Llegada...

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La compañía entera estaba bastante feliz de volver a la comarca.

Sobre todo ahora que sabían que su amigo estaba vivo.

Maldita la hora en que le creyeron a Dis y a Thranduil, fueron muy ingenuos.

Aunque nadie podía culparlos por temer la ira de Dis.

-debemos estar cerca-confirmo Balín, quien sonreía tranquilo mientras montaba a su pony.

-sí, reconozco esos árboles-dijo alegro Kili

-vaya parecen que han sido años.-le respondió Ori.

Era obvio que el humor había mejorado desde la última vez.

Además la idea de volver a ver al catorceavo miembro de la compañía les aún más felices.

-lo primero que haré cuando vea a Bilbo será abrazarlo-aseguro Fili

-no si yo llego primero hermano.-

-eso jamás, eres demasiado lento-

Fili y Kili comenzaron una carrera, y eso animo a los demás.

*

*

*

-Dis...creo que algo malo pasa....-

Bilbo entro algo pálido a la cocina.

Dis solo pudo voltear a ver a su cuñado, notando lo mojado en sus piernas y el cómo se sujetaba la cadera.

-por todos los...Bilbo ESTAS EN LABOR-

-que hago-dijo asustado.

-primero cálmate...GIMLI LEGOLAS AQUÍ AHORA-

Ambos llegaron en segundos.

-si señora-

-escuchen necesito que busquen sabanas limpias, y tu Legolas calienta agua-

-claro señora-contestaron los dos.

Mientras ella llevaba a Bilbo de vuelta a la cama, tratando de recordar que había hecho ella cuando sus pequeños nacieron.

*

*

*

Todo era como todos recordaban, tan pintoresco y agradable.

-es esa-dijo eufórico Kili, mientras señalaba la pequeña casa.

-si reconocería esa puerta donde fuera.-le respondió su hermano.

Todos bajaron de sus ponys y corrieron hasta la puerta.

-BILBO....BILBO-gritaron varios de ellos.

Pero quien abrió no fue el hobbit.

Fue un elfo rubio.

-ustedes no pueden entrar-

Thorin se hizo camino entre sus enanos.

-porque no, vine a ver a Bilbo y no nos iremos.-

-no es un buen momento, así que mejor váyanse, podrán volver...-

-LEGOLAS TRAE EL AGUA-

Thorin empujo al elfo y corrió a donde se escuchaba la voz de su hermana.

De golpe abrió la puerta.

Y encontró a Bilbo, con las piernas abiertas y en alto, sosteniendo aquel huevo de dragón.

Gritando de dolor.

-que esta...-

-lárgate Thorin...-

-tho...Thorin...-

-Bilbo-susurro afectado y corrió a tomar su mano-que tienes-

-duele...-

-qué puedo hacer-

-ve por el agua....AHORA-grito Dis.

Thorin corrió por lo que se le había pedido.

Legolas por suerte le alcanzo cerca de la puerta y le entrego una gran jarra de agua.

Así que volvió de inmediato.

Era una suerte que hubiera estado en los partos de su hermana.

Reconocía a la perfección los síntomas.

-estoy asustado Thorin-

-yo estoy aquí mi amor-

-concéntrate Bilbo-le dijo Dis

Mientras Thorin tomaba su mano.

-hare esto rápido Bilbo.-

Con cuidado tomo una daga, y aprovechando que Bilbo se había tomado ya él te para anestesiarlo.

De un movimiento rápido y firme corto la piel.

Una incisión lo suficientemente grande para sacar al bebe.

-Thorin, yo sostendré aquí y quiero que tu tomes a tu hijo-

Este rápidamente se levantó e hizo lo que su hermana le pedía.

En cuanto Dis movió la piel y el introdujo su mano.

Movió un poco, y entonces lo sintió.

Era cálido y grande.

-lo tengo-

-sácalo con cuidado.-

Thorin le acuno en su mano, y le saco con delicadeza.

Lo primero que distinguió fueron los risos negros, aun con la sangre y el líquido que le cubría.

-golpéalo con cuidado-

Lo levanto con cuidado y golpeo con la fuerza suficiente para hacerle llorar.

Pero antes que pudiera decir otra cosa, el huevo comenzó a vibrar entre los brazos de Bilbo.

Y pronto se rompió.

Bilbo aun adolorido y mareado, ayudo al otro pequeño a salir.

Una pequeña garra roja se asomó de entre las paredes del huevo.

-vamos Frerin tu puedes-

Bilbo solo sonreía, tanto a su hijo como a su dragón.

-Thorin puedes darme a Frodo-pidió Bilbo.

Este solo asintió algo confundido.

Pero lo hizo.

-voy a comenzar a cocerte, si duele mucho dímelo-aviso Dis.

Thorin se sentó en el piso junto a Bilbo.

Todo esto era más de lo que esperaba.

-no pensé que...-

-no pude avisarte....pensé que no querrías verme-

-por un tiempo yo también lo pensé, pero ahora....perdóname-

-si pudiera te besaría, pero no quiero no moverme-bromeo Bilbo.

Thorin beso su cabeza, aunque era obvio que estaba confundido.

Y el pequeño dragón que olisqueaba a Bilbo no ayudaba en nada.

Mi HobbitDonde viven las historias. Descúbrelo ahora