Tenías Que Ser Tú

capítulo 45:paz.

-Naru...-

-Hinata, te amo mucho-

Los ojos de la azabache se engrandecieron al escuchar esa palabras. No por que no las haya escuchando antes, sino porque nunca pensó oírlas en ese preciso momento.

Naruto sostenía firmemente su mano y la acariciaba, mientras la miraba con ternura y un hermoso brillo en los ojos.

Ella estaba sorprendida. Tanto que no habían palabras que decir en ese momento, solo amarse con la mirada.

-yo-yo también, pero ¿Por qué lo dices tan de repente?-sus mejillas enrrojecidas la hacían ver realmente hermosa a vista de Naruto-

-extrañaba decírtelo-dijo tímidamente. Hizo viajar su mano hacía el rostro de ella, acariciando su mejilla con el pulgar-me gusta ver tus ojos-

Cada palabra que él decía era como escuchar una dulce sinfonía. Deseaba tanto volver a su vida normal y poder criar a sus hijos junto a Naruto, eso era lo que más deseaba.

Pero luego, su rostro se vio palidecer. Una imagen perturbadora recorrió su mente.

-¿Qué pasó con ella?-Naruto gimoteo ante la pregunta y su rostro cambio a una más serio-

-luego de que te desmayaras apareció tú tía abuela, Kaguya-sama, ella le...disparó a Shion-perpleja por lo dicho por Naruto, Hinata suspiró nerviosa-Toneri fue arrestado, junto con Kaguya-sama, pero no creo que la encierren, estaba defendiéndonos-hizo una pequeña pausa, pensando en la reacción de ella-Shion quedó un poco grave por el disparo, pero apenas esté bien, la van a encerrar-

-ya-ya veo-dijo ella bajando la mirada-

-oye-Naruto sostuvo su mano con más fuerza-no debes sentir pena por ella, nisiquiera compasión-el rostro de Naruto la impactó, estaba molesto, no quería que ella fuera correcta y gentil con la gente que le hizo daño-

-no puedo alegrarme tampoco-dijo ella apartando la mirada de los orbes azules de Naruto-ella...me hizo daño, es cierto-hizo una pausa para lograr encontrar las palabras adecuadas-nos hizo daño, pero...ella también sufrió-

-a ella no le importaba caer en prisión después de cumplir su cometido y ese era...-se contuvo-

-ella no está bien-

-no, no lo está, tal vez nunca lo estuvo-Naruto estaba incómodo con la conversación. Hinata no iba a parar de defender a Shion hasta que él lo aceptara, así que planeaba terminar el tema-olvidemoslo, por favor-le pidió algo insistente-

Ella no dijo nada, solo asintió resignada.

El sonido de la puerta llamó la atención de los dos y se fue con él la tensión que había surgido por un momento. Hiashi junto a Hanabi aparecieron.

Así, mucha gente pasaba por la habitación de Hinata para visitarla y aliviar con ella su salud y la de su hijita, que por desgracia aún no a podido ver la madre. Naruto le prometió que cuando ella éste bien para caminar, la llevaría donde Himawari.

Pasaron dos días y cada vez Hinata estaba mas ansiosa por ver a su hija. El médico le dijo que la niña estaba completamente sana y que de todos modos deben traersela para que tome leche y esté con su madre.