Dangerous Attraction --YoonMin-- [Beautiful Creatures I]

Parte 8.

Un tenso silencio gobernaba aquella área oscura, donde solo destacaban dos cuerpos. Uno de rodillas, a la espera de saber cuál sería el resultado de su plegaria, y el otro que se encontraba increíblemente asombrado ante el inusual comportamiento del vampiro. Había escuchado tantas cosas acerca de aquellos seres nocturnos que no podía evitar mostrarse un tanto incrédulo; si los vampiros no conseguían algo a las buenas, lo conseguían a las malas. No obstante, él había rogado, pedido por favor...

- Protégenos bien, sino me encargaré de matarte yo mismo - dijo finalmente.

- ¿Q-qué?

Yoongi no se creía que ese hubiese sido el veredicto final del que, hasta hace un momento, creía ser su mayor enemigo.

- Viviremos. Espero que nos ames de verdad, porque llegas a lastimar a ChimChim - casi gruñó el tritón.

- Nunca volveré a hacerle daño. Él es mi todo. Gracias, gracias, gracias.

- De todas maneras, no podía matarlo. Por culpa de Taehyung está demasiado fuerte, recuperando la consciencia. Y tú sigues siendo mi destinado, un poco patético pero, si estás dispuesto a suplicar de rodillas por mi vida, sé que estoy en buenas manos - le dijo antes de guiñarle un ojo -. No me decepciones, Min Yoongi.

Se levantó rápidamente, queriendo decir algo más, pero aquella sensación vertiginosa volvió y, de repente, había demasiada luz en la habitación, demasiados sonidos. Muchas voces entremezclándose las unas con las otras.

Yoongi rápidamente se inclinó sobre el cuerpo del peligris, quien tenía las heridas casi curadas, dejando apenas unas cicatrices, y los ojos abiertos. Definitivamente, eso fue lo que más le gustó ver al vampiro, su pequeño estaba vivo. Y lo miraba con tanto amor...

- Jiminnie, ni se te ocurra volver a irte - dijo con suavidad mientras colocaba un mechón de pelo en su sitio.

- Yoongi hyung - sus ojos brillaban -, yo lo siento.

- No es nada, pececito.

- ¡No soy un pez!

- Tienes razón. Eres mi pez, y te amo.

Jimin se quedó un momento sorprendido por las palabras, pero no dudó luego en atacar los finos labios del mayor. Olvidando que en aquella habitación había más personas aparte de ellos dos. Al vampiro tampoco pareció importarle demasiado cuando apresó la cadera de su chico fuertemente, tomando el control de aquel beso que demostraba tantas cosas. Ese momento era suyo, nadie podía romper su esfera de paz...

O eso creían.

- Chicos, no se olviden que están en mi cama - habló Taehyung, logrando que se separasen jadeantes.

- No debiste interrumpir, niño tonto - le regañó su hermano mayor.

- Pero hyung... ¿y si acababan haciéndolo en mi cama?

- Nunca dejaría que eso pasase - dijo Jungkook con una sonrisa -. Esa cama solo puede tener a dos personas en ella, y no son ellos - las mejillas del de piel canela se encendieron.

Taehyung repentinamente salió corriendo de la habitación, seguido por un Baekhyun cansado.

- Será mejor que esperen a que se cicatrice bien. Winwin hizo un gran trabajo pero heridas como esas son muy peligrosas. Será mejor que descansen y ya mañana se ponen a ello - dijo Jaehyun antes de hacer una reverencia e irse.

Los chicos en la cama se miraron un momento entre sí. Las mejillas de ambos estaban sonrojadas. No se habían dado cuenta de que había tanta gente en la habitación y ahora se maldecían por ello.

El chico que se había quedado con ellos, el otro dueño de la habitación, se sentó en su cama mirando a la pareja en el mueble contrario. Necesitaba la ayuda del pequeño tritón.

- Sé que es un mal momento, Jimin, pero quería saber si podemos hablar - dijo el lobo, el contrario simplemente asintió -. Yo... - sus mejillas adquirieron un leve tono rojizo - Tae es mi compañero, mi pareja predestinada y yo...

- ¿Por qué me lo dices a mí? ¿No deberías decírselo a él? Tae es muy despistado, es posible que no haya dado cuenta.

Jungkook juntó sus manos y miró al joven.

- Está comprometido contigo.

- Hemos roto el compromiso.

- ¿Qué? ¿Cuándo?

- Desde que Yoongi hyung entró a mi vida - dijo con una sonrisa -. No puedo evitar ser suyo únicamente - confesó.

El vampiro le miró con tanto amor. Sus ojos parecían brillar tan fuerte como las estrellas gracias al comentario de Jimin. Nunca le habían dicho nada tan bonito; que él fuese el primero había iluminado su oscuro corazón.

Él también le pertenecía a ese chico de cachetes gigantes.

- Entonces... yo...

- ¿Sigues con Yugyeom? - intervino Yoongi. El chico asintió - Entonces lo primero es terminar con él. El amigo de mi pececito no se merece que lo traten de segundo.

- Yo... Tienes razón, hyung.

El joven salió rápidamente por la puerta, dejando atrás a un asombrado Jimin y a un disgustado Yoongi. Antes las generaciones de hombres lobo eran más serias, algunos solían esperar a su compañero hasta el día de su muerte. Pero estos jóvenes de ahora eran todos unos libertinos. Se lamentó por unos segundos del pobre Taehyung... Lo que le esperaba a causa de ese hombre lobo.

- ¿Te llevo a tu habitación? - le preguntó con una sonrisa.

El más joven asintió y esperó hasta que el vampiro lo tomó al estilo nupcial. Park se sentía amado y aquello hacía que su corazón fuese muy rápido.