Capitulo 44

25 10 6
                                    




CONTENIDO SEXSUALON 7u7

POV'VIED

- ¿Cómo es posible que pensabas irte sin decir nada y nadie? – sí, esa es Esther siendo pues ella.

- No es para tanto así que no entiendo porque es que te pones de esa manera, no hagas tanto escándalo – cuando les digo que su cara era de total dramatismo.

- Gracias Genevied, por haberme informado que te ibas de un país al que solo vine por ti, por si no recuerdas soy tu mejor amiga y te aconsejo que hables con Melany antes de que también la pierdas, aunque de eso ya sabes bastante – y se fue, solo asi, de la nada.

- Bueno parece que alejar a las personas es un don tuyo y yo creyendo que era algo que solo hacías conmigo, pero ya lo entiendo todo – no entiendo como con solo abrir la boca Demond puede arruinar más esto.

- No es que haya venido por ti ni nada por el estilo, solo lo hice porque Esther estaba preocupada, creo que deberías disculparte con las dos y tener una charla con Melany – a pesar de todo lo que ha pasado acepto el consejo de Nicolás porque para ser sincera no sé qué más hacer.

Me pase toda la tarde buscando a Melany, ya me había disculpado con Esther asi que no tenía que preocuparme por eso y Melany no aparecía, estaba en el departamento, ya eran las diez de la noche y todo estaban allí cuando recibo una llamada.

- ¿Si? ¿Enserio? Muchas gracias Marcus – termino la llamada – Bien, un buen amigo de Londres me aviso que Melany está en una fiesta en su casa y está muy borracha asi que les agradecería que me acompañaran para buscarla.

- Claro, vamos, te acompañam... ¿Dónde está Saimon?

- Se fue hace como dos horas a una fiesta o no sé, según él era muy deprimente este ambiente – dice Demond aun sin mirarme, bueno tampoco es como si me importara mucho.

Nos pusimos en marcha hacia la fiesta, subimos al auto que Demond había rentado y antes de poder subirme en la parte de atrás Nicolás y Esther lo hicieron dejándome a mi delante con el estúpido.

- ¿Me vas a dar la dirección o qué? – comencé a buscarla en el mensaje que me envió Marcus – Puedes ser un poco más lenta, por favor? – me dice con sarcasmo.

- Si dejaras de ser tan petulante tal vez la encontraría más rápido.

- Como sea, solo date prisa – le paso la dirección y él la pone en el GPS, nos ponemos en marcha y llegamos en pocos minutos, todos nos bajamos del auto y entramos a la fiesta.

Todo está como lo normal, personas por todos los lados, besos de todo tipo, alcohol y drogas.

- Genevied, por fin llegas, para serte sincero he perdido a Esther hace unos minutos, mi casa es tan grande que a veces hasta yo me pierdo y si quieres podría ayudarte.

- Muchas gracias por tu ayuda, pero venimos a buscar a alguien y al parecer tu sentido de orientación no es muy bueno asi que lo haremos nosotros – Demond lo esquivo totalmente y me llevo con él, sonreí un poco y es que tal vez me gusto un poquito.

- Bien, vamos a separarnos, nos reuniremos en este mismo lugar más tardar a las dos de la mañana.

POV'SAIMON

Había estado toda la noche bebiendo en esta aburrida fiesta y no hay nada interesante, solo un par de chicas ebrias e idiotas creyéndose lo mejor de la elite, hasta que encontré a Melany en un rincón.

- Salmon, pero si eres tu – miro varias veces detrás de mí ya que está mirando en esa dirección, pero hablando conmigo.

- ¿Hola Melany, Que haces aquí? – dura unos tres minutos para responderme, creo que está demasiado ebria aunque yo no puedo hablar tampoco.

- Pues sí, pero no, ya sabes que ese chico de haya me dio esto y pues creo que estoy viendo pandicornios – si, esa fue la señal para sacarla de aquí.

- Sí, claro, mejor vamos a otro lado – la sujeto por el brazo y la llevo escaleras arriba, en el camino sigue balbuceando cosas que no entiendo y no quiero entender.

Al encontrar una de las habitaciones vacías entramos en ella, Melany se comenzó a portar muy raro aun estando ebria, estaba tocando las paredes mientras hablaba en voz baja.

- ¿Estás bien Melany? ¿Qué te pasa? – me acerque a ella y estaba sudando como si hubiera corrido un maratón.

- Las paredes se cierran, ¿no? ¿Hace mucho calor, Tú no tienes calor? Yo estoy ardiendo – y sin más se comenzó a quitar la ropa como una loca desesperada.

- ¿Tranquila , pero que te pasa? – de repente se quedó quieta, mirándome, sus ojos parecían de un verde penetrante, vividos y calculadores pero al mismo tiempo tenaz e inocente, le quite la bebida de la mano y al olerla era lo que me esperaba.

- Esther ahora no eres tú misma, te han dado la droga del amor, tienes que calmarte, tú me odias y no sientes nada por mí, ok? – pero en sus ojos solo se veía una gran empatía, no les mentiré, eso me gusto, pero no era ella y de un momento a otro su mirada paso a ser la de una depredadora y se me abalanzo encima.

Su boca fue directo a mi cuello y comenzó a dejar besos húmedos, lo disfrutaba, pero tenía que detenerlo.

- Melany, tienes que parar, no eres tú y mañana te arrepentirás de esto.

- Vamos Saimon, tú quieres esto tanto como yo, mañana nos preocupamos por los detalles – sé que estábamos bajo el efecto del alcohol y ella de una droga, pero en sus ojos no había dudas y eso me hizo reaccionar.

La bese apasionadamente, me di la vuelta y quede encima de ella, su mirada y cuerpo estaban encendidos en llamas lo que para mí era un placer, le arranque el pequeño vestido que llevaba puesto, mis manos fueron directas a su punto G y comencé a tocarlo suavemente mientras escuchaba sus pequeños gemidos en mi oído.

- Quiero mas Saimon, hazme tuya por completo, dámelo todo.

- Esas son órdenes para mí - mis dedos se introdujeron más dentro de ella y sus gemidos crecieron, su cuerpo estaba por completo arqueado lo que me dio tiempo a quitarle el sostén, fui dejando besos mojados por sus pechos mientras la sentía más y más mojada en mi mano.

- Oh si, mas Saimon, más rápido – sus gemidos llenaban el silencio de la habitación y no había melodía más hermosa para mí.

- ¿Estas lista para mi Melany? Todavía hay tiempo para parar esto.

- Solo hazlo mojigato – eso me hizo sonreír al igual que a ella y esa fue mi señal, Melany se deshizo de mi camiseta y mis pantalones. Mis calzoncillos desaparecieron en algún lugar que no recuerdo, pero mi erección era bastante notable; me introduje lentamente en ella, pero antes de terminar Melany ya estaba arriba mío moviéndose como una total fiera.

- Mas Saimon, necesito más de ti, lo quiero todo – de mi boca salían algunos gemidos que eran callados con sus labios para luego volver hacer lo mismo, ella seguía encima mío mientras ambos llegábamos poco a poco al orgasmo.

- Falta poco , solo espera un poco más – y asi llegamos al punto más alto de excitación para ambos, caímos rendidos y todo sudados en la cama, nuestras respiraciones eran entrecortadas; ella se acostó en mi pecho, pasé mis brazos por debajo de ella y la atraje más hacia mí.

- ¿Crees que nos arrepintamos mañana de esto? – le logre preguntar.

- No me interesa, solo quiero que sepas que esta fue una noche que repetir – en su mirada había ese aire juguetón entonces entendí cuando se subió encima mío de nuevo, quería segunda ronda y yo estaba ansioso por dársela.

Liberando sus Demonios (Serie Demonios #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora