Capítulo 4: 1 Internado por explorar (Parte 2)

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En el cuadrado vacío estaban Neko y Alfonso. El cuadrado vacío no es más que un área cuadrada donde no se sabe que van a poner.

Neko: Percibo, que este área no fue creada con buenas intenciones.

Lane: ¿A qué te refieres?

Neko: Siento que este lugar no se usará para cosas positivas. No sabría decirte exactamente, pero estoy segura de que es así.

Andrés: ¿Tienes algún tipo de habilidad para detectar esas cosas?

Neko: Si, heredé de mi abuela el poder hablar con espíritus. Es una habilidad horrible, aunque depende de cómo la utilices. De hecho, cuando mi abuela, Kimura, murió. Hablaba con ella cuando estábamos a solas.

Lane: Eso suena raro y bonito a la vez.

Andrés: Entonces, ¿Tienes dos habilidades?

Neko: Efectivamente, "Super Esper" y "Super Hacker".

Andrés: Si ser Esper vino de herencia, ¿Cómo te convertiste en hacker?

Neko: Ah bueno, desde pequeña se me dieron muy bien los ordenadores. Poco a poco fui aprendiendo nuevas cosas. Empecé robando contraseñas en Facebook, y acabé entrando en el ordenador del presidente de Korea. No fue fácil, pero lo conseguí.

Andrés: Si hiciste tal cosa, ¿Qué no eres capaz de hacer?

Neko: Ahora estoy viendo si hay alguna manera de hackear las tablets que nos han dado, pero no se lo digáis a nadie.

Lane: ¡Eso es geniaal! Puede que alguno de nosotros tenga algo que esconder. Cuando entraste en su ordenador, ¿Que viste?

Neko: Lo siento, descubrieron que un hacker entró en su ordenador. Me obligaron a firmar un contrato, si decía algo de lo que vi me matarían. Aún así tengo pensado contarlo todo en mi lecho de muerte.

Lane: Eso es muy interesante.

Alfonso estaba sentado en un banco al fondo. No parecía que quisiera compañía, de todas formas, iré a hablar con el por si acaso.

Andrés: Pareces triste, ¿Te ocurre algo?

Alfonso: No es nada... Nada que no haya sufrido algunos de los que estamos aquí.

Andrés: ¿A qué te refieres?

Alfonso: Yo vivo en pueblo Aceño, ¿Te suena?

Andrés: No...

Lane: ¡A mi si! Es ese pueblo que está al norte que no han avanzado mucho desde  1500, 1600...

Alfonso: Vengo de allí. Yo y mi padre nos llevábamos muy bien. El siempre me llevaba a pescar, al bar... Me encantaba pasar rato con el. El día que llegó mi madre llorando de hacer la compra, se sentó a mi lado y me dijo: Alfonso, padre ha muerto.

Andrés: Pobrecito...

Alfonso: Perdonad que os lo cuente tan repentinamente, pero necesito desahogarme. En el momento en el que me lo dijo juré vengarle, y no paré hasta que le encontré y le maté.

Lane: Y por eso te metieron aquí.

Alfonso: Si. Pero lo extraño de todo, es que a la persona que maté, no le condenaron a nada. Vengo a mi padre y yo, un menor, debe pasar 1 año en una cárcel de menores.

Andrés: Tienes razón, hay muchas incongruencias.

Salimos del cuadrado vacío, en el jardín se encontraba Nerea. Que estaba mirando el agua pasar.

El Internado V1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora