Recomendación: ya saben que hacer, escuchar Entre Mis Brazos -Lu. Es una de mis canciones favoritas de la adolescencia y quería incluirla en alguna historia y creo que queda bien para la trama.
Advertencia: no me hago responsable de lo que pueda causar este cap. n,n.
Han pasado 4 meses desde el dia que cometieron aquella locura en las calles de San Fransokyo, desde que tuvieron que explicarle a la familia Rivera que todo se había ido al carajo, cosa que nadie se había sorprendido en lo absoluto, porque los dos eran igual de arrebatados, pero asi los amaban, y querían que duraran todo el tiempo posible juntos, y nunca se separaran.
Han pasado 4 meses desde su magnífica luna de miel en Italia, Venecia y Praga, y la fiesta que la familia los preparo, pues ya tenían todo planeado y listo, y el pueblo esperaba la gran boda de Miguel Rivera con el profesor universitario, asi que al menos la celebración si se realizó como se tenía planeado, en grande y con todo el pueblo, ambos solo no habían parado de sonreír.
Todo eso había ocurrido en los últimos 4 meses, también que a Hiro le habían regresado su trabajo en México, y a Miguel querían que terminara sus años de estudiante, y ahora acto eran marido y... marido, pues no rompían ninguna regla y podían ambos volver. La universidad había cometido el error de perder a su mejor profesor, y a su prodigio musical, los querían de regreso.
Asi que también habían vuelto por ello, habían regresado al departamento de Hiro, donde ambos ahora Vivian juntos, ya que seria raro que Miguel viviera en los dormitorios cuando ya era hombre casado y muy feliz.
También en ese tiempo, había ocurrido una cosa, un pequeño detalle que seguramente les cambiaria la vida desde ese preciso momento.
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-Ya, tranquilo.
Ya habían sido dos semanas desde que ocurrió esto, todas las mañanas al despertar y antes de irse a la universidad, Hiro terminaba en el baño devolviendo el desayuno, o el estómago vacío, esto provocaba que su mal humor aumentara, y que sus alumnos o hasta Miguel sufrieran las consecuencias.
Asi que ahora, otra vez estaban en el baño, Hiro devolviendo todo lo que había cenado, y Miguel sosteniéndole el cabello para no ensuciarse, y con la otra mano sobándole la espalda, no le agradaba el olor, ni la situación, pero amaba demasiado a su esposo como para rezongar por el estado de este.
Veía como el japonés temblaba cada que algo salía de su boca, podia notar en momentos, algunas lágrimas, ya estaba cansado y adolorido, pero aún no podia parar.
-Amor, por favor, vamos al médico, podemos avisar que no asistirás hoy.
Hiro por fin le soltó la cadena al baño, ya había terminado, ya sentía el dolor de haber hecho esfuerzos, se sentó a espaldas de la taza del baño, recargando su cabeza en el pecho de su marido, sosteniéndose el estomago por al dolor, ya eran dos semanas de esto y se estaba cansando, había evitado el cenar y hasta desayunar para evitarlo, pero aun asi no cesaba el vómito, ni malestares, se sentía débil por el cansancio y la falta de comida para no pasar esto, ya se veía enfermo.
-Está bien.
Miguel suspiro, había estado pidiéndole esto desde hace días, pero no había aceptado, siempre decía que se pasaría, y no era cierto no pasaba, y mas al saber que se saltaba comidas, que se vea cansado, y extrañamente había obtenido un poco de peso, eso había molestado mas a Hiro que a nadie, aunque el calculaba por el esfuerzo de las mañanas y el cambio tan drástico en su metabolismo, por la única comida que hacía y era considerablemente grande, tal vez eso había sido.
Miguel aliviado de la decisión de su esposo, lo ayudo a levantarse, siempre cuando se ponía asi, estaba más débil, lo ayudo caminar de regreso en la habitación y lo ayudo a sentarse, el japonés solo miraba a su marido buscar ropa para que se pusieran, ay que llegar en boxers no era recomendable en un hospital, a menos que fuera suma emergencia y no pudieran cambiarse.
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Higuel ❤️
RomanceTu un estudiante de musica, y yo el nuevo maestro de ingenieria, quien iba a pensar que una simple fiesta nos llebaria a donde estamos, quien iba a creer que por el alcohol, tubiste el valor de acercarte a mi, y yo de aceptar ir contigo, solo tenia...