Capitulo 1: Jane, Jennifer, Victoria y Carolina.
Jane:
Estaba en casa sola, siempre estaba sola, mi madre trabajaba todos los días hasta tarde y yo me venia sola a casa.
La verdad prefería estar sola, mi madre se vio muy afectada con la muerte de mi padre, al parecer lo habían atacado, camino a casa, pero nadie sabía quien y como. Curioso ¿no?
A mis ocho años lo había perdido, junto con mi madre que andaba como una alma en pena dentro de la casa. Mi madre nunca había sido buena conmigo, o una mujer alegre, por eso, cuando ella llegaba prefería ir a leer a otro lado antes de comenzar una discusión.
Así era todos los días sin mencionar que solía comer muy poco, pues a ella, nada la importaba y hay estaba incluida yo. Como un objeto. Solo eso era para ella.
Hace unos días para mi cumpleaños, mi madre como regalo me dio otro trozó de pan y un poco más de comida.
Ahora estaba sentada, en la cama de mi habitación con un viejo libro que le pertenecía a mi padre.
Hoy mi madre estaba en casa, no era por ella que estaba encerrada en la habitación, sino, por la discusión , si estas eran siempre y, yo con valentía y decisión era la que siempre las comenzaba.
Si yo me enojaba algo explotaba , el cual esta vez fue el vaso de agua de mi madre, haciendo que el agua que había en este cayese sobre mi madre. Las cosas que estaban en los estantes comenzaban a caer o a explotar, siempre era así, cuando estaba enojada o muy triste desde los cinco siempre era así.
Mi cabello era rojizo con las puntas un poco negras, había nacido con el cabello así igual que el de mi madre, era pelirroja, tenía la piel clara, pecas que se esparcían por mis mejillas , ojos azules esmeralda y , labios finos y rojizos.
Era bajita, pero también era considerada “Alta “, para mis once años. Siempre comentaban que había tenido que madurar antes por el tema de mi madre, pero honestamente lo prefería así.
Decidí dejar de leer, ya que había estado en la habitación treinta largos minutos .La verdad poco y nada me importaba lo que dijese mi madre.
Los días felices se habían ido igual que mi cariño, hacia ella. Ya no era mi madre, solo era una desconocida.
Deje el libro en la cama y comencé a salir de la habitación, mi madre estaba con alguien charlando abajo y yo como muy curiosa que era, comencé a escuchar su conversación.
-Estefanía, no puedes ocultárselo, llegara su carta de Hogwarts y ella asistirá quieras o no .- Respondió una voz de hombre mas o menos mayor desde abajo. ¿Qué era Hogwarts? , ¿Ocultarme que?
-No, ella no sabrá nada. No debe .- Grito ella perdiendo los estribos.
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Los y Las Merodeadores (Tercera Generación, Harry Potter)
Fiksi PenggemarLos y Las Merodeadores (Tercera Generación, Harry Potter) No puedes encontrarlo, si el no te encuentra. No puedes abrirlo , si no sabes como. No puedes saber que oculta... Al menos que seas un merodeador La pregunta es... ¿Lo eres? El primer año de...