¿Alguna vez quisiste ir a estudiar al extranjero? Si tu respuesta es sí, posiblemente te sientas como Alexander Gildemeister, un adolescente argentino que quería viajar a Alemania pero, por motivos de dicho país tuvo que viajar a Japón, junto a su m...
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La mañana del viaje me desperté de buen humor, creo que dormir más me ayudó a estar más alegre. Recuerdo que le pedí ayuda a mi madre para decidir que ropa llevaría a Japón, era consciente de que iría por 2 años, así que no me podía permitir quedarme corto con la ropa. Mientras esperaba a mi madre para que me ayudase, decidí empezar a empacar temprano, así podría disfrutar del resto del día antes de ir al aeropuerto. <<Bien, tengo 2 maletas grandes y mucha ropa que guardar. Tengo que ser inteligente al elegir mis prendas y astuto para que todo entre>> Pensé decidido al abrir el armario. Vi por varias veces mis prendas, confuso. No sabía cómo era el clima en Japón y, Dianna no estaba conectada como para preguntarle que me recomendaba. Así que decidí guardar toda mi ropa. Como no tenía demasiada ropa, todo entró, pero, no podía cerrar las maletas; Por más fuerza que hiciese, no tenía caso.
Oí los pasos de mi madre al subir por la escalera, venía a ayudarme a guardar la ropa.
—¿Hijo, se puede? —Dijo desde fuera de mi habitación.
—Claro, pasa, por favor—Entró y echó un vistazo a las maletas que rebozaban de ropa—Creo que necesito tu ayuda para que cierren—Reí mientras me encogía de hombros.
—Ay, Alex—Suspiró mientras negaba con la cabeza. Se acercó a una maleta—¿Acaso crees que esto está bien acomodado? —Señaló la maleta mientras me miraba. Negué con la cabeza. También miré la maleta; Toda la ropa estaba mal doblada y muy apretada—Parece que todavía tengo que mostrarte como hacerlo, presta atención—Enunció, tomando la maleta tirando su contenido en mi cama, acto seguido tomó mis camperas—Como las camperas son más gruesas, tienes que ponerlas primero, sino no te quedará espacio para lo demás—Dijo mientras doblaba mis camperas de forma eficaz para que entraran y, aún quedaba espacio para guardar más prendas—Bien, ahora guardaré tus prendas para el día a día—Siguió por mis remeras, las enrolló una por una, para mi sorpresa entraron todas. Después, acomodó mis pantalones mientras tarareaba algo.
Para mi sorpresa, toda mi ropa casual entró en una sola maleta. Creo que acomodé todo muy mal o mi madre era muy buena acomodando ropa.
—¿Alex, tu raquetero está muy lleno? —Señaló al raquetero.
—No sabría que decirte, solo llevo 6 raquetas y varias cosas más—Dije, frotándome la cabeza. Era obvio que llevaría mi raquetero a Japón, no iba a dejar de jugar al tenis.
—Es bastante grande, creo que podrías guardar tu ropa deportiva ahí. De esa forma podrás guardar cosas que quieras llevar a Japón en la maleta vacía—Dijo antes de irse de mi habitación.
Guardé mi ropa deportiva en el raquetero, como mi madre me lo aconsejó. Ahora me quedaba por guardar algunas cosas que llevaría a Japón. Al final me decidí por llevar un par de libros, collares, bufandas, guantes, algunos juegos de mesa, mi notebook y los auriculares. Con eso iba a estar bien.
Suspiré aliviado, ya tenía todo listo para el viaje, ahora me quedaba pasar el resto del día hasta las 20:30hs, donde me encontraría con Dianna para ir a Japón. Hablando de Dianna, << ¿Por qué no le pregunto si quiere salir al parque?>> Pensé mientras agarré el celular. Sí, tenía ganas de estar con ella, así que le mandé un mensaje.
