Tenías Que Ser Tú

capítulo 30:arrebato

-soy Namikaze Menma, soy el hermano de naruto-se presentó mi hermano estrechando la mano de hinata-

-Namikaze?-cuestionó ella confundida-

-es una larga historia, pero hoy sabrás todo no te preocupes-sonrió ampliamente, dejando un poco más de seguridad en los ojos de hinata-

Boruto había recibido a su madre con mucha alegría y ella también hizo la parte de actuar lo más maternal posible con él. Hace un rato lo recoste en su habitación ya que se había quedado dormido en los brazos de su madre.

Ahora todos nos encontrabamos en la sala, sentados en lugares diferentes con expresiones diferentes, hanabi estaba nerviosa y yo también, el más relajado era menma, pero no digamos que esta en medio de un equilibrio espiritual tampoco.

Mi mente me recitaba una y otra vez todo, debía contarle todo, absolutamente todo, no podía dejar la parte de la pelea antes del accidente, probablemente después de esta charla no quiera verme más.

-nee-sama, escuchame-empezó hanabi-a tus siete años de edad, cuando yo apenas tenía un año murió nuestra madre-y ahí estaba, la expresión de sorpresa y completa tristeza invadió el rostro de hinata-papá empezó a alejarse de casa y siempre nos dejaba con Ko y con las sirvientas de la casa-

-y...¿de que murió mamá?-preguntó con su voz ahogada-

-tú y ella iban a comprar un par de cosas a la tienda, viviamos en Konoha,  un pueblo a las afueras de Tokio, se vieron envueltas en un asalto y cuando mamá trato de salvarte fue atropellada por un auto-hinata gritó ahogado y se cubrió la boca y trataba de borrar esas lagrimas que salían sin parar-nos mudamos a Tokio, donde en tu época de secundaria conociste a naruto-me miró y su expresión mostraba un tipo de señal-

-eras una niña que no paraba de llorar cuando te conocí, yo me ofrecí a ayudarte y nos volvimos amigos y pasamos todo ese tiempo juntos, nos volvimos novios a fines de la secundaria y así seguimos en la Universidad, fuimos a estudiar a Konoha, por que querías ir a ese Universidad desde que eras niña y yo te seguí, tu compañera de trabajo ino, también estuvo ahí, un día que volviamos a Tokio a ver a nuestros amigos y a la familia, tuve un accidente y olvidé todo-su expresión se volvió distinta, no reflejaba nada-pero finalmente me encontré contigo en la estación de policía donde trabajo, necesitabas ayuda, así que he permanecido contigo desde hace mucho tiempo-no me miraba y no la culpaba, es tan extraño que te cuenten la historia de tu vida-sufrías de atentados, hay alguien por ahi que desea tomar tu vida-se lo dije, una de las cosas mas crudas de esta historia. ella me volteo a ver atemorizada y entrelazo sus manos con fuerza-por eso tuviste el accidente, o al menos eso creemos. poco después empezamos a tener una relación mas seria y nos volvimos novios, al poco tiempo me entere de que ya te conocía y recordé todo lo que había olvidado y....-trague saliva, este era, era el momento para decir lo mas difícil, no quiero que me odie otra vez o tal vez ya lo hace, tal vez no me permita ver a boruto de nuevo y se aleje de mi, eso no podría soportarlo-me enoje, me desquite contigo...-

su mira se volvió sorprendida y algo molesta.

-hay cosas que no puedo explicar ahora, porque son demasiadas, solo quiero decirte que lo siento, porque después de nuestra discusión tuviste el accidente y estuviste estos meses en el hospital -

Una vez que dije eso, ella se levantó de imprevisto y se fue directo a las escaleras, sin mirar o emitir algún sonido.

Todo seguía en ese incomodo silencio, ese en el que todos se miran y al mismo tiempo desvían la mirada cuando estas chocan con otras. Hinata había demostrado su enfado y decepción, algo que opaco mi corazón y lo redujo a solo un horrible sentimiento de culpa, tal cual como lo sentí cuando la vi en el hospital después de la discusión.

-no pensé que tendría esa reacción-dijo menma algo avergonzado por un pequeña risa que liberó deliberadamente-

-callate menma-le dijo hanabi mirándolo fijamente con el seño fruncido-

-lo-lo siento-bajo su mirada apenado, luego me dedico su mirar a mi, denostrando una mirada aún más tensa-nii-san?-

-no me llames así menma, eso no me hará sentir mejor-le dije con la frialdad que me hizo sentir al llamarme así-debo salir, tengo que...hacer algunas cosas-me levanté, claro que era una excusa, pero no podía estar en este lugar esta noche-

-naruto, espera no vay...-ya había cerrado la puerta antes de que terminara la frase-

Nada estaba bien, nada había salido respecto al plan, no realmente. Hinata sin memoria, odiandome, embarazada, una indiferencia que tal vez no acabe nunca y lo peor, es mi corazón destrozado por la culpa.

Una.

Dos.

Tres.

Cuatro.

Cinco vasos de cerveza llevaba ya y aún no podía disipar lo que había ocurrido. Es una mierda, todo.

Engullo en seco el trago que me queda y azotó el vaso en la barra.

-dame otro!-

No pienso, no relaciono y no me importa nada en este momento.

-señor, ya ha bebido demasiado-me dijo el barman con un tono algo tenso, le dedique una mirada amenazante y el sin más empezó a llenar la jarra-

-yo te pago para que me des lo que quiera, así funciona!-le grite con el tono disparado para cualquier lado-

-si señor-se limitó a decir y se retiró para atender a otros, mientras yo bufaba por su estupidez-

Miré mi bebida con desdén, sabía que debía detenerme, pero,simplemente me obligo a beber, es la única forma de pensar en otra cosa.

-ahí estas pequeño estupido!-reconozco esa voz, pero prefiero ignorar a su dueño y tomar otro sorbo-hey!te estoy hablando inútil!-

Sasuke me sujeto por el cuello de la playera que llevo puesta y me fulmina con una mirada de los mil demonios.

-sa-su-ki!que haces aquí? No es lo tuyo  arruinar las fiestas o si?-sonreí como un idiota despues de decir eso y él atinó a golpearme en la cara y dejarme aquí, tirado en el suelo-teme! ¡¿Por qué haces eso?!-

-debería preguntarte yo eso!¡¿que crees que haces?!son las cuatro de la madrugada y aún sigues aquí, menma me llamó para pedirme ayuda para buscarte y yo deduje que estarías aquí-me siguió fulminado y ahora me sujeta por los hombros y me levanta para quedar frente a él-explicame, que diablos estas pensado?-

Aleje mi mirada de la suya e hice un puchero con mi labio inferior.

-me embriago, querido, eso hacías también cuando sakura te dejó aquella vez-

-no te atrevas a compararte conmigo, tú continúas en una relación-lancé un bufido irónico-

-claro que no sigo, hinata sabe todo y ya demostró todo lo que sentía al dejarme sin ninguna respuesta-

-eres un estupido, deja de pensar en ti ahora, recuerda que aún tienes a boruto y depende de ti todavía-

Cuando me dijo eso, un chispa se encendió, en medio de ese mar al que me había hundido gracias al alcohol, la mano de sasuke me permitió despertar de aquel trance.

Perdoname hijo.