Amor Prohibido[KaiSoo]

Capitulo 3

    Quiero irme de aquí

Pero, cómo lo hago, si me salgo de aquí ya no puedo volver a mi casa, mi madre me quitara el apellido y me quedare en la calle, ¿amigos? No tengo, todos me odiaban por ser el mas listo de la clase, por ello me gane la indiferencia de todos, no basta con ser lindo, ni mucho nada, soy tímido, pero hay momentos en los que parezco ser otra persona, como ahora, estaba fingiendo ser otra persona, un chico que se casara con un hombre que fácilmente podría ser su padre, que bonito no, preferiría casarme con su hijo, está mas guapo y además se ve de mi edad, pero me odia, otro mas para la lista, ya perdí la cuenta.

- Joven KyungSoo- Dijo Rosa entrando a mi habitación por la mañana.
- Buenos días- me levante en mi cama refregándome los ojos- ¿Qué paso Rosa?- ella se quedo parada en medio de la habitación.
- El Señor ya se fue a trabajar, me dejo encargado despertarle, y que bajara a tomar desayuno-
- ¡Oh!... Gracias-
Me senté sobre la cama mire a mi alrededor, y di un gran suspiro. Fui a tomar una ducha.

-Necesito herederos- dijo el señor en cuanto estábamos en la mesa almorzando, En qué había pasado toda la mañana. 
Rosa me había ayudado a arreglar toda mi ropa y algunas cosas. No volví a ver a el chico, JongIn, quién sabe donde se habrá metido. Mientras que ordenábamos el armario con Rosa, ella me contó de donde era, venia de una humilde familia del sur del continente Americano. Me emociono escuchar que no tenía padres por ello una familia coreana la adopto y la trajo aquí, la maltrataban, por ellos huyo de su lado, y comenzó a trabajar de empleada domestica, nunca tuvo hijos y deseaba haberlos tenido, pero las circunstancias de la vida no se lo permitieron. Estaba colgando uno de los lujosos trajes que me había comprado mi madre, cuando Rosa me hizo una pregunta.
- Pero, ¿Qué es lo que haces aquí? -
- Quiero estudiar y si no me caso con el Señor quedare en la calle, sin familia, sin nadie, entiendes lo difícil de mi situación, quiero estudiar Rosa, quiero ser alguien en esta vida y no podre lograrlo solo, necesito la ayuda de ese hombre-
- Es difícil la vida te lo puedo decir yo, pero si necesitas algo cualquier cosa, aquí me tienes-
-Muchas gracias Rosa... Muchas gracias.-

- De nada pequeño- me dio un abrazo, un cálido abrazo, una muestra pequeña de afecto que mi madre jamas me había dado.