Liberando sus Demonios (Serie Demonios #1)

Capitulo 40

POV'VIED

Estar con mi madre es uno de los sentimientos más increíbles que he sentido, ya han pasado dos días y no puedo estar más maravillada con ella, es como volver a conocerla, le conté lo de Michael bueno solo que esta en el hospital y lo que le ocurrió pero no el porqué en especifico, ya que fue por mí, aun tenemos que hablar sobre muchas cosas y creo que ya es hora de que lo hagamos.

- Mama creo que este sería un gran momento para...

- Lo sé, para explicarte como paso todo, será mejor que tomes asiento – hice lo que me dijo, tome una silla y me senté a su lado, esta respiro profundo.

- Como ya sabes Kirk y yo fuimos novios por un largo tiempo, yo había salido de Italia por el narcotráfico que había en mi familia, yo jamás quise esa vida para mí, pero entonces conocí a Kirk, me enamore profundamente de el, lo acepte aun sabiendo que él estaba dentro de algo por lo que yo había dejado mi familia y hogar, lo acepte porque lo amaba y no me arrepiento de ello.

- Al mudarme a Rusia, pues ya no fue lo mismo en la universidad conocí a Sebastián, al principio me dije a mi misma que solo éramos amigos pero no pude seguir negando lo que era bastante obvio así que paso lo que tenía que pasar, con Kirk las cosas no terminaron bien, al final de mi embarazo, cuando naciste inmediatamente supe que eras su hija, pero me puse a pensar en todo lo que tendrías que aguantar al meterte en el mundo de Kirk, no quería que pasaras por lo que yo pase así que Sebastián se ofreció hacerse cargo de ti y yo le dije a Kirk que tu no eras su hija – ella me miraba con miedo a como reaccionaria pero la verdad es que con ella todo era diferente, me infundía paz, estaba tranquila.

- Porque nunca me hablaron de ello? No es para nada bonito descubrir que las personas que más amas en este mundo te han mentido toda tu vida y que para una de ellas solo fuiste el medio para estar con una mujer y...

- No no no cariño Sebastián siempre te amo, desde el primer momento que te vio prometió jamás lastimarte, estar para mí y para ti siempre – dijo mientras me sujetaba el rostro, me deshice de su agarre y comencé a respirar con dificultad.

- Parece que eso no le salió muy bien, por su culpa estas aquí, por su culpa Kirk ataco nuestra casa ese día, por su culpa no solo mueres tu sino que yo también casi muero, no solo me oculto el hecho de que no es mi padre sino que también el de que estabas viva, yo me hundí en lo más profundo de la mierda, hice cosas terribles, caí en algo de lo que el prometió mantenerme alejada cuando ni el pudo alejarse de eso – la cara de mi madre era de sorpresa, sabía que tenía que detenerme pero en ese momento no podía, una risa ronca y malévola comenzó a brotar de mi.

- Ah, no lo sabías? Tu amorcito, el hombre perfecto, tu príncipe azul esta mas hundido en el narcotráfico que el propio Kirk, por eso este lo mando atacar la casa esa noche, por eso estas en esta maldita cama sin poder pararte.

- Genevied tranquilízate, respira... - el aire no estaba entrando bien a mis pulmones pero aun así seguía hablando, no quería parar.

- Que me tranquilice ni una mierda, sabes qué? Yo estaba con Kirk, si, trabaje para él y cada hombre que mataba de mi querido papi, toda la sangre que tengo en mis manos que pertenecen a sus hombres, la disfrute con cada gramo de mi ser.

- Genevied, como es posible que digas eso? Como es que tu...? – su cara estaba toda horrorizada.

- Como es que yo soy capaz de todo esto? No sé, tal vez sea por mis genes, los cuales tú quisiste negarme pero tranquila mi querido papi Kirk no dejo que me pasara nada excepto cuando intento matarme.

- Genevied solo no trates a tu padre así, el siempre te quiso.

- Que él no es mi PADRE – tire un florero al piso el cual se hizo añicos al instante, mi respiración era entrecortada, Salí hecha una furia , cuando iba saliendo Demond venia entrando, este intento detenerme pero yo salí corriendo del hospital.

POV'DEMOND

Genevied salió como una loca de la habitación de su madre, al entrar había múltiples pedazos de vidrio en el suelo, su madre estaba llorando y me acerque a ella inmediatamente.

- Que paso aquí?

- Ahora no, solo ve tras de ella, no quiero que le vaya a pasar algo, ya es tarde y esto no es muy seguro a estas horas de la noche – hice caso a su consejo y salí a buscar a Genevied lo más pronto posible.

Estuve caminando aproximadamente una hora y no encontraba a Genevied por ningún lado, escuche que al final de la calle en un callejón sin salida se podían escuchar múltiples sonido, camine despacio mientras verificaba que no me estuviera siguiendo nadie, al llegar al callejón podía divisar dos sombras pero no estaba seguro.

Al adentrarme más me di cuenta que quien estaba ahí era Genevied con un tipo, me apresure a llegar a ella pero mi sorpresa fue demasiado grande, Genevied estaba toda manchada de sangre, el tipo estaba en el suelo, su estomago abierto, todos sus órganos estaban fuera y aun así Genevied seguía acuchillándolo parecía que estaba poseída mientras lo hacia se reía, parecía una lunática total, la despegue del cuerpo sin vida del hombre, los ojos de este estaban desorbitados, como si le hubieran sacado su hígado y se lo echaran en la cara, cuando la sujete por la cintura esta se retorcía en mis brazos mientras gritaba a todo pulmón.

- Suéltame Demond, te matare si no me sueltas – y no lo decía en broma, al voltearse clavo su cuchilla en mi pierna y yo la mire horrorizado.

- Pero qué demonios te pasa, estás loca?

- Te recomiendo que sea la última vez que te me acercas así, para la próxima la cuchilla clavada en tu pierna no será nada – con una sonrisa me retorció la cuchilla a un más profundo y luego la saco mientras reía – acabas de ver al Diablo a los ojos Demond, espero que sobrevivas, la mayoría no puede soportarlo.

 Y sin más desapareció, no dijo más nada, solo se fue y me dejo desangrándome en medio de la obscuridad, esta chica tiene más lado de los que me esperaba y no creo que todos ellos me agraden.