Suspiro

Noche tranquila

Después de tener su encuentro con N, Jaewhan queda algo cansado por disfrutar de ese apasionado hombre.

—Debo de ser más precavido la próxima, N me mata cada vez que lo veo. — Yacía un hombre acostado en su cama, estaba tan feliz por estar con el pero al mismo tiempo estaba exahusto.

—Debo comer, pero... ¿Qué comere?
-En especial Jaewhan sufria cuando su pareja iba de viaje, por que no le gustaba cocinar, prefiria irse a comer a restaurantes, esta vez ni el hambre lo hacia parar.

-Suena el timbre de su casa, provocando una molestia ya que debía levantarse y caminar hasta la entrada de su propia casa. Pensaba morir de hambre hasta el día siguiente.

—¿Quien rayos sera? —Se decía a si mismo.

Abre la puerta y se encuentra a su segundo amante frente a el, con unas bolsas de comida, un vino y unas cuantas verduras en bolsas de papel.

—Hola Jae, iba de camino a casa y pensé que seria mejor verte y comer juntos ¿Puedo pasar?

—Hola Leo, realmente me sorprendes, sabes bien que no puedes venir a casa tan libremente.

—Si eso lo sé. Pero Wonsik me dijo que estaba de viaje y supe que estarías hambriento y solo. Anda cariño comamos juntos...

—Esta bien, me alegra que seas tan inteligente y que seas amigo de Wonsik. Estoy muy cansado... Podremos solo cenar esta ves, ¿sip?

—Oh me imagino, no te preocupes, hace tiempo que no te veo, quiero disfrutar tiempo contigo.

-Jae le ayuda con las cosas que traía y las deja en la mesa. Saca platos, unas copas y pone música para estar los dos.

Leo por su parte entra en la cocina y comienza a calentar lo que traia, sirve el vino y reúne todo para cenar.
—Cielo, ya esta servido. Sientate.
—Ya voy.

-Se sienta y sorbe un poco de vino. —Que gran gusto tienes cariño.

-Cenan y sus risas no paraban. Estar con Leo era distinto a cualquier otro amante, pues no necesitaban de tener sexo para disfrutar su tiempo juntos. El hecho que Leo lo escuchara con tanta atencion enamoraba a lo tonto a Jaewhan.

—¿Te gusta la cena? —Le pregunta Leo. —

—Claro cariño, amo cuando te preocupas por mi.

Roba un pequeño beso y se sienta arriba de el, para darle besitos en su boca, cuello y morder su oreja.

—¿Que harás esta noche? ¿Y si te quedas a dormir?

—¡Si! -La idea emociono a Leo y comienza a quitar los platos, limpia la mesa y prende la televisión.

—Nunca me has dejado dormir aquí, me emociona verte despertar. —Leo brincaba por la sala.

—Pareces niño pequeño. Vente vamos a dormir, me cambio y nos dormimos ¿si?
—Si, yo también me quito el saco.

——Espero y les guste. ❤️