"Idiota, idiota, idiota"
Corría en dirección a su casa después de haber presenciado aquella escena entre Todoroki y Bakugo. Le era difícil, ya que su vista era nublada por las lágrimas que se acumulaban en sus ojos en un casi inútil intento de no dejarlas salir, además de que su nariz comenzaba a taparse haciéndole dificultoso respirar.
Entró directo a su cuarto y se tiró boca abajo sobre su cama. Había decidido ir a aclarar las cosas con el chico explosivo, del por qué se la pasaba ignorándolo últimamente, pero obviamente eso no sucedió.
-Todoroki-kun estaba tan cerca de Kaachan y él... - "él no parecía inmutarse, hasta le estaba tomando del pecho, como si quisiera acercarlo más". Se atormentó con ese tipo de pensamientos quién sabe cuánto tiempo hasta que se quedó dormido, cansado de tanto llorar.
-Izuku, Izuku, la comida está lista - la voz de su mamá le despertó, se sentía pesado, le ardían los ojos demasiado.
-¡Bajo en un momento mamá! - trató de sonar alegre. Se dirigió al baño para lavarse la cara. Se veía terrible. Mientras se observaba comenzaba a pensar de nuevo en lo sucedido. "¿Por qué se encontraban así?, ¿Por qué me afectó tanto, si Kacchan y yo no tenemos ningún tipo de relación?
Pasó el día encerrado en su cuarto tratando de hacer los deberes, sólo saliendo para la comida y la cena. Ese día no tenía ganas de entrenar.
En todas esas horas, había descubierto algo y también había tomado una decisión.
"Me gusta Kacchan, me gusta demasiado. Si Todoroki-kun siente lo mismo que yo, no me quedaré atrás, no le dejaré a Kacchan"
No estaba seguro de cómo haría eso, pero no podía volver a huir como esa tarde si volvía a presenciar otra escena similar.
Se conocían desde niños, compartieron muchas aventuras juntos, han tenido demasiados problemas por años, pero por una u otra razón siempre terminan en el mismo lugar, para seguir compartiendo momentos, buenos o malos, no importaba. Ellos dos tenían una historia, no permitiría que alguien que apenas le conoce, llegue y le quite lo que es... - Espera - abrió los ojos, se encontraba acostado en su cama boca arriba mientras pensaba en todo eso...pero se había asustado por lo que estaba a punto de pasar por su mente. - Tranquilízate Izuku, Kacchan no es una cosa, no le pertenece a nadie. - se acomodó para dormir, al día siguiente sí que entrenaría e idearía una forma de hacerle llegar sus sentimientos al rubio cenizo.
Y así llegó el lunes y sentía que iba a tener un infarto por todos nervios que lo invadían. No sabía si podía hacer algo tan atrevido como el de doble quirk, pero se esforzaría.
Dado que se sentaba detrás del más alto a éste le tocaba pasarle la información que les daba el profesor, por lo que aprovechando que estaban repartiendo unas hojas de ejercicios, rozó sus dedos con los de Bakugo, pero claro, tenía que hacerse presente su torpeza, ya que en vez de ser eso, "un roce", le clavó las uñas provocando la ira del ojirubí.
Primer intento fallido.
Suspiró mientras era el tiempo libre entre clase, pronto sus dos amigos Iida e Uraraka se acercaron para platicar con él.
-Deku-kun, ¿crees que podamos reunirnos para resolver estos ejercicios? - decía amable la chica castaña. -¿te parece bien hoy saliendo? Iríamos a la biblioteca.
-¿Hoy? - sonrió nervioso llevando una de sus manos a su nuca - Eh, lo siento chicos tengo cosas pendientes, ya saben, entrenamiento y luego ... - fue interrumpido por Iida.
-No tienes que poner excusas si no quieres ir con nosotros - se sintió mal por ser descubierto, sinceramente quería ahora si encarar a Kacchan por lo que no era opción aceptar esa amable oferta - pero no te apures, entendemos.
-Chicos - todos sonrieron, realmente había encontrado muy buenos amigos, se sentía realmente feliz.
-¿Podrían callarse maldita sea? Me dan asco con sus cursilerías - vio como el más alto los regresaba a ver con furia, a todos excepto a él. Pero en vez de sentirse triste, se sintió motivado a seguir con su plan.
-Kaachan ... - apenas pudo pronunciar aquello cuando el profesor entró y comenzó la clase.
Durante aquellas horas notó la mirada del heterocromático sobre él y sobre el rubio. No sabía que había pasado entre ellos cuando salió corriendo aquél día, pero eso no importaba, o eso trataba de hacerse creer.
Su segundo intento también falló. Se llevó a cabo en la cafetería, donde se apuró a comer su almuerzo y al dirigirse a la mesa donde se encontraba el ojirubí con Kirishima (lo que le hizo recordar que aquél chico también le hacía sentir celos) no tuvo cuidado al caminar, pisando una de sus agujetas que se encontraban desamarradas, chocando con un par de compañeros de otros cursos y cayendo al suelo, llevándose consigo un bote de basura. Obviamente todos lo que apreciaron la escena se burlaron de él.
"¿Por qué todo es tan complicado?"
Le quedaba una oportunidad a la salida. No la desaprovecharía, trataría de controlarse para no arruinar nada con su torpeza.
Justo tocaron el timbre, muchos de sus compañeros salieron del aula, quedando pocos ahí.
Iida, Uraraka y Tsuyu estaban hablando de aquella reunión en la biblioteca que tendrían en unos minutos; Todoroki se encontraba terminando unas notas de la clase anterior; Kirishima y Kaminari estaban platicando tratando de incluir a Bakugo en la charla, pero no duraron mucho ahí ya que salieron diciendo que tenían que ir al arcade.
Se levantó de su asiento, para hablarle, no le importaba si no estaban solos. Pero alguien se le adelantó.
-Bakugo - se quedó de pie, viendo cómo el rubio volteaba a ver a Todoroki.
-¡Largo escoria de dos caras! - decía mientras tomaba su mochila y se levantaba de su asiento pero no logró hacerlo del todo, porque el chico de doble quirk le tomó de su corbata jalándole hacia él.
"¡No!...¡Lo va a besar!". Y reaccionó sin pensarlo, posicionándose detrás del chico explosivo, tomándolo de la cintura y su frente, jalándolo hacia atrás. -¡KACCHAN ES MÍO, NO TE ATREVAS A TOCARLO! - gritó viendo directamente a Todoroki, que por la impresión soltó la corbata del ojirubí.
Casi al instante se dio cuenta de sus palabras y sintió su cara arder, dejando libre a Bakugo, quien se había quedado impactado por su reacción así como todos los presentes. Hubo un silencio incómodo.
Notó una sonrisa en el rostro de Todoroki que lo descolocó ¿por qué sonreía?.
-Deku, tu ...- Bakugo comenzó a articular palabras, girándose hacia él y de nueva cuenta, salió corriendo del lugar sin regresar a ver a nadie.
¡¿Qué había hecho?! No era algo que hubiera pensado fuera capaz de hacer, pero sintió pánico al ver cómo Todoroki estaba totalmente dispuesto a besar a Kacchan, sin ningún tipo de vacilación, y no pudo soportarlo. Los celos le ganaron. "Kacchan es mío, sólo mío", esas palabras se repitieron miles de veces antes de ir a gritarle al heterocromático.
Moría de la vergüenza. No sabía si podría regresar a la escuela después de eso.
Una parte de él no se arrepentía, pero otra le decía que la había fastidiado y muy feo. ¿Qué pensaría Kaachan de él? Seguro lo odiaría.
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Me he esforzado demasiado para escribir esto hoy (para encontrar el tiempo xD), sé que no es obligación subir capítulos en días seguidos pero no puedo dejarlo así.
¿Qué les pareció? Yo estoy toda emocionada jajaja.
Nos vemos pronto.
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Exclusivamente mío [Katsudeku] [Decchan]
FanficTenía que demostrar que aquella persona le pertenecía, por más egoísta que pudiese parecer, no le importaba, debía quedar claro que él era exclusivamente suyo. NOTA: La portada no me pertenece, créditos a su respectivo autor.