Eternal moments

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- No es mi culpa que tengas complejo de inferioridad, madura porfavor.

- Mira Donghyuck, personas como tu nacieron para desgraciar la vida de otros. ¡Todo es tu culpa! ¡Niño demonio!

Aquí viene de nuevo...
Esto es normal, pero porque, ¿Por qué tan temprano?.

- Vale, ya me voy, deja de ser tan escandalosa y molesta.

El menor salió terminando de ponerse su sudadera favorita, con sus audífonos de cable blancos, puso música y empezó a caminar despreocupadamente, con la mirada seria y perdida. Últimamente, las peleas con su hermana habían incrementado amenazando que podrían ser peores. Maiko estaba en exámenes y ordenaba al menor a hacer algunas cosas, pero por más bien que las hiciera, para ella estaba mal, se estaba sintiendo más inútil que de costumbre.

Niño demonio, eso nada más podía decir de el. Pero ya no le importaba, por que ella no era Renjun. El chico quería llorar, pero los demonios como el, no lloraban. Fue por el a las 4:57 pm, Haechan no tocaba la puerta, el subía hasta la habitación del mayor.
 Y justo hizo aquello, pasó una pequeña llave y abrió sin problemas la puerta de madera principal, reviso que no estén los tutores de Ren, caminó por el largo pasadizo dónde habían cuadros vacíos y luego adentrándose al último cuarto encontrando al muchacho en bermudas, buscando ropa de su armario y dejando caer gotas al piso con el cabello mojado.

- Que linda vista, ¿Quieres ayuda?

- ¿Acaso quieres ver más?

Renjun rió y abrió la ventana para que el viento corra un poco, el menor entró y rápidamente abrazó su piel desnuda. El mayor correspondió, sabía el porque, el agarre de Haechan era fuerte.

Su Renjun, su mundo y familia lo entendía y sabía que cada abrazo era un "te necesito". Haechan era difícil de entender pero su Renjun, entendía perfectamente que pasaba. Era el único que lo valoraba y le daba esas ganas de vivir que ni su padre o hermana pudieron darle, nadie, sólo el.

Por eso era egoísta, lo amaba tanto que si alguien lo tocaba o alguien lo hacia sufrir el simplemente metía las manos al fuego y más que nada los celos que le eran imposibles esconder, era conciente de que lo que sentía era real. Haechan sabía que Renjun llevaba tiempo hablando con otro chico quien al parecer podría ser su familia o algo parecido, y le molestaba, por que el sólo tenía un poco de tiempo de el.

- Hyung, quiero hacerte feliz.

- Si, ya lo haces.

El mayor habló mientras se sentaba junto a el, tenía el rostro limpio y suave, su ropa lo hacia ver pequeño y para Haechan, era gracioso, más porque el era el mayor. Tomó su mano izquierda y la revisó, ya empezaba a empeorar.

Moretones, rasguños, y una marca, una marca que no era hecha por el mismo.

- ¿De nuevo intentó aprovecharse de ti?.

- Esta vez escapé de casa.

- ¡¿A dónde fuiste?!.

- A un hotel cercano.

Mientes.

Claroooooo, aahora tienes dinero para un hotel - Haechan se volteó con enojo.

- Vale, en realidad estuve en casa de mi amigo.

Haechan apretó el puño con cuidado y suspiró riendo, se giró ahora quedando frente a frente y lo abrazó con fuerza. Besó su frente y entrelazaba los dedos de ambas manos. Temblando, si, porque el temía que algún día Renjun se olvidará de el por que es un demonio.

Pero Renjun no era así, porque ellos se amaban.

Error.

Se aman.

- ¿Tu me amas no?

- Si.

- Entonces deja de ir con otro chico, cuando puedes estar conmigo, mi casa está literalmente a cuatro pasos.

- Es que, Maiko está en exámenes, y no me ve con los mejores ojos del mundo.

Haechan rodó los ojos y estiró sus mejillas mientras besaba una. Renjun sonrió y le jaló la nariz como venganza. Se echaron en la cómoda cama y haechan lo abrazó acurrucando su cabeza en su pequeño y frágil pecho. Las respiración de Renjun era tranquila y cálida.

Donghyuck lo miró nuevamente, tenía miedo, no sabía porque sentía que los momentos se estaban volviendo menos duraderos que antes.

- No es eso, siempre se que cuento contigo.

- ¿Qué?

- Te amo y cállate Lee.

Yo también te amo.

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Cortico, pero bueno equis somos chavos.

BORN | MARKHYUCK ®✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora