Cita

1.3K 113 32
                                    

-¡Es por tu propio bien!

-¡Lily no! ¡por favor! -Le arranque los aretes, con eso su transformación se desvaneció

-Los tengo Papillon -Mire a Marinette a los ojos, estaba llorando, basta ¿por que haces esto?

La deje ahí, en el suelo, con sus ojos llenos de miedo y tristeza. Quería ir a abrazarla, recogerla, detenerme, pero mi cuerpo se mueve solo, no puedo controlarlo, soy Volpina. ¡Basta!, date la vuelta, ¿por que no puedo?

Me senté de golpe en la cama con la respiración agitada. Me toque la frente y me mire las manos, el traje no esta ahí. Solo fue un sueño, que alivio. Estoy en mi cuarto a obscuras, aun no sale el sol.

Aun me preocupa el hecho de que Volpina vuelva a aparecer, no puedo controlarla, no puedo recordar nada cuando soy ella. Es como que el miedo, el odio, las emociones negativas se apoderaran de mi. No quiero pasar por eso otra vez, por mi bien y por el de ella.

Bueno, ya que estoy despierta supongo que no tiene sentido volver a dormir. Revise mi teléfono, son 5 y media de la mañana. Luego me llamo la atención que tenia un mensaje de Marinette.

"¡Que duermas bien!, je t'aime <3"

Sonreí al leerlo y me levante de mi cama finalmente, ya más tranquila después de esa horrible pesadilla. Hoy es el gran día así que será mejor prepararme.

Ayer compre algunos aperitivos para esta noche, claro, con la tarjeta. Pero creo que después del incidente con Volpina mis padres no se van a molestar por un gasto extra... o dos.

También compre algunas cosas para cocinar, quería hacerle algunas recetas italianas a Mari con mis propias manos, ya que ella siempre me da de sus dulces, macarrones y pasteles, ¡así que es mi turno!. Solo espero que le guste el zuccotto y la ensalada toscana.

-Te vez feliz hoy Lila, ¿que paso? -Me pregunto Alya- ¿Ganaste la lotería?

-Es un secreto -Le saque la lengua feliz

-Oh vamos, ¡somos amigas!

-Lo siento Alya, ¡pero no te puedo contar aun! -Dije sobreactuando dramáticamente

-¿Es sobre Marinette? -Me dijo sonriendo sospechosamente

-¿Que? ¿por que tendría que ver con ella? -Fingí inocencia, Me tiene atrapada, ¡ayuda, ayuda!

-Siento que hay algo que no me están contando ustedes dos, han estado actuando algo raro -Si, supongo que no es buena idea arrastrarla al baño cada vez que me urge amor

-Bueno, ¿que crees que pueda ser? -Quizás su loca imaginación me ayude a crearle una mentira

-Tal vez... no se -Se puso la mano en el mentón y cerro los ojos- Quizás... ¡Oh ya se!, ¡me están preparando una sorpresa!

-Bueno, si fuera el caso ¿no estarías arruinando tu sorpresa Alya? -Le sonreí juguetonamente y ella se exalto. Bingo, aunque pensándolo, cuando se entere si que va a estar sorprendida.

-¡Tienes razón! Lo siento, no volveré a preguntar

-¿De que hablan chicas? -Llego Marinette

-Nada, nada, cosas sin relevancia -Trato de evitar Alya y yo solo me quede sonriendo mientras miraba a Marinette estaba notablemente confundida, supongo que va a querer que le explique luego

Hicimos nuestra rutina de ir a dejar a Mari a la puerta de su casa antes de separarnos en el camino.

-Bueno chicas, ¡nos vemos mañana! -Se fue caminando y se despidió agitando su mano

Una italiana en ParísDonde viven las historias. Descúbrelo ahora