despertarme mirándome al espejo y repetía aquellas palabras que tú me decías y que se fueron convirtiendo en mías.
Hoy sólo me queda agradecerte por la lección, he mejorado, estoy mejor ahora gracias a ti.
Porque descubrí que soy mi mejor amiga y que las palabras de los demás no me definen, que solo yo me conozco y yo soy la única capaz de juzgar mis pasos. Aprendí a quererme y fue gracias al daño que me causaron, que me causaste hace tantos años...

Pensamientos de cristalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora