BORN | MARKHYUCK ®✓

Born to break rules

-Haechan...

Mark empujaba leve al menor mientras le susurraba por encima de su oreja derecha, el moreno se retorció al sentir el airesito caliente y se giró a verlo aún medio dormido, se sentó arreglando los cablecitos que colgaban de sus brazos y le sonrió con los ojos chinos.

Mark repitió la acción mientras le arreglaba el cabello desordenado, se sentó frente a el y le extendió dos cartas (de Jeno y Lucas) quienes no podían dejar el trabajo por temporada de turistas.

-¿Y mi papá?

-Rentaron un cuarto al lado del nuestro, vamos a quedarnos hasta que te trasladen.

-¿Irnos?... No, tu te quedas.

-Tu no decides eso, además, tu padre conoce al mío y decidieron que también debo regresar.

-¿No... te pasará nada?

Mark hizo una pausa y sonrió de lado.

-No me pasará nada.

-Promételo.

El rubio asintió y cruzó los dedos sin que Haechan lo note, y con la otra mano prometió. Tomaron sus manos y se quedaron un buen rato leyendo los saludos del peliverde y el moreno alto que decía que esperaba su carta de agradecimiento por juntarlos.

Mark se lanzó al lado izquierdo de Haechan y se acomodó frente a frente con este.

-Estar aquí es aburrido.

-Sí bueno, estar acostado todo el día y comer plástico es realmente aburrido.- Mark hizo una mueca- y no te cuento el lío de ir al baño.

-Me imagino.-habla entre risas.

-Debo llamar a la enfermera y ella debe llevarme.

-¿Ella va contigo al baño? - alzó una ceja.

-Si, hasta la puerta, claro está que puedo sentarme en el inodoro solo.

Mark rodó los ojos e hizo un puchero.

-Ni que no pudieras caminar, debería ser enfermero.

Ambos rieron y empezaron a jugar con sus manos mientras la enfermera entraba a dejar mantas y almohadas, limpiaba el lugar y le extendía los medicamentos al moreno. Se quedó observándolos y se sentó frente a ellos sorprendiéndolos, los invitó a sentarse.

-Soy amiga de Lucas.

-Que miedo.-habló el moreno causando una risa en la chica- No me malinterpretes pero es que Lucas siempre es un ser sorprendente que nunca sabes que hará.

-Bueno, no es que no lo amemos, porque siempre sus orates planes son geniales.- agrega Mark.

-Si bueno, de eso les quería hablar.

La mujer les extendió dos sobres color salmón y estos lo tomaron ansiosos, era para ellos una escena de pelicula de terror, hablaban de lucas, y lucas es lucas.

-¿Cita?

-Hay un comedor privado en construcción que está libre de todo esta noche y oh! Usted pidió quedarse esta noche con el paciente.

-Siento que amo a Lucas.-susurra Haechan leyendo la invitación.

-Y hace minutos...- haechan le pegó con el codo- perdón, bipolar.

-Bipolar tu abuela.

-Hey! Con mi santa abuela no te metas!.

La chica rió y les abrió la puerta, ambos le sonrieron y se levantaron.

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-No me gustan los frijoles.

-No me gustan las arvejas.

-Y a mi no me gusta andar de violín, coman y crezcan.

Lucas rodó los ojos dejándoles la comida y se marchó chistando bajo, para el la combianción de biffe con frijoles y ensalada con arvejas es la perfecta. ¿Duele tanto comer frijoles?

-Lucas te odio.

-y ahora lo odias.- Mark separaba las arvejas del plato.- aunque debo admitir, que odio este plato.

-Me como la carne.

-Sonó raro lee.

-Error, tu mente escucha cosas sucias.

-Creo que es el vino.

-o los frijoles.

-Hae, los frijoles no hacen nada... solo alimentarte.

Haechan hizo una mueca de asco y dió otro mordisco a su carne y tomó el vino como si de agua se tratara.

-Diablos! Más despacio Hae, te pue-

-Eso diría de ti.

Mark tomó color.

-Aunque, quiero otro beso, así que toma sin cuidado.

-¿Te besé?

Haechan se atoró con el vino con su rostro todo enrojecido por lo dicho, según el no iba a mencionarselo. Sería un secreto, o bueno, lo era.

-Bueno...

-Haechan.

-Digamos que iba a chantajearte.

-¿Saben? Es aburrido no ver acción.-Lucas se recostó en una repisa sucia de la cocina.- ¿Y si se largan por ahí a buscar ratones?.- habló amable y delicadamente.

-¿Y qué más quieres que hagamos en la mesa a parte de comer?.

-Uff, muchas cosas!.-Mark enrojeció sus mejillas y orejas, mientras que Haechan solo lo miraba tranquilo.- ¿Qué pasa Hae?

-¿Para que hacerlo aquí si hay muchas camas en el hospital?

-¡Haechan!- susurró aún avergonzado.

-¡¿Qué?!, No pensarás en tener sexo en un lugar tan incómodo, ¿O sí?.- Mark bajó la cabeza.

-Hablas como todo un experto..

-Uuuuh.- Lucas sonrió pícaro.

-Tengo muchas amigas que me contaban experiencias locas, pensaban que me animaría a probarlas, pero les dije que era gay y se les pasó.

-Que rara forma de aprender de sexo, bueno, debo irme... usen condón.

Ambos rieron y se levantaron mientras llevaban una de las botellas de la mesa, caminaron agradeciendo a la gente que limpiaba, fueron al patio del hospital y se quedaron hablando con tranquilidad.

Unieron sus labios con sabor a uva muchas veces seguidas.

Cruzaron las miradas miles de veces.

Y se unieron por primera vez, como muestra de que si existe el hilo rojo del destino.

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