Despertamos muy temprano para continuar el viaje.
Apenas y tuve tiempo de guardar mi manta en la mochila, cuando los demás estaban ya montando los ponis.
Gracias a Ori, logre organizarme y recoger todo.
Aun con todo este tiempo.
Su rutina seguía tan arraigada a sus costumbres hobbit, que aún le costaba seguir andando sin tomar al menos dos desayunos.
Si seguía así desfallecería pronto.
-no se ve bien señor Bolsón-
-estoy bien Balín, será mejor apurarnos o nos dejaran atrás-
Balín solo negó brevemente, antes de comenzar a andar.
Era obvio que no lograría nada y solo harían enojar a Thorin.
Y no deseaba más ver su mirada molesta.
Le dolía mucho tener que verla.
El odio del rey bajo la montaña, era un gran peso para su corazón.
-se lo que piensas muchacho-
-Balín yo...-
-no digas nada, te entiendo perfectamente-
-no sé cuánto más te pueda aguantar-
-sé que es difícil muchacho, pero las mejores cosas cuestan más-
-aun así, estoy apostando todo en algo que....solo mírame Balín, y míralo a él....no tengo nada...-
-tienes un corazón muy noble, eres un amigo incomparable, y un valor que ni usted mismo conoce-
El solo pudo sonrojarse.
Jamás nadie la había dicho algo así.
Y se sentía muy bien saber que alguien pensaba de esa forma tan maravillosa de su persona.
-gracias-
-vamos chico, tenemos que apurarnos-
Con el ánimo al máximo tomo sus cosas.
Y comenzó a andar mientras silbaba.
Esa sonrisa en su rostro, ni nada ni nadie se la quitarían.
*
*
Bilbo esta tan feliz hoy.
Se ve radiante, cual pieza de oro entre las oscuras piedras de la montaña.
Como me encantaría verlo recostado en el oro de mí pueblo.
Volver a ver esa piel desnuda cubierta de monedas doradas.
Mientras escucho los gemidos de...
-tío tienes que ver esto...-
Entre las ramas había largos pelos negros.
Un animal enorme.
Y parecía haber estado rondando la zona.
-no debe estar lejos, apresuremos el paso y...-
Fuertes gritos, uno de sorpresa y los otros parecían risas.
Cuando corrieron al encuentro con los demás, encontraron a Bilbo siendo atacado por una feroz horda de conejos salvajes.
Quienes no paraban de brincar sobre el hobbit.
-¿Qué paso aquí?-
-Bilbo trato de alimentar conejos y ahora quieren robarle la comida-
Gandalf apareció entonces riendo, mientras movía un poco su bastón para espantarlos.
-sabía que no podrías evitarlo muchacho-
-no espere que se pusieran tan alegres-
-explícate Gandalf-
-los hobbit siempre atraen a los animales, por eso la comarca es tan pacífica.
Existe alguna especie de pacto entre hobbit, animales y plantas-
-es una especie de don hobbit-explico Bilbo.
-es por eso que alimentas a escondidas a los ponis-pregunto Fili.
-yo...yo...no sé de qué hablas-
-vamos todos te hemos visto muchacho-
-dejen ya al señor Bolsón, advirtió Balín.
-debemos seguir andando entonces-ordeno Thorin.
Mientras trataba de aguantar la risa y el sonrojo, al ver lo adorable que se veía Bilbo en ese momento.
Con el cabello y la ropa desarreglada, además de un enorme sonrojo en todo su rostro.
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Mi Hobbit
FanfictionNo deseaba tener estos sentimientos hacia ti, pero ahora que me he decidido... TU SERAS MIO...