Maxinator: El extraño Max

Capítulo 15: Han River

Al día siguiente, Grizo estaba ofendido y le recordaba a Gisel a cada rato que a él no lo había invitado al baile universitario:
-Ya te lo dije como un millón de veces! no te invité a la fiesta porque no sabía como hacer para que nadie se pregunte porqué había una criatura voladora de cuatro brazos en la fiesta, que esperaba que les dijera? "Ah, no es nada, es un amigo que proviene de otra dimensión que por cierto, lo imaginó otro amigo que a su vez es un superhéroe, ese al que la gente llama Maxinator que combate junto a otra amiga a la que llaman Puño Cambiante que también es heroína, y sí yo también ando por el oficio pero no tengo poderes, soy asistente de otros dos que son el famoso Músculos y...."
-Ok!!!! Ya para!!! Hablas demasiado-La interrumpió Grizo aún más irritado, había escuchado esa respuestas miles de veces pero aún así no se resistía a preguntar la misma pregunta una y otra vez de lo ofendido que estaba de que no lo hubieran invitado y a todos los demás sí.
-Tranquilísate Grizo - Comenzó a decir amablemente Max- Mira, hoy voy a visitar a alguien muy importante para mí que no veo desde que soy Maxinator y para levantarte el ánimo solo te voy a invitar a tí.
-Qué??!!! Solo a Grizo??!! Y quién es esa persona tan importante???!!!-Gisel comenzó a saltar en el lugar frenéticamente y cuando hablaba casi parecía gritar muy histéricamente de lo celosa que ya estaba sin saber siquiera a quién no conocería esa tarde.
-No te pongas celosa Gisel, es mi abuelo, apuesto que podrás verlo otro día.
Gisel suspiró aliviada:
-Ahhh supongo que está bien, lamento haber sido injusta contigo Grizo, apuesto a que te divertirás esta tarde.
-Gracias Gisel pero creo que el que se divertirá mas es el abuelo de Max, yo ya lo conozco, lo veía a travéz de Max cuando el me imaginaba, es él quien no me conoce.
Gisel había discutido con Grizo toda la mañana, así que decidió irse tan rápido como suele aparecer:
-Uh! Me había olvidado que tendría que estar haciendo algo importante en otro lugar, bye amigos!!!- y se fue como un rayo, en un momento estaba y al otro no.
Una vez solos, Max y Grizo se dirigieron a la casa del abuelo de Max.

Cuando llegaron a la puerta, Grizo comenzó a sentirse nervioso, ¿Cómo reaccionaría el cercano pariente de su amigo a su extraño aspecto?. Tocaron la puerta un par de veces y un hombre canoso de ojos miel iguales a los de Max abrió la puerta con una sonrisa:
-Max!!! Cómo está mi nieto favorito?- Su abuelo siempre bromeaba con eso, ya que era su único nieto.
De pronto se percató en Grizo, que con su mano se agarraba su brazo nervioso mientras que sus pinsas se mantenían bajas, bajando sus hombros. Sus orejas felinas acompañaban a sus hombros y no miraba directamente al anciano, su timidez era evidente.
-Qué es eso?- Dijo medio asustado al verlo de golpe.- Espera, dos pinzas... orejas de gato... patas de perro... dos manos... G-Grizo? Max, no es Grizo? La criatura de la que me hablabas todo el tiempo? Espera, eso no tiene sentido, no podría, verdad?
Max dio un largo suspiro, tenía mucho de que hablar...
-Normalmente eso no sería posible, pero sí, es Grizo, yo... tengo algo importante que contarte... te prometo que aclarará todo.
Sin decir más, el abuelo de Max los invitó a pasar y cuando estuvieron cómodos en sus asientos y ambos bebieron algo de agua, el abuelo de Max se sentó con ellos dispuesto a escuchar.
-Muy bien, ya estoy listo para escucharte Maxi, habla.- Lo animó amablemente su abuelo para romper el hielo.
-Bien, has visto las noticias últimamente? Viste el tipo de traje de guepardo azul? Bueno... ese soy yo.
-Te refieres a Maxinator? Ohhh!!! Max! Eres un héroe!!! Estoy muy orgulloso de tí, pero... que hay de Grizo?
-Bueno, verás, lo de cómo llegué a ser Maxinator en sí, es una laaarga historia, pero de echo fue por Grizo que todo comenzó. Un día, una luz brillante salió de mi mano y cuando esa luz azul me estaba cegando... de la nada.. Grizo simplemente apareció!- Contaba Max tan emocionado que se podía ver el brillo en sus ojos como si estuviera reviviendo todo ese momento.
-Así como así???!!!- Preguntó el abuelo incrédulo.
-Sí!!! Y luego de eso aparecieron mis poderes, y pasaron tantas cosas... y finalmemte puedo decir que soy Maxinator!!!
-Bueno, creo que me lo contarás poco a poco. Grizo, es un honor conocerte, supongo que ya sabes que el pequeño Maxi siempre me habló mucho de tí.-Dijo fingiendo ser formal con una reverencia sobreactuada y un guineo.
Al oír sus palabras,Grizo se sintió más relajado y le agradeció su gesto devolviéndole la reverencia con la cabeza.
-Además gracias a tí mi nieto es Maxinator.- Agregó el abuelo emocionado- Mi nombre es Han- se presentó sonrriente.
-Mucho gusto Han.
Luego, Max siguió contándole cosas de su vida como Maxinator. Han lo miraba asombrado con un brillo de orgullo en sus ojos, aunque también se notaba que se preocupaba cuando oía las veces en las que su nieto había corrido peligro.
-No se lo digas a papá, sí?, ellos buscarían hablar conmigo y aún no estoy listo para eso- Le pidió Max con cara temerosa y suplicante.
Han se quedó mirándolo un rato fijamente pensando en que eso terminaría mal y al final con un suspiro aceptó cumplir con los pedidos de su nieto:
-De acuerdo, pero deberás decírselo tú luego, no podrás ocultarlo por siempre- le contestó apoyando su mano en el hombro de su nieto a modo de consuelo y con expresión comprensiva.
- Gracias!!! Te prometo que se lo diré cuando sea el momento, ah!, y tampoco se lo digas a mamá, sabes que no guardaría un secreto así y se preocuparía demasiado.
-Tranquilo Maxi, cumpliré con mi palabra, siempre podrás confiarme lo que sea.- le respondió alegremente.

Max abrazó a su abuelo, era en quién más confiaba, y fue entonces, durante ese momento conmovedor que el sonido de una explosión irrumpió en los oidos de los presentes. Max miró a su abuelo y abrió la boca para disculparse por tener que irse tan pronto pero antes de que pudiera hablar, Han se le adelantó:
-Lo sé, vayan Maxinator y Grizo, tienen trabajo que hacer.
Max y grizo agradecieron comprensivos con la mirada.
-Hora de probar, el nuevo traje!- Max sacó un botón del bolsillo y al apretarlo contra su pecho, el traje se activó cubriéndolo por completo sin que se tuviera que cambiar como antes lo hacía.
-Este traje portatil luce igual que el anterior pero no tengo que perder tiempo en ponérmelo- dijo algo presumido.
-Si, blah, blah, blah, quizás ya no pierdas tiempo poniéndote el traje pero aún sigues perdiendo tiempo alardeando, vamos allá- Grizo se transformó y se fue volando hacia la acción.
-Eeeyyyy!!! Esperame- Gritó quejoso Max mientras trataba de alcanzar a Grizo.
Han suspiró y dijo pensativo en voz alta:
-Ahhh, Max siempre será Max
Entonces sonrrió divertidamente antes de cerrar la puerta, prender la televisión y ver como su nieto salvaría el día...