Capitulo veintinueve

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◀ Accidente ▶

Mire expectante la reacción del pelinegro frente a mi, quien solo se encontraba mirando al frente, sus expresiones no me decían nada

—Ya lo sabía —dijo luego de un rato

Lo miré sorprendida —¿que? —fue lo único que pude decir

El río un poco —Lo sabia desde que te empecé a hablar —dijo, ahora si mirandome —digo, llevabas su nombre en la camiseta en el partido que nos conocimos, cada vez que hablas o escuchas de él, tus ojos se iluminan más de lo usual...ya lo sabia, Be. No soy tonto —dijo divertido

Lo mire apenada —Creeme que nunca quise utilizarte ni lastimarte...en serio quise darme la oportunidad de conocerte y creeme que no me arrepiento en lo absoluto —dije mientras ponía mi mano sobre la suya y le daba un apretón

—Lo se, Be. Y no lo hiciste, creeme. Valoro mucho el hecho de que te tomaras el tiempo de explicarme tus sentimientos. Lo único que quiero es verte feliz, te lo mereces —sonrió, y noté que su sonrisa era genuina

—Eres increible, Lucas... —dije con una sonrisa —¿puedo abrazarte? —pregunte

El me miro divertido —Vamos, puedes hacerlo cuando gustes —dijo mientras me enrollaba en sus brazos —no te libraras de mi tan rápido, enana. Nuestros almuerzos causales siguen en pie —Sonreí, agradecí mucho que Lucas fuera de la manera que era.

Y si, mi conciencia me ganó y luego de una semana en la que estuve debatiendo, me decidí a decirle a Lucas todo lo que estaba sucediendo. Siendo lo increíble que es, comprendió todo y estoy segura que justo hoy, nació una hermosa amistad.

Me despedí del pelinegro, ya que hoy me tocaba turno en la noche en el hospital. No es de mis favoritos, pero me tocaba estar de noche todo este mes.

Me encontraba en el cuarto de urgencias, todo estaba muy tranquilo. Aun era temprano, eran las siete de la noche recién. Como no había mucha actividad, aproveché para hablar con las chicas sobre todo lo que había sucedido, así que me fui a uno de los cuartos de descanso, aproveche para comprarme una galleta en una de las máquinas expendedoras que había de camino, y me senté en la cama.

—¿Cómo te fue? ¿Que te dijo? —pregunto Amelie apenas respondió a la videollamada

Tefi rodó los ojos divertida —Hola, Be. ¿Como estas? ¿Cómo va el turno? —pregunto mas calmada, algo raro en ella pero no me quejaba

—Todo bien, no hay pacientes aun. Anulo mufa, porque cada vez que decimos eso, llegan como veinte pacientes —dije cruzando los dedos —Respondiendo a la pregunta de Amelie, fui a almorzar con Lucas y aproveche para decirle todo. Su reacción fue mejor de lo que esperaba, digo, no me sorprende del todo...es un amor de persona

—¿Segura que no te gusta? Mira que se ven super lindos juntos —dijo Tefi

Yo lo pensé y negué —No me gusta. Al menos, no de esa manera. Mi corazon esta domado por otro francés que me vuelve loca —dije dramatizando, mis amigas rieron

—Hablando del francés, ¿has hablado con él luego del suceso en su casa? —pregunto Tefi

—Si lo dices así, pareciera que cog...

Yo la interrumpí —respondiendo a la pregunta de Tefi... —dije, a lo las tres reímos —No, no hemos hablado. Al menos no de ese tema en específico. Me ha escrito todos los días, dándome los buenos días, tardes y noches —sonreí inconscientemente —Me manda fotos muy seguido la verdad, pero no me quejo...

Ay...ya la perdimos, amiga —dijo Amy

Yo rodé los ojos, divertida —¿Ya les dijo que se irá a Rusia a jugar el mundial con la selección de Francia? —pregunte, a lo que ellas asintieron emocionadas —me dijo que fuera con él...

—¿Y qué le dijiste? —pregunto Tefi curiosa

Me encogí de hombros —Que iría con él solo si ya no estaba con Allison

Amy abrió la boca sorprendida —¿Y el que te dijo?

—Se quedó mudo, pero luego me dijo que estaba en proceso de terminar las cosas —respondí, ellas me miraron no muy convencidas

Antes de que pudiera decir algo, mi beeper o mensáfono comenzó a vibrar como loco. Decían que me necesitaban en urgencias, ya que habían pacientes politraumatizados.

—Las llamo luego, chicas. Me necesitan en urgencias —logré escuchar como decían "suerte" y "ve a salvar vidas", justo antes de colgar.

Corrí a la sala de urgencias, que no estaba tan lejos del cuarto de descanso. Cuando llegue, ya habia un compañero atendiendo a uno de los pacientes que acababa de llegar

—Bea, viene otro en camino —me indico mi compañero —Fue un accidente de auto, me indican que están bastante graves

Me puse una bata quirúrgica, unos protectores de zapatos y unos guantes, lista para recibir al próximo paciente y hacer lo que estuviera a mi alcance para salvarlo.

La ambulancia llegó en menos de lo que esperaba y se bajaron los paramédicos —Paciente femenina de aproximadamente veintitrés años, Glasgow de catorce, cursa con hemoneumotorax, se estabilizó en la ambulancia

Mientras escuchaba la información que me daban los paramédicos, movíamos la camilla y la adentramos a la sala de urgencias. Cuando mi vista bajo a la paciente, para buscar más lesiones, me sorprendí al ver a Allison, llorando y asustada. Casi me detengo, sin embargo, avance como pude.

—A la cuenta de tres, la pasamos a la otra camilla —dije mientras tomaba uno de los extremos de la sabana —Uno...dos...tres... —Allison ya se encontraba en la camilla, los paramédicos se fueron, dejándonos a mí, al doctor de urgencias y a dos enfermeras —Voy a necesitar accesos venosos —pedí, mientras tomaba entre mis manos la cabeza de la rubia e inspeccionaba que sus vías respiratorias no estuvieran obstruidas

—Bea...

La interrumpí —Sh...ahora necesito que guardes la mayor cantidad de energías posibles —dije, ahora inspeccionando que no tuviera ninguna lesión profunda en la cabeza.

—Necesitamos una radiografía de tórax —dijo el doctor, lo que no demoró mucho y todos nos apartamos para que pudieran tomarla.

Efectivamente, Allison tenía sangre y aire en sus pulmones, por lo que el doctor tuvo que intervenir y meterle un tubo en el costado para drenar toda la sangre posible. A todo esto, yo me encontraba ayudàndolo.

Una vez que el doctor logró estabilizar a Allison y todo se encontraba en orden, me dio la indicación de que llamara a sus familiares para que vinieran al hospital. Ni bien terminó de hablar, me quité los guantes y la bata sucia. No sabía exactamente a quién llamar, tengo entendido que en España, Allison solo me tenía a mi...y a Antoine.

Cuando pase por la camilla de al lado, note que la otra persona que había estado en el accidente no era nadie más, ni nadie menos que Saul. Dios mio.


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Capitulo editado!

Se puso potente el asunto jeje

Espero les este gustando tanto como a mi!!! <3

xoxo, itzjustmebae

TAKEN → Antoine Griezmann ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora