La luz de mi futuro se va oscureciendo más. El camino hacia un sueño que perdí por un amor inmaduro. Mi ambición peligrosa como un hacha, afilo el filo pero, con insoportables codicias, el arma se ha vuelto opaca.
Esta oscuridad es el demonio con un nombre diferente. Grito "no tomes mi mano", pero mi conciencia está perdida.
Siento el filo de la realidad mientras pasan los días. Destrozada por la realidad, teñida de rojo por la sangre. Nunca pensé que esto se convertiría en el cuerno que llama por el infierno.
Respirar, no puedo respirar. Cierro los ojos cada noche en una realidad hecha pedazos para despertar y ver las minas rodearme. No puedo soportar las crueles miradas de la gente a mi alrededor.
La maldad es demasiado perversa.