Capítulo 10

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Dos meses después...

─ Eso fue todo.

Nos miramos las caras como si fuéramos completas desconocidas, cada una intenta evadir lo evidente, les confesé porque según ellas tenía una actitud sospechosa cual ladrón.

Ahora estamos en mi habitación, sentadas en mi cama mientras yo relato lo que pasó hace dos meses. No les dije nada, porque la rebelde que crece en mi pensó que harían un drama de todo, pero recordé que somos amigas y estamos para apoyarnos siempre sin importar por cuán grande sea el problema, aunque yo piense que seré juzgada como la peor.

Ambas se quedaron analizando mis palabras, la comunicación entre ellas era a través de la mirada, Zoe le hacía señas con los ojos a Amanda para que intente decirme algo. Mientras a mi me sudaban las manos sin saber el maldito por qué.

Aunque también hay algo que me preocupa, y no sé cómo decirles.

Amanda dio un resignado suspiro, colocó un mechón rubio de cabello detrás de su oreja y me dio una acusadora mirada.

¡Es peor que mi madre!

─ ¿Sientes algo por él?

¿Sentir algo por él? No me puse a meditar nunca esa pregunta.

La sinceridad con la que respondería sería que sí, siento una atracción hacia él, solo eso. No sé cómo es sentir ese escalofrío o mariposas en el estómago cada vez que lo ves o con solo escuchar su voz. Mentiría si digo que siento algo especial por él, porque no es así.

En estos últimos dos meses, mis encuentros con Ian fueron más seguidos de lo que esperaba, había esa química que me gustaba cuando estaba en la cama con él. Ian es un chico encantador, nunca pensé que fuera atento conmigo o que me tratara como si yo valiera la pena. No es como los otros con los que he estado ya que cuando acababa todo yo los echaba o ellos a mí. Mi faceta de enamoramiento nunca me duró, solo tuve dos enamorados y con uno de ellos dure una semana. Que record el mío.

Con Ian solo tuve una salida, nada serio, porque me pidió que lo acompañara al dentista para que se sacara una muela. Que romántico.

Sigo perdida en mi mundo de pensamientos hasta que una mano se posa enfrente de mi cara para que reaccione de mi ensoñación.

─ Hey, responde─ la voz de Amanda hace que vuelva a mi triste realidad, ella tiene el ceño fruncido y se cruza de manos demostrando la molestia al no responderle.

Ni siquiera yo se que decir al estar pensado en Ian.

Suelto un bufido ante la atenta mirada de Amanda y Zoe. Me preparo para hablar.

─ Si─ con mi respuesta ellas empezaron a saltar como locas en mi cama, desordenando y arrugando más las sábanas, pareciera que se hubieran ganado la lotería, mi ceño se frunce ante esa escena y creo que es mejor aclarar.─ No es lo que ustedes creen, el sentir se basa en varias cosas no solo en la parte romántica como ustedes piensan, y antes de que ataquen voy a cerciorarles algo. No lo amo, esa es una palabra corta pero demasiado importante, y tampoco lo odio, es imposible hacerlo con él.

Esto último lo digo en un susurro audible, ambas me miran como si fuera un cachorrito abandonado en plena lluvia, que sentimentales por Dios.

Estoy segura en lo que dije, para poder sentir un tipo de cariño primero tienes que conocer cómo es esa persona, los sentimientos son algo preciado que tenemos y dárselos a una persona con la cual no frecuentas mucho es riesgoso.

Mala CombinaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora