Capítulo 5: Los del Ocaso

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Luna: Pero ¿Estás segura de lo que quieres hacer? Cómo se enteren los del juzgado, puede que sea la última cosa que hagas.

María: No te preocupes, somos marqueses, ¿Qué nos va a pasar?

Profesor: Hija, de verdad no lo hagas.

María: ¡Quiero hacerlo! Es mi última voluntad, y ya tengo escogidos a los estudiantes.

Estrella: ¿No te da pena que vayan a morir tantas personas solo por tu capricho?

María: Ni que fuera la primera vez que ocurre algo así en Amora. Además, la mayoría son criminales. Casi estoy haciendo un favor matándolos.

Luna: María... No te reconozco ¿Cómo te has vuelto así?

María: Quien sabe, puede que la enfermedad sea lo mejor que me ha pasado en años. No sabéis las ganas de que todo comience ¡OJOJOJOJOJOJO!

Me empecé a reír con mi risa característica. Me siento genial cuando lo hago. Salí del salón y me dirigí a mi habitación, tenía que revisar una vez más el elenco de 15 personajes que elegí para mi historia.

Todos ellos habían cometido un crimen, más o menos grave pero lo habían hecho. Así conseguiría que entraran casi a voluntad propia. Aunque estoy pensando en meter un estudiante más, odio los números impares.

El decimosexto se llama Roy, su habilidad es "Super Políglota". Su madre ejerce de prostituta y no conoce a su padre. Vive con sus abuelos. Sería una pena que le pasara algo a sus abuelos ¿Verdad? ¡OJOJOJOJOJOJOJOJOJO!

No es demasiado difícil seleccionar a los estudiantes. Teniendo en cuenta que puedo entrar en el censo nacional gracias a mi título.

Mi madre, Estrella, es la Marquesa del Ocaso. Un título nobiliario con mucho prestigio, aunque los marqueses estén en lo más bajo, todo Amora ama a mi madre.

Yo María del Ocaso, soy la futura heredera del título, ya que soy la mayor de dos hermanas.

Mi hermana pequeña se llama Luna, siempre es muy atenta y se preocupa por mi. Siempre hemos jugado juntas desde pequeña, y es a la primera a la que le conté mi plan.

Lego está mi padre, ese carcamal que no tiene ningún título. No entiendo cómo mi madre se pudo casar con el. Aunque sino, yo no estaría aquí. Pero me da igual, no se merece estar en mi casa.

Por último, está mi mayordomo, es un gran experto en mecánica y le he propuesto que me ayude en una cosa. Me hará falta un robot dentro del Internado.

El Internado V1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora