El amor no existe

768 30 33
                                    

―¡El amor no existe! ―gritó Mel, sintiendo ardor en su garganta mientras cerraba la puerta de su habitación apurada haciendo que todas las personas que caminaban por el pasillo de su piso voltearan a mirar qué sucedía.

          Una vez en su cuarto continuó :

―  Siendo 29 de noviembre de 2017, en nuestro cuarto universitario en Princeton con 23 años de experiencia, a pocos meses de recibirme y a un par de semanas de que inicie el invierno más frío, triste y desolado de mi vida, tengo la convicción de que el amor en este mundo, NO EXISTE, y  por eso no lo  podemos encontrar.

La sentencia era triste. Mel se sentía abatida pero a la vez   estaba inspirada con el tema,  podía notarse  la seriedad con la que hablaba,  usando ese tono de voz pausado y convincente haciendo que el poder de la persuación se apodere de ella,  algo que la caracterizaba cuando algo   le interesaba.

―¿El amor?― suspiró ― . El amor, es una mentira saturada de escenas memorables, surtida de engaños y fantasías que van y vienen con el fin de velar el dolor de la existencia humana. "Me dijo, me llamó, me trajo, me miró, me regaló y esas afirmarmaciones después siguen en plural,  nos miramos, hablamos, nos besamos, ¡lo nuestro va en serio!, esa es la mejor de todas". ¡Lo nuestro va en serio! ¡Ay por Dios...! ― dijo en un tono desesperado y subiendo el volumen nuevamente.

>>Nos creemos todo  y lo que es peor, creemos que todas esas acciones van acompañadas de amor pero, en realidad todo es una mentira. Son pequeños engaños que van sumándose a mentiras  más grandes que toman el valor de verdad, como una trampa mortal  porque en el caso de que "algo ínfimo" de toda esa sucesión de engaños sea cierto, ¿cuánto dura?, ¿cómo se hace para saber la fecha de vencimiento de algo que indiscutiblemente es de dos?, y lo que es peor, ¿para cuál de los dos termina primero?, ¿quién ama más?, ¿cómo se hace para amar a alguien que no te ama tanto como vos a él? Nadie... absolutamente nadie, puede responder a estas preguntas.

Mel se recostó en su cama por unos momentos para recuperarse y seguir contándole a su amiga suponiendo que esta la escuchaba.

―Me duele Samy, nos pasamos la vida intentando encontrar el amor... yo lo he intentado. Lo esperé por varios años en la secundaria y aunque no pasó  con Ión, porque desapareció sin dejar rastros, yo lo quise. Yo sentí amor por él más allá de lo que opine el resto de la gente. Después de aquella desilusión y del dolor, que nada pasara entre nosotros me causó dolor y no volver a verlo también, me crea quien  me crea porque  me enamoré Samy,  me enamoré sola y sufrí sola, le guste al resto del mundo o no le guste. Para mi existe enamorarse sola y existe sufrir por un amor no correspondido. Pero bueno...  después de todo eso aposté  a Sam, acepté aquel desamor y empecé algo con él, que  era alguién real, como si Ión no lo hubiera sido, lo que quiero decir es que teníamos algo más que  un par de miradas y algunas palabras. Y ahora... ¿me pasa esto que es mil veces peor? Ojalá se tratara solo de mí Samy, pero hoy me di cuenta que todos hacemos lo mismo, esperamos y esperamos, hasta que un día: entrás a un bar, te subís a un tren, caminás por un parque, lo mirás a escondidas en los recreos de la escuela; lo ves de cerca, y crees que lo encontraste ¡Y estás feliz!, te sentís realizada, ¡sentís que al fín algo en tu vida va genial! Claro que en ese momento, no pensás en la fecha de vencimiento de esos sentimientos, eso ni se te cruza por la cabeza porque estás tan concentrada mirando unos ojos que te atrapan, oliendo un perfume que te embriaga, deseando una espalda que necesitás abrazar aunque no te pertenezca, y lo del vencimiento queda velado.

Mel comenzó a ordenar su maleta mientras continuaba con su debate mental en voz alta,  no esperaba que Samy respondiera, muchas veces su amiga tardaba en dar su opinión y la escuchaba desde el cuarto contiguo.

Después de la MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora