Intermedio

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Kara caminaba con una sonrisa bien estampada en su bonito rostro, a pesar de sentirse consternada por la noticia que escucho, sobre la muerte de su primo, no podía de dejar de sentirse feliz al saber que la niña de la enfermería era su sobrina.

¡Vamos! que ella era Supergirl y por supuesto que su oído había captado si no toda, si las partes importantes de la conversación que sostuvieron los siete fundadores y el invitado inesperado.

Y aunque le molestaba un poco que esa niña junto al Batman del futuro hubiera logrado entrar a la Atalaya y ponerlos en ridículo tan fácilmente, de cierta forma, también se sentía orgullosa de saberla parte de su familia.

Una noticia que la hizo realmente feliz, tanto que no tardo ni dos segundos en apersonarse en la enfermería para verla. Ahora estando ahí parada frente a la camilla podía notar ciertamente el gran parecido físico que la jovencita tenía con Kal-El.

Porque ese color de cabello era idéntico al de su primo, pero sin duda, la elegancia innata y el gesto sereno que solo una muñeca de porcelana podría mostrar le pertenecía al Caballero de la Noche. Nunca se lo diría a su primo a la cara, pero entre sus recuerdos del planeta Kripton y los actuales no había nadie capaz de superar el porte aristócrata y la sublime belleza del heredero Wayne. Simplemente Bruce era un hombre perfecto en cuanto físico.

Kara suspiro con emoción al pensar en Bruce y Clark juntos, ellos hacían un gran equipo, y ahora, "TENIAN UNA HIJA". La rubia apenas contuvo el grito que pugnaba por salir de su garganta debido a la emoción.

Con cuidado tomo asiento al lado de la cama y con aun mayor delicadeza sujeto la mano de la pequeña.

—Hola. Soy tu tía, Kara. —Se presentó sonriendo espléndidamente. —Espero que podamos ser buenas amigas. —Su tono era alegre y parecía esperaba que como por arte de magia, la niña abriera los ojos. Se imaginaba la escena, ellas se mirarían y se reconocerían como familia a pesar de gran abismo de tiempo que las separaba.

Sería tan bonito.

Un leve estremecimiento de hombros de la chiquilla en la camilla fue el prólogo de una fuerte sacudida, el cuerpo menudo convulsionaba entre los brazos de Súper chica quien solo atino a sujetarla lo más delicadamente que la situación se lo permitía. Kara emitió un grito desesperado pidiendo ayuda, sin soltar a la niña.

Jhon Jhon, entro a la habitación seguido de dos hombres más con bata blanca.

Kara miraba con los ojos llenos de lágrimas lo que estaba sucediendo. Su mente arroja un sinfín de posibilidades, sin embargo en ninguna era de ayuda, por tanto hizo lo único que considero de provecho, salir de ahí y dejar que los médicos la atendieran.

&&&(...)&&&

Terry observaba el monitor con un gesto de aprensión porque sin duda algo no anda bien. Superman volada indiscriminadamente, casi se atrevería a decir que como loco. Dick permanecía sentado con los brazos cruzados y con el rostro blanco como una hoja de papel pero consiente que su indirecta, muy directa, había llegado clara y concisa al Batman futurista.

—Jasón. —McGinnis siseo el nombre, no tenía ni tiempo ni ganas para estar siendo amable. —¿Dónde encuentro a Red Hood? —Soltó mirando directamente a Nightwing quien apretó los labios. Una pelea de miradas se desataría.

—Ammmm.... —Jhon Jhon carraspeo con la garganta interrumpiendo al par, luego fijo su atención en el chico con el traje futurista de su aliado, no sabía cómo llamarlo. —Batman —dijo al fin haciendo gruñir a Dick. —Tenemos problemas.

Terry, lo observo solo unos segundos antes de entender qué clase de problemas, pues el detective marciano estaba a cargo de Lucifer.

—¿Dónde está ella? —Pregunto McGinnis a la carrera sin ni siquiera detenerse a escuchar la respuesta, pues sus pies ya corrían en una dirección incierta.

El extraterrestre lo tomo del brazo, luego haciendo gala de sus poderes lo hizo atravesar varias paredes. Cuando entro en la sala, Lucifer se encontraba sobre una cama atada de pies y manos.

—Esto está mal. —Susurro Terry restregando su cara con las manos, un instante después dejo que su cuerpo impactar contra el suelo en una caída controlada y derrotista. —Tenemos que encontrar a Bruce, si Jasón, se atreve a... —murmuro Terry sintiendo el peso de sus decisiones más pesadas que nunca.

Jhon Jhons no necesito que terminara la oración para saber a qué se refería.

—El futuro cambiara, y no puedo decir que para bien. Además no estoy seguro si la semilla, pueda asimilar otro ADN que no sea el que está programado. Podría mutar y trasformase en algo dañino para Bruce, o incluso nacer y... —Terry estaba soltando cada idea sin filtro, solo empujado por el deseo egoísta de dejar salir todos sus temores. —¡Dios! Esto no debería estar pasando, Bryce ya sufrió suficiente, no entiendo porque el destino se ensaña con él.

Jhon Jhons, miro al chico con algo parecido a la ternura. A diferencia del original, este Batman tenía menos control sobre sus sentimientos, era... más humano. Menos frio y mucho más cálido, cuanto deseaba que su amigo y aliado tuviera más de ese clon futurista. Que les permitiera estar a su lado no como una imposición o beneficio, sino unidos por una amistad real y duradera.

Y motivado por ese deseo dijo —No te preocupes, daremos con él. Te lo prometo.

Los ojos azul marino de Terry lo observan, perdidos y al mismo tiempo esperanzados.

Tal fue el sentimiento en esa mirada que por primera vez el marciano considero que era una promesa que debía cumplir a toda costa y a cualquier precio. No permitiría que ese chico terminara con aquel enclaustramiento emocional que padecía Bruce. Las cosas debían mejorar, al menos en el futuro.

Continuara...


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