Suspiro

Mi vida

¿23 años? — Dice sumamente sorprendido.
Taemin es un chico dulce, agradable y justamente tenía dudas acerca de su sexualidad. Le gustaban tanto hombres como mujeres.

—¿Puedo preguntar que hace usted? Bueno perdón, tu ¿Que haces acá? ¿En que trabaja? —Saca su celular y revisa los mensajes, Jaewhan no le había enviado nada, odiaba eso; cada vez que salía de viaje se le borraba de su memoria que tenía un novio.

—Yo soy bailarín, imparto clases de baile y soy también asistente para artistas. ¿Tu?
    —Soy veterinario, viajó y esta vez me toco venir acá. ¿Bailarín? Suena divertido.

Llegan a su destino, Taemin es el primero en bajar, sabían que esa coincidencia jamás volvería a pasar y cada uno se llevo un buen sabor de boca por ese breve encuentro.
      —¡Que te vaya bien! Fue un gusto conocerte, hasta pronto.
—¡Gracias!

Wonsik cierra la puerta y se queda pensando en lo bello que había sido el conocer a alguien así. Tan sencillo y a la vez tan complejo.
Cierra los ojos y lo recuerda, había olvidado preguntar su número. Total, tal vez nunca más lo volverá a ver, esta bien al final de cuentas.

Llega a la granja, se "enfría" un poco y sale dispuesto a trabajar. Si se apresuraba podía tener tiempo para conocer la playa de aquella región, era una lástima; Jaewhan no está con el para visitar aquellas olas, pasar una tarde mojados y reír un poco como antes.

—Aquí parece el mismo infierno

Dice limpiando su sudor. Se tira con un cansancio enorme en la cama y observa su reloj.
—Es tarde pero puedo ver esas bellas olas, puedo mojarme.

Se quita su camisa, se deja un playera ligera y un shorts verde, se estira y toma sus sandalias. ¡Al fin estaba listo!
Iría a ver esa playa. Caminaba solo, con sus pensamientos corriendo detrás de él, de pronto una mano recorre su espalda.

———¿Quien es? Oh, ¿Taemin?
—Hola Wonsik, es un gusto verte aqui, en verdad no creí volverte a ver.
———Yo realmente —Sacude su cabeza y sonríe —Que gusto verte.

Recorre la playa con el, observaba su cuerpo, sus sonrisas, su cabello, sus pectorales, sus labios; ¡Diablos! Taemin era sublime y mas con tan solo un shorts pegado a esas largas piernas.

——Taemin, ¿puedo preguntar algo?
—Si claro. Dime
———¿Tienes novia? O ¿Novio?
Taemin solo rie por la tierna curiosidad de su acompañante y se deja caer en la arena.
—No tengo, me gusta alguien.
———Que afortunado aquel que te gusta.

Taemin se le avalancha encima y lo tira a la arena junto a el, colocando su pierna entre las suyas, acercándose peligrosamente a el.

—Si te digo algo ¿Creerías que estoy loco?
———No, tu no eres loco.
—Me gustas Wonsik, te acabo de  conocer por deos.
———Te digo algo más loco, me gustas también.

Ambos en aquel atardecer se besaron sin pensar en tantas cosas en contra. Wonsik había engañado previamente a Jaewhan con N. Tenía esas dudas sobre su relación, si perderse y jamás volver.

Por parte de Taemin, sus constantes cambios de pareja hacia que tomara experiencia en su desempeñó sexual, pero significaba un corazón roto a cada corto tiempo. Con ese sexy chico que tenía debajo de el rezaba que esta vez no pasara lo mismo.

Ambos despertaron en la mañana, completamente aturdidos. Habían parado en la habitación de hotel de Taemin. Significaba un comienzo para ese par de infieles.

—Diganme que les parece. Realmente me motiva saber que les pareció, motiva.