Capitulo 2

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Más tarde, esa misma noche, cuando no conseguía dormirse, recordó que estaba en Nueva York cuando recibió la llamada de su tía Ji Hyun

-Jihoon... Jihoon... ¿Estás ahí? ¿O es esa máquina horrible? Por el tono agitado de su tía enseguida supo que había problemas. Además, su madre de acogida casi nunca llamaba para charlar sin más.

-Sí, estoy aquí -había contestado -. ¿Qué ocurre?

-Es E'dawn. Oh, cielos,Jihoon -dijo de manera atolondrada-. Mi pobre niño. Se ha tomado una sobredosis de pastillas para dormir... Ha intentado matarse.

Jihoon la escuchó horrorizada. E'dawn podía ser un poco raro a veces, pero ¿llevar a cabo un intento de suicidio? Eso era increíble.

-Pero ¿por qué iba a hacer tal cosa? En sus cartas siempre parecía contento.

-Pues ahora no lo está. Ya no -la tía Ji Hyun lloraba sin parar-. Quizá no vuelva a estarlo nunca más. Porque él ha terminado la relación. Ese hombre, el bruto con el que iba a casarse. La boda se ha anulado y mi hijo ha tenido un ataque de nervios tan fuerte que lo han llevado a una especie de casa de retiro y no permiten que vayamos a verlo. Ni siquiera yo. Jihoon, estoy muy nerviosa. Necesito que vengas. No puedo estar sola en un momento como este. Puede que yo también me derrumbe.

-No te preocupes, tía. Iré en el primer vuelo disponible.

-Nadie sabía lo de la boda, excepto nosotros. Todo iba a ser secreto, así que no puedes comentar nada a nadie, te imaginas el escándalo en nuestra familia. Había dicho su tia Ji Hyun

-¿Secreto? -preguntó Jihoon asombrado-. ¿Y por qué?

-Porque así era como ellos querían. Sin escándalos -comenzó a llorar de nuevo-. ¿Quién iba a imaginar que terminaría así?

«Desde luego», pensó Jihoon, mientras colgaba el auricular. Y ¿por qué diablos el director de la empresa de publicidad Cho Organisation quería que su matrimonio fuera secreto? A menos, que nunca fuera a celebrarse... Y ese era otro secreto que él se había guardado para sí.

¿Cómo podía haber salido todo tan mal? ¿Y tan deprisa? La última carta de E'dawn contándole los actos de generosidad que había tenido con él su futuro marido y lo cariñoso que era, le había llegado hacía poco más de una semana, indicando que su vida sería un camino de rosas.

Reservó el vuelo, dejó un mensaje en el contestador automático de Samuel proponiéndole que quedaran en su bar favorito cuando saliera del trabajo y se acercó a su escritorio.

Abrió un cajón y sacó las cartas de E'dawn. Había muchas, y en ellas le contaba con todo detalle las citas que había tenido con Ong Seongwoo, desde la primera, en la típica situación de jefe y empleado, hasta la que probablemente había sido la última.

Jihoon se preparó una taza de té, se sentó en su butaca de cuero favorita y comenzó a leer en voz alta:

-«Tengo un trabajo fantástico y un jefe estupendo. Su asistente está de baja por maternidad así que, con suerte, me quedo hasta que se le termine. Y después, ¿quién sabe?»

En la siguiente carta, E'dawn le contaba que su jefe le había pedido que se quedara a trabajar durante la hora de la comida y que había encargado una bandeja de sándwiches que había compartido con él.

-«Me ha hecho un montón de preguntas acerca de mis intereses, mis ambiciones... Es muy fácil hablar con él. Y sonríe con la mirada» -continuó leyendo Jihoon.

Durante la semana siguiente, el héroe de E'dawn había dejado de ser el señor Ong para convertirse en Seongwoo.

-«Seongwoo me ha llevado a tomar una copa después del trabajo a una vinoteca estupenda. El local estaba lleno de famosos y me presentó a todos. No me lo podía creer».

Dulce Venganza -OngWink [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora