Infinita soledad

Capítulo 2: No estas en condiciones

Abrí los ojos poco a poco adaptándome a la luz del lugar, me sentía un poco mareada y desconcertada, me incorporé en él sofá y examiné el lugar; no lo conocía, rápidamente los sucesos de hace unos momentos pasaron por mis ojos .

Había algo raro en todo eso, ya estaba vestida y no recordaba haberme vertido, inmediatamente me puse roja al pensar en lo que había pasado mientras estaba incosciente.

Este chico me  habia vestido !!Dios, me habia visto desnuda!!

Rápidamente alejé esos pensamientos aun sintiendo mi cara arder. Me dí cuenta de que estaba vestida con unos  pantalones vaqueros y una blusa rojo vino, suspiré ondo cerrando los ojos, por lo menos tenia buen gusto.

-veo que ya despertaste- abrí los ojos por el susto y lo miré

Me ofreció una taza de té y lo cogí encantada, tomé un sorbo del caliente liquido y cerré los ojos disfrutando del sabor y la sensación que me producía.

- me vestiste- le dije sintiendo mi cara volver a arder

- si -se encogió de hombros- te veías cansada e incomoda con la toalla, lo siento- se disculpó y lo acepté.

- ¿como te sientes?- preguntó- por cierto me llamo Chris

- bien gracias, mi nombre es Ana- dije volviendo a beber de la taza

El silencio inundó el lugar durante un tiempo, sentí su penetrante mirada mientras terminaba de tomar el té. Dejé  la taza en la mesa que tenia delante, cogí mi teléfono y mire la hora, 10:25 am.

¡Joder!

- se me a hecho tarte yo....- intenté levantarme pero tambaleé al borde de caerme si no fuera por los brazos del chico que me agararron fuertemente.

- debes descansar- dijo volviendo a recostarme en él sofá

- no yo.....tengo que trabaj....- me interrumpió

- Oye- me subió él mentón para que lo mirara- por favor tu no estas en condiciones de trabajar, necesito que descanses ¿si?- la confianza y tranquilidad con la que me hablaba me descontó y me alejé un poco de él.

- esta bien- desistí

- mientras descansas podrías avisar que no podrás ir a trabajar, ya yo más tarde te llevaré a casa- dijo recogiendo la mesa llevando los trastes a la cocina

Cogí mi teléfono y marqué a la empresa.

- hola Ana ¿que se te ofrece?- contestó la recepcionista

- hola Marilyn solo quería pedirte que avises a Joseph que no iré hoy a trabajar

- ¿pasa algo?- preguntó dejando notar la preocupación en su voz

- no nada solo me dio un ataque y me siento sin fuerzas pero nada importante- dije tranquilizandola

- bueno vale recuperate y tranquila le avisare a Roguer Chao- se despidió

- Gracias, hasta luego - colgué soltando un suspiro

- bueno- dijo chris sentándose delante de mi- podemos conocernos si tu quieres- asentí- bien, hablame de ti.

***

- Es aquí - dije viendo él piso alto que se encontraba delante de mi

Chris aparcó al lado de la acera y apagó el motor, hubo un momento de silencio en el que solo se escuchaban nuestras respiraciones.

- muchas gracias- hablé mirando mis manos y jugando con mis dedos nerviosa

No se porque pero después de lo que me dijo cuando hablamos me sentí rara, sus palabras fueron firmes y claras.

- no pasa nada Ana- dijo dándose la vuelta para mirame

Subí la cabeza para mirarlo y me asusté al tenerlo cerca de mi, con sus manos agarró mis mejillas y beso mi frente aciendome cerrar los ojos ante su contacto.

Alivio

Eso es lo que sentí, sentí alivio y seguridad porque desde ese me momento sentía que tenia alguien a mi lado pero ese sentimiento se fue al mismo tiempo que su tacto.

- adios- me despedí y bajé del coche

Cuando él coche se perdió por las calles decidí entrar, cogí él ascensor y al estar en mi planta abrí la puerta de mi casa.

Seré la puerta tras de mi soltando un suspiro apollando mi cabeza en la puerta sumida en un silencio y oscuridad profunda.
Me sentía confundida por todo lo que había pasado hoy con ese desconocido que ahora se podría decir que era un conocido.

- hola Ana- solté un gritillo encendiendo la lámpara que estaba a mi lado.

- joder Esteban me asustaste- dije agarrándome él pecho por el susto

- lo siento- dijo acercándose a mi agarrándome de la cintura- veo que has cambiado de estilo- dijo con voz picara mirandome de arriba abajo

Me puse roja y le susurré un gracias porque no creo que sonreír sea la mejor opción ahora ni nunca.

- porque has tardado tanto- me reprochó besándome

  Esteban es mi mejor amigo y.......somos novios por así decirlo porque es en secreto. Aparte de que él fue mi primera vez siempre lo quise como algo más que un amigo pero él problema era que cuando yo tenia 19 y él 20 empezamos  esto y Elizabeth se enteró y claro, no le gusto nada así que la prometimos nunca estar juntos pero era mentira, nunca lo dejamos y ahora tengo 23 y él 24 y todo esto es a escondidas de mi mejor amiga, se que esto no esta bien pero yo lo quiero.

Chicos, preferí que el capítulo fuera corto porque no tenia mucha inspiracion.