¡Fue el fantasma! ~BoruSara~

Capitulo V - Plan de seducción

Los pasos apresurados de Sarada o Alice resonaban en los vacios pasillos que cruzaba. Ya se habia perdido dos veces y empezaba a desesperarse.

Esta mañana Boruto la dejó en la puerta de este laberinto lleno de señoras con cara de bagre y chicas nada amables que parecía le daban indicaciones incorrectas y se burlaban de que no supiera donde se encuentran los vestidores de los de primer año. De alguna manera volvio a la entrada donde se encontraban esas enormes letras grabadas en marmol y oro o algo parecido.

"The royal ballet academy"

Se despino los cabellos con ambas manos frustrada, con ganas de mandarlo todo al carajo y largarse de ahí. Sabia que Sarada practicaba ballet pero el que entrara a una de las academias mas prestigiosas a nivel mundial terminó de impresionarle, la noche anterior cuando lo supo averiguo todo lo que pudo acerca del lugar.

El terrero era enorme, ella no habia recorrido ni la tercera parte en las dos horas que llevaba dando vueltas. Todas las estructuras son renancentistas... Un momento ¿Como se eso? Bueno como sea, lo unico bello de aca es la arquitectura.

Tomó otro camino al ala oeste decidida a encontrar los benditos vestidores. Sabía que estaban en el primer piso asi que inspeccionó aula por aula, encontrandose con solo chicos en cada lugar. Chicos en muy buena forma y atractivos, probablemente este lugar era exclusivo de hombres, aunque era casi seguro prefirio continuar buscando ahí. No podía evitarlo, el hecho de encontrarse en un sitio solo de hombres, siendo ella la unica mujer le hacia volar la imaginacion.

Se paró un momento para meditarlo, estas academias eran estrictas tanto en el ingreso como en el transcurso de la carrera, leyó en internet que esta era de las reconocidas por eso justamente, que solo una octava parte de los que ingresaban lograban egresar ¡Una locura! Pero de ellos el futuro estaba resuelto ya que tenían empleos asegurados en las empresas que mejor pagaban. Si es tan dificil significa que cada dia cuenta y ella ya le habia perjudicado medio dia a la pobre Sarada, lo menos que podía hacer era enfocarse en encontrar los vestidores e ir a clases de una vez ¡O de una me visto en cualquier aula vacia que mas da!

Volteó su mirada y se encontró un letrerito que decía "vestidores" ¡Al fin!

Entró y lo primero que vio fue a un hombre totalmente desnudo. El se asustó pero ella no pudo evitar seguir mirando.

- ¡Cierra la maldita puerta! - El tenía cabello negro y ojos verdes pero Alice no se fijaba en nada de eso, solo veía su bien formado torso y alcanzó a ver un poco del miembro antes de que se cubriera. - ¡Cierrala ya!

Ella la cerró lentamente sin dejar de observarlo y se apoyó en la puerta. Solo habia un chico ahí, una ves que saliera ella podría entrar y ponerse el maillot.

La puerta se abrío y un enfurecido muchacho salío a hacerle frente.

- ¿Se puede saber que diablos haces aqui? - Su tono helaba la sangre.

- Bueno yo... Buscaba los vestidores. - Quisó entrar pero el brazo del chico se lo impidío.

- Este es el vestidor de HOMBRES. - Hizo incapíe en la ultima palabra, Alice notó que el llevaba ropa normal, pensó en el torso que esa camisa escondía. - ¿Cual es tu problema? - Le molestaba que le mirará tanto pero no pudo esconder su rubor.

- Lo siento, tengo prisa asi que por favor ¿Puedo usar este vestidor? Solo por esta vez ¿Si?

- Se supone que dejes tu ropa en tu casillero ¡Obviamente no esta aca! - vociferó.

- Lo tendré en mi mochila, por favor ya voy tarde. - Volvío a suplicarle.

- Haz lo que quieras. - El chico se dió la vuelta y siguío su camino. Alice no esperó y entró al vestidor.